Resulta que el voluntariado del DIF en un municipio del estado de Quintana Roo organizó una rifa en la cual, por pura casualidad, resultaron ganadores los hijos de funcionarios públicos del gobierno actual. ¿Qué cosas, no? Además sin permiso de la Segob.
El hijo del gobernador se ganó un auto Ford Fiesta.
¡Qué suertudos los muchachos!
FUENTE
La presidenta del DIF del municipio en cuestión dice que no necesitaban permiso de la Segob para realizar su "rifa", porque no era "sorteo", era "rifa entre amigos".
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El hijo del gobernador se ganó un auto Ford Fiesta.
¡Qué suertudos los muchachos!
CHETUMAL, Q. Roo.- El Voluntariado del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del municipio de Othón P. Blanco, organizó una rifa denominada Entre Amigos "Sumando Voluntades" en la que se sortearon dos premios con un valor cercano a los 180 mil pesos. El sorteo sin embargo no contó con el permiso correspondiente de la Secretaría de Gobernación (Segob), y los ganadores fueron hijos de funcionarios públicos.
La venta de boletos para esta rifa inició en septiembre de 2010 y terminó el 14 de febrero de 2011, mismo día en el que se llevó a cabo el sorteo en presencia del propio presidente municipal de Othón P. Blanco, Andrés Ruiz Morcillo.
Alrededor de las 19 horas, en las instalaciones del Palacio Municipal, la tómbola fue sellada una vez que se depositaron los 750 boletos adquiridos. En total se imprimieron tres mil boletos con un valor de mil pesos cada uno.
Los números ganadores fueron el 1036, a nombre de Andrea Ruiz Hernández, hija del alcalde Andrés Ruiz Morcillo. Ese número la hizo ganadora de una casa en Majahual; y el 872, a nombre de Félix González Martín, que ganó un auto Ford Fiesta. El hijo del gobernador de Quintana Roo donó su premio al Voluntariado del DIF.
Por tratarse de una venta de boletos, quienes los compraron debieron recibir además un recibo, según informan fuentes a nivel central en la Segob.
El Voluntariado del DIF de Othón P. Blanco obtuvo cerca de 750 mil pesos por los 750 boletos vendidos. La ganancia habría sido cercana a los 70 mil pesos.
El sorteo fue certificado por la notaría número 43, Dolores de las Mercedes Rivera Aguilar. Segob, dentro de sus reglas de operación, permite la presencia de un notario, siempre que el supervisor de Gobernación no pueda acudir para dar fe del sorteo.
La jefa del Departamento de Juegos y Sorteos de la Segob, Georgina Lagrange Martínez, confirmó para Novedades de Quintana Roo que si en la página www.dif.opb.gob.mx, en la que se despliega una publicidad que lleva en nombre del sorteo y que de manera explícita se promueve la venta de boletos, no aparece el número de permiso, es que no fue autorizada por esa dependencia federal.
En los informes públicos 2010 y 2011 de la Segob que se encuentran en su sitio oficial tampoco aparece el trámite que debió realizar el Voluntariado del DIF municipal.
Ante la falta del permiso de Gobernación, el Departamento de Juegos y Sorteos indicó que se podría abrir una investigación en la que de resultar uno o varios responsables, podrían recibir sanciones que van desde la separación de sus cargos, hasta prisión de tres meses a tres años, además de una multa de hasta 500 mil pesos.
Para que la Segob inicie una investigación y aplique sanciones, quien no esté de acuerdo con el resultado del sorteo debe presentar una queja ante la dependencia.
El artículo 4 de la Ley Federal de Juegos y Sorteos señala que "no podrá establecerse ni funcionar ninguna casa, o lugar abierto o cerrado, en que se practiquen juegos con apuestas ni sorteos de ninguna clase, sin permiso de la Secretaría de Gobernación.
Esta fijará en cada caso los requisitos y condiciones que deberán cumplirse.
La misma ley establece que los organizadores y sus familiares están impedidos para participar en una rifa.
Se buscó la versión de la presidenta del DIF, María Antonia Hernández de Ruiz, pero se informó que estaba en una junta.
La venta de boletos para esta rifa inició en septiembre de 2010 y terminó el 14 de febrero de 2011, mismo día en el que se llevó a cabo el sorteo en presencia del propio presidente municipal de Othón P. Blanco, Andrés Ruiz Morcillo.
Alrededor de las 19 horas, en las instalaciones del Palacio Municipal, la tómbola fue sellada una vez que se depositaron los 750 boletos adquiridos. En total se imprimieron tres mil boletos con un valor de mil pesos cada uno.
Los números ganadores fueron el 1036, a nombre de Andrea Ruiz Hernández, hija del alcalde Andrés Ruiz Morcillo. Ese número la hizo ganadora de una casa en Majahual; y el 872, a nombre de Félix González Martín, que ganó un auto Ford Fiesta. El hijo del gobernador de Quintana Roo donó su premio al Voluntariado del DIF.
Por tratarse de una venta de boletos, quienes los compraron debieron recibir además un recibo, según informan fuentes a nivel central en la Segob.
El Voluntariado del DIF de Othón P. Blanco obtuvo cerca de 750 mil pesos por los 750 boletos vendidos. La ganancia habría sido cercana a los 70 mil pesos.
El sorteo fue certificado por la notaría número 43, Dolores de las Mercedes Rivera Aguilar. Segob, dentro de sus reglas de operación, permite la presencia de un notario, siempre que el supervisor de Gobernación no pueda acudir para dar fe del sorteo.
La jefa del Departamento de Juegos y Sorteos de la Segob, Georgina Lagrange Martínez, confirmó para Novedades de Quintana Roo que si en la página www.dif.opb.gob.mx, en la que se despliega una publicidad que lleva en nombre del sorteo y que de manera explícita se promueve la venta de boletos, no aparece el número de permiso, es que no fue autorizada por esa dependencia federal.
En los informes públicos 2010 y 2011 de la Segob que se encuentran en su sitio oficial tampoco aparece el trámite que debió realizar el Voluntariado del DIF municipal.
Ante la falta del permiso de Gobernación, el Departamento de Juegos y Sorteos indicó que se podría abrir una investigación en la que de resultar uno o varios responsables, podrían recibir sanciones que van desde la separación de sus cargos, hasta prisión de tres meses a tres años, además de una multa de hasta 500 mil pesos.
Para que la Segob inicie una investigación y aplique sanciones, quien no esté de acuerdo con el resultado del sorteo debe presentar una queja ante la dependencia.
El artículo 4 de la Ley Federal de Juegos y Sorteos señala que "no podrá establecerse ni funcionar ninguna casa, o lugar abierto o cerrado, en que se practiquen juegos con apuestas ni sorteos de ninguna clase, sin permiso de la Secretaría de Gobernación.
Esta fijará en cada caso los requisitos y condiciones que deberán cumplirse.
La misma ley establece que los organizadores y sus familiares están impedidos para participar en una rifa.
Se buscó la versión de la presidenta del DIF, María Antonia Hernández de Ruiz, pero se informó que estaba en una junta.
La presidenta del DIF del municipio en cuestión dice que no necesitaban permiso de la Segob para realizar su "rifa", porque no era "sorteo", era "rifa entre amigos".
CHETUMAL, Q.Roo.- Para tratar de responder por la ausencia del permiso de la Secretaría de Gobernación (Segob) para la rifa Entre Amigos "Sumando Voluntades", que organizó el Voluntariado del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), ayer esa institución dio una conferencia de prensa en la que directivos justificaron la presunta legalidad del sorteo que realizaron el 14 de febrero pasado, y en el que resultaron ganadores los hijos del alcalde Andrés Ruiz Morcillo y el gobernador Félix González Canto.
La presidenta del DIF en Othón P. Blanco, María Antonia Hernández de Ruiz, aseguró que por tratarse de una rifa entre amigos, la Ley Federal de Juegos y Sorteos no obliga a la institución a tramitar la anuencia de la Segob. Por su parte, la directora del DIF municipal, Yunitzilim Rodríguez Pedraza, dijo que para dar legalidad a la rifa, basaron su criterio en qué "modalidad elegida podía hacerse sin que mediara el permiso por parte de esa instancia federal, al catalogarse como rifa entre amigos, de acuerdo al Artículo 12, fracción primera, último párrafo, de la Ley Federal de Juegos y Sorteos
Ese artículo, de acuerdo a la ley vigente, señala las sanciones a que se harán acreedores aquellos que incumplan con el ordenamiento. Su fracción primera, se refiere "a los empresarios, gerentes, administradores, encargados y agentes de loterías o sorteos que no cuenten con autorización legal. No quedan incluidos en esta disposición los que hagan rifas sólo entre amigos y parientes".
La Segob, a nivel central, explicó vía telefónica que las rifas dejan de tener un carácter entre amigos y parientes, y por tanto son sujetas de permiso, cuando se publicita en los medios de comunicación, ya que quienes compran los boletos por esos medios no son amigos ni parientes. En el anverso de uno de los boletos presentados en la conferencia de prensa, en el inciso B, se indica que "la publicidad de la rifa entre amigos se efectuará a través de la prensa escrita, radio y televisión, con cobertura en todo el estado de Quintana Roo". Además la rifa se promovió en el sitio de Internet del gobierno municipal de Othón P. Blanco.
Rodríguez Pedraza explicó que los boletos fueron emitidos como donativos deducibles de impuestos, gracias a los cuales los donantes tuvieron oportunidad de entrar a la rifa señalada, y precisó que fue la misma Secretaría de Gobernación la cual especificó que las autorizaciones que emite son sobre artículos nuevos y no usados, como es el caso de la vivienda en cuestión.
Los tres mil boletos de la rifa constaban de tres partes: una para el DIF, otra para el presunto donante y el tercero que tenía como destino la tómbola. La Secretaría de Hacienda señala que para que los boletos de rifas y sorteos puedan se considerados como comprobantes fiscales deducibles, al menos debe contener 11 requisitos obligatorios, entre ellos: el lugar y la fecha de expedición; nombre, denominación o razón social, domicilio fiscal y clave del Registro Federal de Contribuyentes del donatario; y cuando el comprobante ampare la donación de bienes, debe consignar la leyenda: "En el caso de que los bienes donados hayan sido deducidos previamente para los efectos del impuesto sobre la renta, este donativo no es deducible".
La presidenta del DIF en Othón P. Blanco, María Antonia Hernández de Ruiz, aseguró que por tratarse de una rifa entre amigos, la Ley Federal de Juegos y Sorteos no obliga a la institución a tramitar la anuencia de la Segob. Por su parte, la directora del DIF municipal, Yunitzilim Rodríguez Pedraza, dijo que para dar legalidad a la rifa, basaron su criterio en qué "modalidad elegida podía hacerse sin que mediara el permiso por parte de esa instancia federal, al catalogarse como rifa entre amigos, de acuerdo al Artículo 12, fracción primera, último párrafo, de la Ley Federal de Juegos y Sorteos
Ese artículo, de acuerdo a la ley vigente, señala las sanciones a que se harán acreedores aquellos que incumplan con el ordenamiento. Su fracción primera, se refiere "a los empresarios, gerentes, administradores, encargados y agentes de loterías o sorteos que no cuenten con autorización legal. No quedan incluidos en esta disposición los que hagan rifas sólo entre amigos y parientes".
La Segob, a nivel central, explicó vía telefónica que las rifas dejan de tener un carácter entre amigos y parientes, y por tanto son sujetas de permiso, cuando se publicita en los medios de comunicación, ya que quienes compran los boletos por esos medios no son amigos ni parientes. En el anverso de uno de los boletos presentados en la conferencia de prensa, en el inciso B, se indica que "la publicidad de la rifa entre amigos se efectuará a través de la prensa escrita, radio y televisión, con cobertura en todo el estado de Quintana Roo". Además la rifa se promovió en el sitio de Internet del gobierno municipal de Othón P. Blanco.
Rodríguez Pedraza explicó que los boletos fueron emitidos como donativos deducibles de impuestos, gracias a los cuales los donantes tuvieron oportunidad de entrar a la rifa señalada, y precisó que fue la misma Secretaría de Gobernación la cual especificó que las autorizaciones que emite son sobre artículos nuevos y no usados, como es el caso de la vivienda en cuestión.
Los tres mil boletos de la rifa constaban de tres partes: una para el DIF, otra para el presunto donante y el tercero que tenía como destino la tómbola. La Secretaría de Hacienda señala que para que los boletos de rifas y sorteos puedan se considerados como comprobantes fiscales deducibles, al menos debe contener 11 requisitos obligatorios, entre ellos: el lugar y la fecha de expedición; nombre, denominación o razón social, domicilio fiscal y clave del Registro Federal de Contribuyentes del donatario; y cuando el comprobante ampare la donación de bienes, debe consignar la leyenda: "En el caso de que los bienes donados hayan sido deducidos previamente para los efectos del impuesto sobre la renta, este donativo no es deducible".
