Esta es del tipo de historias que suceden en lugares apartados de la humanidad y con ello únicamente nos tenemos que conformar con las fotografías que nos llegan.
En este caso el lugar donde se llevo a cabo este descubrimiento es un pequeño pueblo en Tailandia en donde al principio se pensaba que se trataba de una malformación genética de la cría de la vaca, sin embargo al hacer una inspección mas cercana se puede notar parentescos con crías humanas salvo que en sus extremidades no se encuentran manos y pies sino cascos y pesuñas al igual que de una vaca se tratase.