Los trabajadores de la aerolínea española que dejó de operar en diciembre publicaron un calendario con 12 de las azafatas de la compañía desnudas para que los medios de comunicación hablen de ellos y no se olvide la situación en la que se encuentran.
En un calendario con fotos en blanco y negro y en color posa por cada mes una auxiliar de cabina desnuda dentro de un avión o en otros escenarios relacionados con la aviación.
Es la idea que se les ocurrió para no caer en el olvido a los más de 600 trabajadores de la compañía aérea de Gerardo Díaz Ferrán, el presidente de la patronal CEOE.
Su situación es difícil: a causa del expediente de regulación empleo presentado no pueden trabajar hasta que el juez concluya el concurso de acreedores que Air Comet presentó el pasado 23 de marzo, tres meses después de su cierre. Y eso no parece que vaya a ocurrir antes de junio.
Algunos trabajadores, además, tienen pendiente cobrar incluso nueve mensualidades de su salario.
“Lo hemos hecho para reivindicar nuestros derechos y el dinero que nos debe Gerardo Díaz Ferrán, su socio Gerardo Pascual y el consejero delegado de la compañía, Ignacio Pascual”, explicó a medios españoles una de las azafatas que posaron como modelos.
En diciembre pasado, la compañía echó el cierre, dejando en tierra a unos 7.000 pasajeros, en su mayoría latinoamericanos residentes en España, pocos días antes de las fiestas navideñas. El Ministerio de Fomento español tuvo que poner entonces en marcha un plan de emergencia para trasladarlos a sus destinos.
Fundada en 1996 por el Grupo Marsans, Air Comet contaba con vuelos regulares a Buenos Aires, Lima, Guayaquil, Quito, Bogotá, La Habana, Cancún y México DF
Fuente
En un calendario con fotos en blanco y negro y en color posa por cada mes una auxiliar de cabina desnuda dentro de un avión o en otros escenarios relacionados con la aviación.
Es la idea que se les ocurrió para no caer en el olvido a los más de 600 trabajadores de la compañía aérea de Gerardo Díaz Ferrán, el presidente de la patronal CEOE.
Su situación es difícil: a causa del expediente de regulación empleo presentado no pueden trabajar hasta que el juez concluya el concurso de acreedores que Air Comet presentó el pasado 23 de marzo, tres meses después de su cierre. Y eso no parece que vaya a ocurrir antes de junio.
Algunos trabajadores, además, tienen pendiente cobrar incluso nueve mensualidades de su salario.
“Lo hemos hecho para reivindicar nuestros derechos y el dinero que nos debe Gerardo Díaz Ferrán, su socio Gerardo Pascual y el consejero delegado de la compañía, Ignacio Pascual”, explicó a medios españoles una de las azafatas que posaron como modelos.
En diciembre pasado, la compañía echó el cierre, dejando en tierra a unos 7.000 pasajeros, en su mayoría latinoamericanos residentes en España, pocos días antes de las fiestas navideñas. El Ministerio de Fomento español tuvo que poner entonces en marcha un plan de emergencia para trasladarlos a sus destinos.
Fundada en 1996 por el Grupo Marsans, Air Comet contaba con vuelos regulares a Buenos Aires, Lima, Guayaquil, Quito, Bogotá, La Habana, Cancún y México DF
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tal vez se esperen al siguiente año.
