LABRADOR RETRIEVER
Es una raza fuerte, ágil, de buen temperamento, nariz extraordinaria, boca suave, adora el agua, activa, y adaptable , por eso son grandes perros cobradores. Son perros muy fáciles de educar y muy inteligentes, en definitiva, devotos compañeros. Cariñosos y dóciles con fuertes deseos de complacer. De naturaleza noble y sin signos de agresividad o excesiva timidez. Las primeras referencias datan de finales del siglo XVII, en la Isla de Terranova, donde era utilizado por los pescadores. En 1833, el Conde de Malmesbury se llevó una pareja a Inglaterra, donde sus descencientes los llamaban perros labradores.
Aprende con facilidad, es un perro tranquilo que sabe estar quieto cuándo es necesario. Tiene muy buen carácter, y es muy muy sociable, tanto con personas como con otros animales . No es un perro de guarda y es muy poco territorial, aunque si advierte algo fuera de lo normal seguramente ladrará dando aviso. Es muy paciente y amable con los niños.
El Labrador es utilizado como guía para invidentes; asistente de personas con minusvalías; en terapias psicológicas para niños, ancianos, presidiarios y enfermos; como perro de rastreo de drogas, explosivos y rescate en catástrofes.
Es un perro que necesita hacer ejercicio y dar largos paseos diarios para estar en forma y descargar su energía, que de otro modo puede derivar en conductas poco aceptables por su dueño como: hacer destrozos en casa, mordisquear cualquier cosa potencialmente interesante que esté a su alcance, ladrar, escarbar en el jardín, etc...
Necesita de la presencia de sus dueños, no le gusta la soledad, siempre está atento a lo que hacen, le gusta sentirse útil y complacer. Necesita caricias y atención tanto como agua y comida.
