Le entregue mi virginidad a un tarado

Empezare por describirme, tengo 18 años recién cumplidos, mido 1.65, complexión media, mi cadera es grande y aunque no tengo pompas en demasía, tengo lo mío, lo que si, desde chavita mis senos crecieron de manera abundante, soy talla 36B y eso me hace resaltar bastante, ademas tengo ojos verdes.

Trabajaba en la farmacia de mi mama y de las veces que me tocaba atenderla un par de veces un muchacho joven, alto y nada mal parecido fue a comprar algunas cosas, Jorge, al parecer era amigo de mis hermanos, porque había visto que se saludaba con ellos. Al principio que lo atendí en la farmacia, me hizo algunas preguntas acerca de mis hermanos, se quedaba a hacerme platica y trataba de ser agradable. Me llamo la atención que era muy abierto y en una de tantas platicas que tuvimos derivo en que el ya tenia experiencia con chicas, pues ya había tenido sexo, pero le gustaba que fueran vírgenes. Me pregunto muy directamente si yo era virgen a lo cual le respondí que sí era virgen, pero no esperaba hacerlo con alguien pronto, porque esperaría llegar virgen al matrimonio. Y así seguimos en sus fugaces visitas a la farmacia, en una de esas tomo la iniciativa y me pidió que fuera su novia, realmente me tomo un poco desprevenida porque no teníamos mucho tiempo de trato, pero me gustaba su físico y me agradaban las cosas que platicábamos y casi sin pensarlo acepte ser su novia.

La primera vez que telefónicamente me pidió que saliéramos juntos, quedamos de vernos en cierto lugar por Azcapotzalco, porque tenía que recoger algunas cosas que su hermano le había traído y debería pasar a su departamento, por lo que ese día me prepare como cualquier otro día (nada llamativo), blusa blanca de botones de manga larga, pantalón negro, debajo lo que siempre acostumbro, bra y panti blanco normales. Sin malicia estuve ahí puntualmente, era nuestra primer cita fuera de la farmacia y yo estaba contenta de que nos veríamos. Cuando llegue, el ya estaba ahí, me subí a su carro, lo salude con beso en el cachete y empezo a conducir por un par de minutos hasta que llegamos al departamento, se estacionó y me dijo

-acompañame por mis cosas- pero le dije

-no, yo te espero aqui en el carro, pero insistió

-anda vamos, no nos vamos a tardar.

No tenía ganas de entrar pero finalmente para no verme mal por decir siempre que no, le dije -ok, vamos, pero no nos tardamos eh!.
Al llegar a la casa de su hermano no había nadie (aún no me daba cuenta de cuáles eran sus intenciones) y me preguntó

-¿quieres algo? ¿un refresco?, yo le dije

-no gracias,

empezamos a platicar, supuestamente hasta que llegara su hermano, nos sentamos en la sala y comenzó a besarme, yo respondí a sus besos y bastante sigiloso comenzó a besarme en el cuello, lo cual a mi particularmente me excita y empece a sentir muy rico, de lo cual rápidamente se dio cuenta.

Entre los abrazos y besos me tocaba toda la espalda de arriba a abajo y sentí como me tocaba insistentemente el brassiere, hasta que derrepente sentí como lo desabrochó, me saco de onda, le pregunte,
-¿porqué me lo desabrochas?

Jorge respondió -para tocarte tu espalda

así seguimos besándonos y comenzó a tocarme la espalda por debajo de la blusa, a lo cuál me sugirió

-¿porqué no te quitas el brassiere?

me sorprendí un poco por la propuesta y a pesar de que me dió mucha pena su petición, sin mucho pensarlo porque me sentía bien con él, poco a poco me lo quite por un costado sin levantar la blusa.

Continuó con sus besos (que cada vez eran mas apasionados) y sus manos tocaban mi cuerpo hasta que llegaron al frente para tocar mis senos por arriba de la blusa, donde me comencé a sentir excitada. Con mucha astucia, sentí como me levanto mi blusa dejando expuestas mis chichis (que hasta ese momento nadie había visto), las agarró con sus manos y lo primero que me dijo fue

-están grandes y firmes, como me gustan

Yo inocentemente le respondí -¿así te gustan?

y me dijo

-mucho, tienes unos pezones bien grandes, nunca había tocado unos así

y en efecto, mis pezones son grandes y obscuros.

Mientras me las amasaba y apretaba con sus dedos la orilla de mi ya erecto pezón, nos besábamos, hasta que en ese momento tocaron a la puerta de la entrada, nos detuvimos, baje mi blusa, escondí el brassiere bajo un cojín y Jorge fue a ver quien era. Yo supuse que era su hermano, pero no, buscaban a su hermano, a lo cual rápidamente les indico que no estaba y cerro la puerta.

Yo experimenté un sentimiento de miedo, no creía lo que estaba haciendo, ya que nadie antes me había visto las chichis (aunque si algún novio ya me las había tocado, pero siempre por arriba de la ropa, nunca al natural) y menos tocarlas así. Ademas de que cuando regresaba me vio de arriba a abajo posando su vista por un momento en mi blusa que transparentaba mis tetas y pezones erectos y sonriendo de manera cinica y caminando hacia el cuarto de su hermano, me dijó

-ven, ven a ver estas fotos,

lo seguí; estaba sentado en la cama, tomó unas fotos que estaban sobre la cama y me dijo,

-míralas, son mías anda,

me pare a un costado de él, comencé a ver las fotos y me abrazó por la cintura y su manos empezaron a tocarme hasta llegar a las nalgas, un segundo después sentí como sus manos las puso al frente, desabrochando el botón de mi pantalón y bajando el cierre (por unos segundos y desconcertada no supe que hacer, dejé que me desabotonara) y cuando me iba bajando el pantalón, a la altura de media cadera lo detuve diciendolé

-no me lo bajes, ¿qué estas haciendo?

En ese momento me dio miedo lo que estaba pasando, me subí el pantalón de inmediato y lo abroche; Jorge no se inmuto y siguió platicándome de sus fotos, me senté a un costado de él en la cama (ni siquiera pensaba que él insistiría), pero unos segundos mas tarde me dijo

-me gustaría estar contigo y hacerte mía, ¿cómo ves si hacemos el amor?

yo bastante sorprendida ante tal ofrecimiento le dije enfáticamente

-no, no quiero. Ya te dije que quiero esperar mas tiempo, quiero llegar virgen al matrimonio-

pero Jorge insistió diciéndome

-Andale, solo va ser tantito, no va a pasar nada, ademas nos vamos a casar, que tiene de malo que hagamos el amor antes de casarnos?

esto me impacto, me gusto lo que dijo y me empezó a dorar la píldora; no se en que momento y después de tanta insistencia y argumentos, le dije

-bueno, puede ser que si hagamos el amor antes de casarnos, pero ahorita no, déjame pensarlo, quizá otro día. En mi mente estaba el miedo a hacerlo, pero también había una chispa de emoción e incertidumbre de querer hacerlo.

Jorge me comenzó a besar nuevamente, primero en la boca, después en el cuello, poco a poco sentía más calor y excitación, me recostó en la cama y seguimos besándonos cada vez mas candentemente, ya para este momento me tocaba mis senos y el resto de mi cuerpo (y yo permitiendo que lo hiciera) hasta que llego a mi pantalón e hizo algunas caricias a mis nalgas y metió un poco sus manos por dentro del pantalón para tocarme por abajo, las saco y nuevamente trato de desabrocharme el pantalón, a lo cual le dije

-no, ya te dije que no quiero!

y me respondió

-déjame bajarlo solo un poco, solo quiero verte y tocar tu caderas, me gustan mucho,

lo pensé por unos segundos y por tonta le dije

-bueno, pero solo un poco

Disparado se levantó, me levanto de la cama, comenzó a desabrocharme el botón del pantalón y a bajar el cierre, mi ropa interior se empezó a asomar; poco a poco comenzó a bajar el pantalón, mi calzón blanco lentamente apareció y el pantalón cedió hasta un poco abajo de las rodillas, me tocaba con ambas manos las nalgas y las caderas y entre besos sentí como metía sus manos por debajo de los calzones tocándome mi culo desde la base, abriéndome un poco las nalgas y en algunos momentos con sus dedos sobre la raya de mi cola tratando de llegar al hoyo de mi culito. Se empujaba hacia arriba pegando su cuerpo hacia el mío y sentí por primera vez el bulto de su pene por encima de su pantalón. Una de sus manos se deslizó hacia el frente y me tocó mi panochita mojada y sentí como una descarga que hizo que gimiera un poco, pero rápidamente le saqué la mano del calzon.

Con la otra mano empezó a bajarme poco a poco mi calzón desde la parte de atrás (en ese momento yo aun no estaba convencida de lo que hacia) y seguía tocandome y besandome. El calzon me llego a las rodillas y sus manos tocaban desesperadamente mis nalgas y sentí como uno de sus dedos desde atras quería llegar a mi vagina, por lo que pare y me subi el calzón y le dije

-no, no quiero que me toques ahí-

tenía miedo y no quería quedar embarazada y Jorge con un gran poder de convencimiento me dijo

-no te preocupes, no va a pasar nada-

le dije

-tengo mucho miedo, recuerda que soy virgen y no lo quiero hacer

-Andale, lo hacemos solo un poquito

-¿y qué pasa si quedo embarazada?,

el respondió

-no te voy a embarazar, ademas como es tu primera vez, no quedarías embarazada,

-¿Pero dicen que duele mucho cuando lo haces por primera vez, no?

-pues solo un poco, depende, a algunas mujeres les duele a otras no. Con otras novias lo que he hecho es solo meterles la puntita para que sientan un poco. Si quieres, para que veas lo que se siente y no te duela mucho, te meto nada más la puntita y así no te va a doler y si quieres ya después, cuando te sientas que estas lista, lo hacemos bien. O si no te duele te hago bien el amor para que veas que lo rico que se siente coger.

Sus palabras fueron como dulce para un niño y le dije

-bueno, pero prométeme algo, no quiero coger bien, solo quiero que me metas la puntita eh!, aunque veas que no me duele, no me vayas a penetrar, no quiero perder mi virginidad

-Va.

Ya convencida sus manos se postraron en mi culo y tomó mis calzones desde atras y me los bajo poco a poco hasta qué alcanzaron la misma altura del pantalón.

Fue entonces que los abundantes pelos de mi panocha quedaron expuestos, los cuales Jorge contempló junto a mi desnudez, sólo que únicamente podía ver la parte externa porque aun tenía las piernas cerradas y sentía mucha pena de que viera más, que viera mi vagina la cual comenzaba a experimentar excitación arrojando jugos de ella.

Yo estaba temblando y estando frente a frente rápido se despojó de su camisa quedándose en playera y abrió de tajo su pantalón bajándose al mismo tiempo el calzón dejando expuesta su verga, a pocos centímetros de mi cuerpo (que dicho sea de paso tengo que decir y admitir que era una cosa larga, cabezona, curveada hacia arriba y no tan gruesa). Después Jorge me comentaría que su verga medía 25 centímetros. Para mi fue la primera vez que veía un pene en vivo.

En ese momento se acerco más a mí, me agarró y apreto fuertemente las nalgas y me recosto en la cama, me abrió las piernas hasta donde se podía (porque mi pantalón y calzón estaban un poco abajo de mis rodillas), primero me toco con la mano mi panocha y un poco de ni clitoris mojado (se sentía rico, me estaba gustando) e inmediatamente se agarro la verga y la acerco a mi vagina. Yo le dije con voz quebrada por los nervios y con un poco de jadeo

-despacio y solo un poquito eh! porque ya ví que la tienes muy grande

Jorge se rió y me dijo irónicamente -no pasa nada, esto es como un dolor de muelas, te va a doler, pero no vas a querer que te la saque

No supe más que decir que reírme y seguimos. Yo no podía abrir más las piernas y aun así empece a sentir como orientaba su pito a la entrada de mi vagina, la empezó a empujar para penetrarme y me comenzó a doler por lo que le dije

-¡me duele mucho! ¡despacio!, ¡mételo con cuidado y solo tantito!, solo la punta

sentía esa masa caliente cuando la acerco y poco a poco fue cediendo paso haciendo presión, el dolor era muy grande y aunque poco a poco era menos, sentí una parte de ese pedazo de carne dentro de mis entrañas, pero no se cuanto lo había metido, ya me sentía desgarrada y en en ese momento sentí mas dolor.

Se detuvo un poco al ver el rictus de dolor, pero poco a poco presionó y lentamente la empujó y empezó nuevamente a moverse hacia atrás y adelante metiéndola y sacándola. El dolor continuó por algunos segundos más y yo le dije

-¡ya no quiero, ya no la metas, me duele mucho! Y comencé a llorar

me dijo -no llores, ya pronto va a pasar el dolor, espera tantito

Y de tajo sentí un gran empujón que hizo que me doliera mucho y se quedo quieto ya encima de mi, yo entre sollozos, levanté la cabeza y volteé un poco para ver como la metía y mi sorpresa fue mayor cuando el prácticamente ya estaba pegado su cuerpo contra mi cuerpo y por tanto deduje que toda su verga la tenia adentro y le pregunte,

-¿me metiste todo tu pene? ¿Cómo cupo? Te dije que no me penetraras toda, quería guardar mi virginidad

Jorge detuvo un momento sus movimientos y me respondió con un lenguaje que nunca había escuchado en él,

-si, ya tienes todo mi pito adentro de ti, ahora si eres toda mía, ya te hice mi mujer

-Pero dijiste que solo ibas a meter la puntita, ¿porqué lo metiste todo?

-Bueno, es que estas bien mojada y te entro toda. Estas bien cachonda, por eso cediste rápido ¿a poco no te esta gustando? salió de sus labios y simplemente pude decirle,

-si mi vida, te amo, ya soy toda tuya, ya soy tu mujer, me dolió mucho tu penetración, estoy sintiendo tu pito hasta adentro. Oye, pero por favor no quiero que eyacules en mi, tengo miedo de que me vayas a embarazar.

-no te preocupes, no me voy a venir en ti, antes de venirme, me salgo y te los echo afuera

Aún sentía dolor gracias a la gran vergota que me había ensartado e inicio suavemente las envestidas de su pito en mi.

El dolor iba disminuyendo a medida que más la metía y sacaba, ya para ese momento escuchaba el sonido de nuestros jugos combinarse y comenzaba más rápido a penetrarme y el dolor ya no era tanto.

En esos primeros minutos después de pasar el dolor, no sabia realmente que estaba sucediendo, lo veía encima de mí moviéndose, metiendo y sacando su pito, sintiéndolo muy adentro, yo estaba realmente muy asustada y confundida de lo que me estaba haciendo y de lo que estaba sintiendo, con las metidas que hacia empece involuntariamente a emitir gemidos de placer cuando su pito me llegaba hasta el fondo de mi vagina, cada instante me tornaba mas caliente, me estaba gustando esta nueva experiencia, el pito de Jorge me perforaba, pero al meterlo lo hacia con mas fuerza, yo sentía que hasta sus huevos me los quería meter y cada vez de mi boca emanaban los

-Ah! Ah! ah!-Ah! Ah! ah!-Ah! Ah! ah!-Ah! Ah! ah!

Era un placer extremo. Seguía acostada con mi blusa blanca puesta, siendo ensartada y con el bamboleo, me alcanzo a levantar un poco mi blusa y salieron mis chiches desnudas y ahora con sus dedos tomaba y apretaba mis pezones y mis chichis que se movían al ritmo del parche que me estaban dando y cada vez me bombeaba con más fuerza.

Sentía riquísimo pero también por mi cabeza pasaban muchos pensamientos, ya no era virgen y por otro lado comenzaba a tener sensaciones deliciosas que nunca antes había sentido, pero seguía mirando hacia el infinito aún sin concentrarme totalmente en la gran cogida que me estaban dando e involuntariamente continuaban saliendo los gemidos de mi boca, no los podía controlar.

-¡Ah! ¡Ah! ¡ah! ¡Ah! ¡Ah! ¡ah!


Pasaron unos cinco minutos en los que con fuerza y cadencia me encajaban y sacaban ese gran pedazo de carne. No puedo describir esa sensación, me dolía, pero adentro pegaba con algo que hacia que jadeara y cada vez sentia la cara mas caliente y de pronto Jorge comenzó con la respiración mas agitada y solo dijo

-siento que me voy a venir

Y seguido de unos gemidos y fue donde mas fuerte me embistió (unas cuatro o cinco veces más), sacándome unos últimos gritos de placer, fue cuando poco a poco se incorporó y me comenzó a sacar su verga, fue entonces que comprendí que Jorge no se había salido a tiempo, que se había venido en mi, en ese momento regrese del estado de satisfacción en el que estaba a preguntarle de una manera muy preocupada

-Eres un idiota, ¿no te saliste?, ¿te veniste en mi?, te dije que no lo hicieras..., voy a quedar embarazada...

y solamente me dijo,

-si, ya no pude salirme, te los eche dentro en ti, pero levántate y ve a orinar rápidamente para que te limpies los mecos que te eche y que no pase nada, ya con eso no te embarazas.

Dentro de mi estaba más que confundida, ahora pensaba en un embarazo porque me había echado todo su semen dentro de mi pucha.

Al levantarme de la cama, sentí como escurría algo liquido y volteé hacia mi pepa para ver ese líquido blanquecino como emanaba de en medio de mis piernas, me alcance a subir un poco los calzones y el pantalón. Voltee a ver a Jorge y su verga ahora ya estaba larga y flácida y le escurría algo de semen de la cabeza. Yo seguí caminando e inmediatamente fui al baño a orinar, alcance a quitar algo de semen con papel ademas de orinar para sacar lo mas que pudiera, mientras me veía como me habían dejado abierta la vagina por la penetración y también sorprendida me di cuenta que no había ni un pequeño rastro de sangre en mi panocha con la desfloración que me hizo.

Cuando regrese a donde Jorge me cogió, se veía de muy mal humor, ¿no se porqué?, yo pensaba que porque no me había venido (aunque debo admitir que estuve cerca de tener un orgasmo) pero ya me había desvirgado y cogido de lo mas sabroso y tajantemente me exigió

-limpia los mecos que se cayeron en la cama, no quiero que quede sucia la cama.

Yo estaba muy molesta porque esto fue lo primero que me dijo después cogerme y venirse en mi. Todavía fui por papel y limpie la cama, me dio mucho coraje porque en ese momento entendí que solamente lo que quería era cogerme, no disimuló nada después de haber terminado.

Mientras él se ponía la camisa yo me apure a buscar mi brassiere para ponermelo sin que me viera ya mis chichis. Yo estaba muy preocupada por quedar embarazada y lo primero que me preguntó fue

-¿ya no eras virgen, verdad? ¡Ya habías cogido con alguien mas!.

a lo cual le respondí

-no, nunca lo había hecho con alguien, si era virgen, ¿qué no te diste cuenta hace rato como me dolió?;

-¿entonces, porqué no sangraste cuanto te penetre?

Era cierto, cuando fui a limpiarme al baño no sangré, no sabía porqué...

Inmediatamente se comenzó a reír y me dijo

-no quieras engañarme, yo si te creí que eras virgen, pero me engañaste, eso no se hace, ¿porqué me querías hacer creer que eras virgen? si te lo metí sin dificultad, ya estabas corridita...

pero yo muy molesta inmediatamente le dije

-eso no es cierto, si no me quieres creer es otra cosa, pero nunca había hecho el amor con nadie, era virgen y tu eres el primero con quien me acuesto, de verdad que nunca había cogido con nadie te lo juro, eres el primero con quien me acuesto. Por eso me dolió tanto cuando lo metiste, ¿qué no te diste cuenta? La verdad es que ni yo se porque no sangre.

Note que no me creyó y hasta ese momento entendí que por eso quiso coger conmigo, quería desquintarme.

Ademas para mi eso ya no era importante, en mi mente un posible embarazo era mi preocupación y le reclame y le dije
-lo que si te digo es que si esto tiene consecuencias yo voy a tener al bebe. Además ya conseguiste lo que querías, cogerme, ¿no? Ya me dejaste toda llena de tu esperma, soy una estupida por dejarte chingarme

No me hizo caso y me pidió

-vámonos porque va a llegar mi hermano

y sin muchas palabras mas de su parte caminamos a la puerta.

Salimos del departamento, nos subimos al carro y unas calles después Jorge me dijo

-bájate y vete en pesero a tu casa,

yo le dije

-¿cómo crees?, ¿no me vas a llevar a llevar a mi casa?

y solamente me dijo

-estoy muy ocupado y tengo otras cosas que hacer y no puedo llevarte.

Muy molesta me bajé, azote la puerta del carro, le hice la parada al pesero y me subí. Ya en el, iba muy pensativa, no solo reflexionaba que me habían quitado mi virginidad sino ademas que me habían cogido sólo por diversión, como un trofeo más. ¿cómo enfrentaría esto?, ¿qué iba a pasar si mi Mama se enteraba?, ¿se lo tendría que decir?, ¿qué dirían de mi porque ya no era virgen?, ¿qué pasaría conmigo después?, ¿Jorge cumpliría su promesa de casarse conmigo? o ¿quién se querría casar conmigo ya no siendo virgen?. En ese momento, claramente veía que nunca pensó en casarse conmigo.

Al llegar a mi casa me sentía muy mal, yo no quería que eso hubiese pasado, estaba muy preocupada porque se había venido todo en mi. Me metí a bañar y me percate que aún había rastros blancos en mi calzón y de la vagina aún sentía que me salía semen. En todo momento seguí pensando en lo que me había hecho y lo que mas me preocupaba era pensar si quedaría embarazada.

Así pasaron los días, bastante lentos, donde no dejaba de pensar ni un minuto en lo que había pasado y de tan preocupada que estaba, esperando a que me bajara, simplemente no me bajaba. Coincidentemente Jorge me habló por teléfono y le comenté muy preocupada que aún no me bajaba y me dijo que ese día por la tarde nos veríamos para que no siguiera preocupándome, que el sabía que hacer. Estaba tan nerviosa que le dije que sí, que nos veíamos por la tarde.

Llego la tarde y paso por mi a casa de mi Mama y me llevo en su carro a un lugar alejado donde no había prácticamente gente, en el trayecto apenas cruzamos palabras yo solo le dije de mi preocupación por estar embarazada, pero Jorge no me hacia mucho caso y finalmente llegamos. Con él venía con un niño como de 10 o 12 años al cual le dijo que se bajará y fuera por ahí (no vi que traía el niño, pero después supe que era una videocámara) y tambien nos bajamos del carro, y me dijo

-te voy a inyectar en una nalga, bájate el pantalón. Yo le pregunte

-¿qué me vas poner?

- Oxcitocina, respondió

-con esto te va a bajar de inmediato,

ante mi ignorancia y desesperación, le creí, vi como preparaba la inyección, yo ese dia vestía de pants, me baje el pantalón de costado dejando al descubierto la mitad de mis grandes nalgas y sin decir nada, me inyectó. Tiro la jeringa, me volteó frente a el y sin permiso alguno, me bajo el pants y los calzones de golpe abajo de las nalgas, quedando descubierta mi panocha y sin decirme nada, se bajo el pantalón, me recargo en el carro y guió su verga de frente y de un tajo y en seco, encontró el camino y me encajó su pito en mi panocha, simplemente no daba crédito a lo que estaba pasando, le dije,

-¡no quiero!, ¡no quiero que me cojas! tratando de moverme para sacarla, me dolió muchísimo porque no habia nada de lubricacion y emití un fuerte quejido, pero sometiendome y abrazando su cuerpo al mío, la dejo adentro de mi vagina. Ya ni siquiera le pude reclamar, solo callé y entre lagrimas, empezó a bombearme, sus movimientos de atras para adelante frente a mi comenzaron, me deje coger pero temblaba del fuerte dolor que sentía cuando la metía y sacaba. Ya no sentía nada de placer, solo quería que terminara.

Así estuvo perforándome y bombeandome como por dos minutos más (que para mi fueron eternos) y después saco su verga de mí panocha porque empezó a sentir que se iba a venir, se agarró la verga y se masturbó para venirse y me dijo

-voltea, ve como me estoy viniendo, ve como están saliendo un chingo de mecos,

al tiempo que seguía jalándose el pito y salían chisguetes blancos de semen y Jorge gimiendo por la venida. Yo entre tanto, me subí el pants ya con la cogida encima y totalmente enojada por pendeja y por dejarlo que me chingara una vez más.

Sin más ni más le pedí que me llevara a mi casa, le grito al niño, el cual se subió atrás y me dejo en mi casa. Sin hablar ni nada.

Cuando llegue al baño de mi casa vi en mis calzones una mancha roja de sangre (pues como no), si me lastimó mucho y sangré.

Días después me busco varias veces, por teléfono y otras mas que fue a buscarme a mi casa. En una de ellas salí con él en el carro y nuevamente me quiso bajar el pantalón para hacérmelo otra vez, pero esta vez ya no lo deje, me bajé de su carro y me alejé corriendo. Después de esto me busco por teléfono y ya no lo quise ver.

Afortunadamente unos días después me bajo, y yo ya estaba más tranquila de no estar embarazada, pero nunca se lo dije a él, por lo tanto, siempre se quedo con la idea que me había embarazado yque había tenido un hijo de él.

Tiempo después hablé con Jorge y me dijo que yo andaba diciendo cosas de él y que como yo no era virgen, simplemente lo engañe y por eso ya no quiso verme, pero si quería conocer a su hijo. Yo nunca le volvi a decir mas y nunca le confirmé si había tenido un bebe o no.

No se que tenía en la cabeza, pero hasta ahora me arrepiento totalmente de haberme entregado a él y que no agradeciera al menos el hecho de llevarse mi virginidad.

Un par de meses después, yo conocí a otra persona a la cual le conté lo que me había sucedido y tiempo después nos casamos. En una de esas veces que visite a mi mamá, vi a Jorge y me dijo que filmó video de las dos cogidas que me dio y con ello me di cuenta que el niño que iba con él me filmó y obvio vio como me parcharon.

No se como, pero le hicieron llegar a mi esposo por correo electrónico los dos videos y ahora ya también vio como me cogieron. Yo estaba que echaba chispas porque me enseño los videos y de verme filmada por este estúpido. Tenía muchísima pena de que mi esposo viera como me cogían y de como me hicieron gozar esa primera vez. Nunca me imagine el verme la cara de placer que tenía y el escucharme mis gemidos de satisfacción cuando me estaban cogiendo. Y mas porque pasaron como tres meses desde que empece a coger con mi esposo hasta que el hizo que sintiera y gimiera como Jorge me lo hizo desde la primera vez.

Además de mandárselos a mi esposo, también tuvo el descaro de subirlos a sitios porno mostrando mi cara y mi cuerpo a todo mundo y lo peor de todo incluyendo mi nombre para que lo vieran.

Hace unos días estábamos en un centro comercial y de repente vi pasar a Jorge y le dije a mi esposo que ese era el güey que me había cogido, para que tuviera cuidado si quería saludarme. Me volvió a dar mucho coraje verlo y también a mi esposo, ya se lo quería madrear. Aunque no paso nada.

Todo este historia sucedió un año antes de conocer a mi esposo, (yo creo que el me ha de tachar de puta por lo que vio en los videos), y siempre le conté con pelos y señales todo lo que sucedió, ademas de que vio el video.

Ahora lo tomamos como una experiencia más y algunas veces le pido que veamos el video porque me pone cachonda y él también. Mi esposo recrea la escena de como me cogieron y yo me vengo tanto por la cogida que me dan (que ahora ya me coge mucho mejor que el estúpido de Jorge) porque no solo me chinga por la panocha, sino por el culo, ademas de recordar mi primera vez.

Hace un tiempo por casualidad nuevamente me encontré a Jorge, mi primera reacción fue de molestia por tener el descaro de acercarse a hablarme, sin embargo lo escuche, me invitó un café rogándome que aceptara, que no me tomaría mas de 15 minutos, no muy convencida acepte. Comenzamos a platicamos y muy apenado se disculpó por como me trató, me dijo que en ese momento era muy joven y que había sido muy inmaduro. Finalmente le dije que ya lo pasado, pasado y que diéramos vuelta a la página, que ya no quería nunca recordar lo que había pasado (cosa que no era del todo cierto) y le pedí que si podíamos irnos. Lo único que le pregunté fue que si seguía creyendo que no era virgen cuando lo hicimos por primera vez, a lo cuál me respondió.

-Te mentí, si sentí que eras virgen, y disfrute haciéndote mía, pero en ese momento solo quería cogerte porque me gustabas y no quería un compromiso contigo. La verdad es que fue más fácil cogerte de lo que pensé, yo creía que te harías mucho del rogar, pero no fue así, la neta es que creo que tenías muchas ganas de coger con alguien, por eso me dejaste hacerlo, ¿a poco no?

-No te voy a mentir, si quería coger, pero no así, y menos que me tomaras video y que lo circularas por internet para hacerme ver como una puta, pero bueno ya lo hiciste y por eso siempre estuve muy molesta contigo.

Simple y sencillamente se disculpo y cortésmente me ofreció el irme a dejar a mi casa o cerca de ella, a lo cual acepte. En el camino seguíamos platicando y el tocaba mi pierna tratando de ser simpático, cuando de repente, pasamos por un hotel y para mi sorpresa con cara de descaro me pregunto que si quería pasar, sin pensarlo dos veces, nuevamente cai en su juego y acepte.

Les puedo decir que entramos y primero me trato como una mujer, se encargó de desnudarme completamente. Me dijo que con los años estaba poniendome mas buena, me besó todas las partes de mi cuerpo, desde los pies hasta la cabeza, paso por mi vagina y hasta con la lengua recorrió mi ano. Me metió los dedos en la vagina y al mismo tiempo metía otro en mi culo y me voltee para hacer el 69. Yo también hice lo mío, se bajo el pantalón y el calzón y fui directamente a mamarle ese gran pito que tiene, no me cupo en la boca, aun así, lo exprimí hasta que se vino en mi boca, nunca antes había tragado semen hasta ese momento.
Ya encarrerados lo deje que me perforara. Después de tratarme como mujer pase a ser su puta, es la cogida mas grandiosa que me han dado, ahora ya con tiempo, me exitó al máximo y me recorrió la vagina hasta lo más recóndito yo solo gritaba que me diera mas fuerte, que me tratara como una puta, que era su perra y gritaba tan fuerte por el extasis que sentía y no dude en dejarlo venirse 5 veces en mi panocha, quedé toda rosada de tanto que me cogió ademas que me escurrían grandes cantidades de mecos de mi abierta panocha.
Me lo metió estando de frente parados, después me abracé a el de frente con los pies y me levanto del culo y la cintura sin dejar de penetrarme, me acostó y me lo metió de misionero, de lado, patitas al hombro, yo encima de él, me voltee mostrando mi culo, pero seguía ensartada arriba de él, me voltee de a perrito, y fue donde no dude en ofrecerle mi culo, me perforó dos veces y aunque me da pena decirlo, le cague la verga de tan adentro que me lo metió, pero eso sí, le pedí que me rellenara de mecos mis entrañas.

Pasamos tres horas en el hotel en donde prácticamente en ningún momento dejamos de cojer, no lo podía creer, estaba siendo una puta y engañando a mi esposo con quien menos pensaba, Jorge el que me hizo mujer y me cogió por primera vez. Simplemente me transformé, salió de mi toda la lujuria y el deseo que traía reprimidas.

Finalmente nos bañamos juntos donde yo aproveche para darle una ultima mamada y le hice lo que nunca pensó, le estimule su próstata metiendole un dedo en el culo y entre la mamada y la metida en el culo, puso los ojos en blanco hasta venirse, gritaba como loco, me dijo que nunca pensó en sentir tanto con lo que le hice.

Terminamos, nos vestimos y salimos del hotel, le pedí que no me buscará más, que me había encantado coger con él, pero que esta era la tercera y última vez que lo dejaría tocarme. Jorge solo me dijo que era una gran puta y que era de las mejores cojidas que había tenido. Me despedí con un gran beso y desde esa fecha ya no lo he vuelto a ver.

Esto nunca se lo conté a mi esposo, pero para sorpresa mía al mes de esta relación quede embarazada, yo casi estoy segura que fue por cojer con Jorge y tuve un hijo. No se si sea su hijo, pero tiene un gran parecido a él. Esto nunca se lo contaré a mi esposo y menos a Jorge.