S.O.S Fotógrafos en apuros

*Tin Tan*

Bovino de alcurnia
#1
Hola mis estimados carnales aqui les dejo esto a ver que tal sale ...

Cuando se habla de prevención de riesgos laborales todos pensamos en un señor subido a un andamio o un informático con el túnel carpiano como la autopista de Burgos. Pero hay profesiones que no son valoradas como se merecen, no somos conscientes del sufrimiento que conllevan, de los terribles traumas a los que están expuestos estos pobres currantes, y no me refiero a los traumas que puedan sufrir los fotógrafos de famosos, que te estampen la cámara en la cabeza. No, yo os hablo de los incomprendidos fotógrafos de familia. Después de ver estas fotografías, comprenderéis por qué más de uno o una acaban en una bonita habitación con paredes acolchadas y un embudo en la cabeza o como monjes cartujos. Motivos hay.


Cuando hay familias que quieren una foto de estudio pero no se conforman con la típica cortinilla de cielo azul con nubes blancas como las que me ponían siempre en las fotos del colegio, o la pared blanca para la foto de carnet, y quieren algo más elaborado. Entonces te toca meter dentro de un estudio a escala 1/1 la réplica de la tumba de Ramsés II y aguantar la risa cuando te aparecen vestidos de egipcios clásicos. Te preguntarás por qué no incluiste el áspid que mató a Cleopatra en el lote.



¿Hay algo peor que una familia que comparte gustos históricos?, sí, las que comparten profesiones, aquellas en las que el legado profesional pasa de padres a hijos. Desearás haber guardado la cesta con el áspid de los anteriores cuando intenten sacarte el conejo de la chistera. Respira hondo, solo tendrás que aguantarles lo que dure la sesión fotográfica, imagínatelos en las cenas familiares. Al niño todavía le queda mucho que aprender, en lugar de una paloma, se ve que lleva un pollo de plástico debajo de la capa de estrellas /cortina del Ikea. A mi esta foto personalmente me produce escalofríos.


¿Que te ha rayado la foto de antes?, pues ahora te vas a quedar a cuadros. El fondo es similar, cuatro brochazos mal dados en la pared, pero eso es lo de menos, la familia que viste igual para la foto lo prefiere, así son ellos los auténticos protagonistas, sin nada que les eclipse, ni aunque hubieras pintado las Meninas en el fondo se eclipsaría a está familia que se ha gastado la paga de un año en tela de cuadros roja… ¡hasta para vestir a las muñecas!. Y me quejaba yo de los vestidos de mantel de mi madre.


El mundo del espectáculo tira mucho, y la madre que siempre quiso ser cabaretera tiende a transmitir el legado a sus tiernos infantes. Cuidado, no te confíes, la pose ya la traen ensayada de casa después de horas y horas frente al espejo y la foto te quedará muy mona, pero a la mínima que les enciendas un foco se te pueden poner a bailar y eso no lo olvidarás fácilmente.


Aquí lo siento mucho pero te has topado con una familia amante del ciberespacio. Despídete del papel de aluminio de los bocadillos y ya estás buscando en el trastero el fondo de estrellitas que pones en el belén, pero sobre todo, reza por que el robot lo traigan ellos, ¿o es tu máquina de zumos?.


Y no es por criticar, pero un fotógrafo con narcolepsia junto a una familia aburrida, no da una una buena foto.


Estos ni fondo de estrellas ni mural de brochazos, has tenido la mala suerte de encontrarte con la familia amorosa, donde todo es dulce y blando como una nube de algodón de azúcar. Aquí veo tres riesgos potenciales para tu salud. Que el fondo de foto del reino de fantasía y ensueño te provoque un ataque epiléptico al ver tanto color junto, que los disfraces de conejito feliz te causen un ictus cerebral o que tanta dulzura te produzca un coma diabético. También hay un cuarto peligro, ¡que te abracen!.


Que no te apetece tener un surtido variado de banderas?, que no cunda el pánico, en ocasiones vienen ellos con ellas puestas, como esta entrañable parejita que ha ido recogiendo los banderines de plástico que colocan en las ferias para hacerse un traje.


Un papel con fondo playero siempre queda bien cuando un par de tortolitos quiere retratar su amor… por Winnie the Pooh. ¿Y dónde estará la jarrita de miel?. Tú por si acaso ve a mirarte el azúcar.


Unas cuantas lámparas de araña y cristalacos del tamaño de limones imitando (fielmente) diamantes, junto con unas cuantas telas negras, que combinan con todo, es otra de las cosas que siempre debes tener a mano. Puede que venga una pareja elegante y sofisticada a retratarse.


Otro peligro de la profesión es cuando vas de visita a casa de tus primos de Alburquerque, tendrás que hacerles fotos, y ellos se pondrán sus mejores galas y sacarán lo mejor de sí para que tú lo guardes para la posteridad. Descubrirás que la tía Enriqueta es friolera y lleva sus pieles dentro de casa, aunque de vez en cuando le presta el gorrito al marido para que no se le enfríen las ideas, y que tu primo Federico tiene unas habilidades que preferirías no conocer. Menuda elasticidad y bonita chupa de moto.



También tendrás que sacar una foto a la prima Eustaquia con sus dos mejores amigos, el lindo perrito Flufy y su calabacín.



Mira debajo de la mesa, ¿no hay algo mordiéndote el pie?.


Otro dato importante cuando te pidan una foto de familia es contar cuántas personas hay en la casa, que luego te dejas a uno fuera y se enfada. ¿No eran siete?.


Pero no todo es quejarse, reconozcamos que esta profesión tiene sus gratificaciones, ¿que la familia se empeña en que les saques una foto en la playa?, elige un buen fondo para que posen. Ya sabemos que la playa es muy monótona, solo hay agua y arena, pero puedes pescar un calamar…

.
 
Arriba