No, amén no es "así sea" (en hebreo hay otra frase para esta expresión).
Literalmente amén quiere decir "es verdad".
Según el Talmud explica (Shabbat 119b), es también la sigla de: E-l melej nehemán, que se puede traducir como: "Dios es un rey confiable (fiel)", indicando que en el único que hay que depositar la plena confianza y esperanzas es en el Eterno, fuera de Él en nada ni nadie.
Si queremos ahondar un poco más, recordemos que la palabra amén está asociada con emuná -creencia-, y con imún -entrenamiento-. Esto implica que la creencia no radica en ideas vagas, en sentimientos o en dogmas; sino en el constante entrenamiento de efectuar acciones prácticas, que terminan por evidenciar lo que yace tras lo aparente.
En un ejemplo: suponga que me enamoro de una hermosa mujer, caigo rendido a sus pies, y lo único que hago es suspirar y amarla románticamente, si usted me preguntara si creo que le tengo confianza a su fidelidad, yo lo único que puedo decir es que: tengo fe que así es.
Pero, si construyo un proyecto de vida junto a ella, si me esfuerzo en hacer que la relación mutua crezca, se fortalezca y fructifica, y ella a la par conmigo a diario me demuestra su compromiso; ante su pregunta de si le tengo confianza a su fidelidad, yo le podría contestar que: creo en ella.Claro, la única confianza cierta y a prueba de todo es la que reposa en Dios, por lo que en Él es la única creencia verdadera (es decir, las personas fallamos, somos volátiles, inconstantes, mi mujer puede engañarme a pesar de la plena confianza y creencia que le tenga, pero "Dios es un rey fiel").