Para berrinches, los de Vela
Su estancia en el Arsenal parece haberle dado un cañonazo de soberbia, a pesar de no destacarse por cuestiones futbolísticas en el continente europeo. Carlos Vela escribió ayer otro capítulo negro en su corta carrera al hacerle, supuestamente, un desplante al técnico nacional Efraín Flores.
Corría el minuto 73 del juego entre la Selección Mexicana y su similar colombiano cuando, según los comentaristas de TV Azteca, el estratega tuvo que apresurar a Vela para que pudiera ingresar a la cancha. Según la narración, Flores llamó al mismo tiempo a Javier Orozco y al ‘Bombardero’, pero la lentitud de este último provocó que el goleador del Cruz Azul ingresara primero.
Después de ponerse las espinilleras y la camiseta con toda calma, Vela se dirigió hacia donde estaba el timonel con cara de pocos amigos, al grado de no verlo a los ojos mientras le daba las instrucciones sobre lo que tenía que hacer en la cancha; lejos de eso, Carlos caminó, dejando a Flores con las indicaciones en la boca, tomó la tarjeta de cambio y espero a darle la mano a Giovani dos Santos, jugador a quien sustituiría.
Tal vez la reacción del delantero ‘gunner’ obedeció a que inició el encuentro en la banca o quizá porque, a su consideración, ya eran pocos los minutos que entraría a la cancha. Lo preocupante de esta situación no sería sólo el desplante hacia el técnico, sino la actitud que estarían adaptando jugadores que no han rendido vistiendo la verde, a pesar de que eran considerados el futuro del balompié nacional.
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Hay que recordar que durante estos juegos, ante Ecuador y Colombia, Vela ha dado más de que hablar por sus palabras que por lo que pudo aportar al Tri. En primer lugar, él, junto al resto de los ‘europeos’, llegaron a territorio nacional sin tener contacto con la prensa y la afición al salir por puertas traseras; su segundo acto polémico fue criticar la cancha del Estadio Omnilife, al señalar que el pasto sintético no se compara con el de los inmuebles del Viejo Continente; por último, afirmó que no le importaron los abucheos recibidos durante el cotejo ante los ecuatorianos, argumentando que venían de seguidores de las Chivas, equipo del que surgió, pero con el que nunca se sintió identificado.