Chicos, si se dan a la tarea de leer un poco o ahondar en la nota verán que en realidad el Vaticano no se entromete en estos asuntos, ya que esto es simplemente una estrategia de ventas y marketing para promocionar la película y hacer que los consumidores (chicos de 13 - 22 años) acudan a los cines y no bajen el filme por internet.
Un consumidor promedio en el cine puede gastar hasta 50 dólares en los tickets, dulcerías, bebidas y souvenirs (en los cinemas que tengan estas salas), por lo que es un negociazo realmente decirles que "no vayan a verla", ya que en la psique humana es mas fácil animar a alguien prohibiéndole algo. Aparte, fíjense en el lenguaje utilizado y verán que usan palabras de impacto.
Amén de que casualmente mencionan a Harry Potter, la película donde Robert Pattinson se dió a conocer, por lo que no queda ninguna duda que es su mismo agente quien está detrás de la estrategia.
No se rasguen las vestiduras por estas cosas, simplemente véanlo como es: un PRODUCTO.