El fotógrafo francés Denis Rouvre ha recibido el segundo premio del World Press Photo 2010, por la historia que nos cuenta sobre los luchadores de laamb, un deporte único en el mundo. El resultado son unas fotos en las que la violencia de los combates deja sitio a la majestuosidad de los cuerpos cubiertos de amuletos y untados de leche para alejar la mala suerte.
“Siempre he tenido interés por estos luchadores senegaleses que practican un deporte muy particular y único en el mundo. Es una mezcla de boxeo y de lucha grecorromana ya que todos los golpes están permitidos. Consiste en poner al adversario en el suelo o dejarlo KO. No hay asalto, no hay categorías. Los viejos pueden pelearse con los jóvenes, los pesados pueden pelearse con los ligeros. Es como un combate entre la vida y la muerte.
“Es un deporte mucho más emblemático y popular que el fútbol. La lucha en Senegal puede llenar un estadio de 80.000 personas mientras el combate se está desarrollando sobre una especie de círculo de cinco metros de diámetro. Los que son considerados ‘Rey de las arenas’, es decir, que han permanecido invictos durante un año, son proclamados semidioses. Los grandes campeones pueden fácilmente ganar doscientos mil euros en un encuentro de apenas treinta segundos”.
Para que se den una idea de la importancia de este deporte, a parte de llenar estadios, los grandes luchadores pueden llegar a ganar doscientos mil euros en un combate que igual no llega ni a un minuto.
Fuente
“Siempre he tenido interés por estos luchadores senegaleses que practican un deporte muy particular y único en el mundo. Es una mezcla de boxeo y de lucha grecorromana ya que todos los golpes están permitidos. Consiste en poner al adversario en el suelo o dejarlo KO. No hay asalto, no hay categorías. Los viejos pueden pelearse con los jóvenes, los pesados pueden pelearse con los ligeros. Es como un combate entre la vida y la muerte.
“Es un deporte mucho más emblemático y popular que el fútbol. La lucha en Senegal puede llenar un estadio de 80.000 personas mientras el combate se está desarrollando sobre una especie de círculo de cinco metros de diámetro. Los que son considerados ‘Rey de las arenas’, es decir, que han permanecido invictos durante un año, son proclamados semidioses. Los grandes campeones pueden fácilmente ganar doscientos mil euros en un encuentro de apenas treinta segundos”.
Para que se den una idea de la importancia de este deporte, a parte de llenar estadios, los grandes luchadores pueden llegar a ganar doscientos mil euros en un combate que igual no llega ni a un minuto.
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