La expectativa de aprobación de reformas que impulsarían el crecimiento económico y la competitividad es el contexto en el que la agencia Standard & Poor’s (S&P) colocó la calificación de México en perspectiva positiva, lo que significa que antes de un año o a lo sumo en 18 meses, podría recuperar el nivel que tenía previo a la crisis del 2009, que era “BBB+”.
En un comunicado, la agencia aclara que la mejor calificación podría presentarse una vez que las reformas aprobadas reduzcan la vulnerabilidad de las finanzas públicas del país frente al marcado descenso de los ingresos petroleros.
“Bajo la administración de Peña Nieto ha mejorado el panorama para la aprobación de políticas que fortalezcan más el margen de maniobra fiscal y el crecimiento de mediano plazo (…); la perspectiva refleja una mayor probabilidad entre tres de que el gobierno logre obtener aprobación para varias políticas que mejoren significativamente el margen de maniobra fiscal de México”, se lee en la nota de S&P.
Para el economista de Bank of América en México (BofA), Carlos Capistrán, la iniciativa de telecomunicaciones es un paso en la dirección correcta que aumentará la competencia del sector y promoverá el crecimiento.
La analista principal para México de S&P, Lisa Shineller, dijo que se percibe una probable mejora en el panorama de crecimiento en el mediano plazo y cambia las dos principales limitantes que por años mantuvieron al emisor anclado en el escalón “BBB”: la vulnerabilidad de las finanzas públicas por la dependencia de ingresos petroleros y el bajo dinamismo de la economía.
Aclaró que pese al mayor capital político del actual Presidente, la aprobación de las iniciativas no está asegurada en lo absoluto.
PODRÍA SUBIR HASTA “A”
De acuerdo con el economista para el país de Barclays, Marco Oviedo, la calificación de México en S&P podría subir hasta dos escalones si las reformas aprobadas son consistentes con el criterio de apuntalar el crecimiento y hacer más competitivo al país.
En su opinión, el cambio en la perspectiva de S&P se da con rezago respecto del flujo de inversiones que han llegado al mercado, que desde antes habían mostrado la mayor certidumbre que les está otorgando el emisor soberano.
Es decir, el flujo de inversiones que ha recibido el país en los últimos meses ha dado a México el cambio de perspectiva.
Espera que también anticiparán esta mejora de dos niveles en la calificación, que llevaría a México a ser un emisor de calidad crediticia “A3”, que es de un mejor perfil financiero.
Efecto de iniciativas
MOODY’S MANTIENE ALTAS EXPECTATIVAS
El gobierno de Enrique Peña Nieto se está caracterizando por una actitud para promover y conseguir la agenda de reformas que apoyará al aumento de las perspectivas de crecimiento de mediano plazo para México, lo que es un evidente logro, advierte Moody’s Investor Service.
En una nota, donde precisa el estatus de las calificaciones de los emisores de América Latina, la firma evidencia la actitud de mayor colaboración entre partidos, incluso de oposición, tras la firma del Pacto por México. Hecho que les hace esperar “esfuerzos exitosos para completar reformas importantes”. Y es que lejos que obstaculizar los cambios estructurales, el hecho de que el partido gobernante no tenga mayoría en el Congreso ha favorecido la búsqueda de acuerdos políticos.
Explicó que el panorama crediticio de México se mantiene “estable” en grado de inversión “Baa1”.
FUENTE
En un comunicado, la agencia aclara que la mejor calificación podría presentarse una vez que las reformas aprobadas reduzcan la vulnerabilidad de las finanzas públicas del país frente al marcado descenso de los ingresos petroleros.
“Bajo la administración de Peña Nieto ha mejorado el panorama para la aprobación de políticas que fortalezcan más el margen de maniobra fiscal y el crecimiento de mediano plazo (…); la perspectiva refleja una mayor probabilidad entre tres de que el gobierno logre obtener aprobación para varias políticas que mejoren significativamente el margen de maniobra fiscal de México”, se lee en la nota de S&P.
Para el economista de Bank of América en México (BofA), Carlos Capistrán, la iniciativa de telecomunicaciones es un paso en la dirección correcta que aumentará la competencia del sector y promoverá el crecimiento.
La analista principal para México de S&P, Lisa Shineller, dijo que se percibe una probable mejora en el panorama de crecimiento en el mediano plazo y cambia las dos principales limitantes que por años mantuvieron al emisor anclado en el escalón “BBB”: la vulnerabilidad de las finanzas públicas por la dependencia de ingresos petroleros y el bajo dinamismo de la economía.
Aclaró que pese al mayor capital político del actual Presidente, la aprobación de las iniciativas no está asegurada en lo absoluto.
PODRÍA SUBIR HASTA “A”
De acuerdo con el economista para el país de Barclays, Marco Oviedo, la calificación de México en S&P podría subir hasta dos escalones si las reformas aprobadas son consistentes con el criterio de apuntalar el crecimiento y hacer más competitivo al país.
En su opinión, el cambio en la perspectiva de S&P se da con rezago respecto del flujo de inversiones que han llegado al mercado, que desde antes habían mostrado la mayor certidumbre que les está otorgando el emisor soberano.
Es decir, el flujo de inversiones que ha recibido el país en los últimos meses ha dado a México el cambio de perspectiva.
Espera que también anticiparán esta mejora de dos niveles en la calificación, que llevaría a México a ser un emisor de calidad crediticia “A3”, que es de un mejor perfil financiero.
Efecto de iniciativas
MOODY’S MANTIENE ALTAS EXPECTATIVAS
El gobierno de Enrique Peña Nieto se está caracterizando por una actitud para promover y conseguir la agenda de reformas que apoyará al aumento de las perspectivas de crecimiento de mediano plazo para México, lo que es un evidente logro, advierte Moody’s Investor Service.
En una nota, donde precisa el estatus de las calificaciones de los emisores de América Latina, la firma evidencia la actitud de mayor colaboración entre partidos, incluso de oposición, tras la firma del Pacto por México. Hecho que les hace esperar “esfuerzos exitosos para completar reformas importantes”. Y es que lejos que obstaculizar los cambios estructurales, el hecho de que el partido gobernante no tenga mayoría en el Congreso ha favorecido la búsqueda de acuerdos políticos.
Explicó que el panorama crediticio de México se mantiene “estable” en grado de inversión “Baa1”.
FUENTE