Droga de cárcel:
-Humedezcan (leve, sin empapar) un pedazo de bolillo duro.
-Envuélvanlo en papel de estraza.
-Escóndanlo donde no le toque el sol. Digamos, un mes o dos.
-El honguito gris (polvo) se raspa con un cuchillo y se mezcla con poco tabaco.
-Se forja el churro y se le da fogata. Golpes profundos (como si fuera motita).
Pongan algo de Jimmy Hendrix y, si tienen, aviéntense un caballito de mezcal o tequila.
El efecto dura poco, pero es rico. No repitan la dosis el mismo día, porque el cuerpo se acostumbra y necesita mayores cantidades.
Paz, hermanos.