Lo que pasa es que en León, Gto. viven hartos puritanos, y son bien persinados, por eso ahora que vayan a esa ciudad no se les ocurra darse un beso porque esa gente va a decir que es pecado e inmediatamente a la hoguera sin juicio previo, pobres leoneses, cuidan tanto sus templos, como si estuvieran muy bonitos, que asco me dan.