A lo largo de toda mi vida siempre he tenido "encuentros" (si asi gustan llamarlo) con lo paranormal, practicamente desde que era un niño, aunque es ampliamente conocido que los niños suelen tener amigos imaginarios, en gran medida, reflejando la soledad que vivieron en su infancia, cabe resaltar que yo no era un niño particularmente sin amigos, siempre tuve bastante amigos (de carne y hueso). Sin embargo, tuve un amigo imaginario (o es lo que yo quiero pensar), dicho amigo se llamaba Daniel, dentro de las particularidades de Daniel es que era mayor, Él no era un niño, dentro de mis vagos recuerdos, estimo que tendría unos 20+ años cuando lo conocí. Otra de sus particularidades es que siempre lo veía en la ventana de mi cuarto y nunca pasaba a la casa.
Él decía que me cuidaba, que no me pasara nada malo. Platicaba conmigo y me daba consejos, conforme fui creciendo Daniel dejó de visitarme hasta que un día se despidio para siempre de mí y me dijo que ya no podía seguir viniendo, que ese era el último dia que nos veríamos, hoy por hoy, sigo sin saber que fue lo que pasó (cualquier persona diría que maduré, tal vez sea cierto).
Sin embargo, Daniel pasó de ser una figura en la ventana a ser una voz en mi cabeza. La conciencia quizá, siempre fue mi voz prudente, el super-yo que me decía "piensa las cosas dos veces", el que controlaba mis impulsos y me hacía pensar las cosas analíticamente. Daniel se convirtio en prudencia, tolerancia y respeto.
Durante muchos años viví una vida completamente normal, hasta que me tocó la adolescencia. Ese etapa de cambio que muchos de nosotrs ya vivimos y que quizá algunos muchos lectores estan viviendo en este momento.
Es dentro de esta etapa, cuando empezó mi contacto con lo paranormal. Desde muy temprana edad, tuve acceso a información no adecuada para mi en esos momentos, me interesaba el tema del satanismo, no para practicarlo, sino por curiosidad. En algun punto mi interés se desvió y poco a poco fui cayendo víctima de mis propias "investigaciones".
Pensaba que los satánicos, mas allá de adorar a Satán, tenían bases para repudiar a la Iglesia católica y a Dios mismo, empecé a letrarme en sus mandamientos, en sus creencias y convicciones.
En un principio pensé que me había convertido en una especie de medium, por fin logré lo que siempre había querido, tener contacto con demonios y entidades del "mas allá", empecé a ver cosas (Aunque nunca tuve poderes :eolo
, en numerosas ocasiones "personas" (o fantasmas, si asi lo quieren llamar) me visitaron (o quizá ya estaban aqui y simplemente los pude ver).
En principio nunca me hicieron daño, simplemente me veían, me observaban y yo pensaba que quizá siempre estuvieron haciendolo y simplemente no me había dado cuenta.
Fue un día en la madrugada, que una intensa luz me despertó, tendría yo unos 14 años. La luz venía de mi ventana, era una luz intensa, sin embargo no cegaba. Algo me llamaba a la ventana, me acerque y con sorpresa vi a mi amigo de la infancia Daniel.
Sin embargo, mi amigo Daniel no era el mismo, lo reconocía por sus ropas, pero su cara era diferente. Era una cara triste, una cara desolada, decepcionada, me vio con tristeza y me dijo que ya no lo necesitaba mas y esa fue la última vez que vi a Daniel(hasta hoy).
Pasó el tiempo y aprendí a convivir con estas "apariciones", con el tiempo se fueron intensificando al grado que no me dejaban vivir. Se me aparecían en todo lado, en el camión, en la escuela, en el coche, en el cuarto, en el baño, en mis sueños, las voces en mi cabeza nunca paraban, siempre habia alguien hablandome, distrayendome, insinuandome cosas.
Me decían que hacia cosas y yo las negaba porque no las recordaba. Tuve problemas legales en ese tiempo, porque empecé a robar, sin embargo yo no recordaba haber robado, pero mi mamá encontraba todo el dinero en mi cuarto. Ella nunca me creyó que no me acordaba.
Fue un día en la madrugada (por estas fechas de hace ya bastantes años) cuando estaba acostado en mi cama, estaba siendo asediado por las voces y personas en mi cuarto. Me voltearon boca abajo y solamente sentía como una mano huesuda me apretaba contra la cama. Sentía como me mordían y me arañaban el cuerpo, me gritaban y me escupían, las voces no me dejaban en paz, me aterrorizaban, me decían que estaba muerto en vida, que nunca iban a parar, que nunca iban a detenerse.
Me faltaba la respiracion, estaba sudando a cantaros a pesar de estar el aire acondicionado prendido, sentía como cuerpos musgosos se me subían encima para morderme, sentía como me introducían objetos por ya saben donde (se que no faltara el que se burle, pero me vale), me metian las manos a la boca, me picaban los ojos, me arrancaban vello, me quemaban con objetos.
Sentía como me mataban y me revivían solo para seguirme torturando, nunca pensé que esto fuera acabar, este proceso siguió durante horas, no fue hasta las 6 de la mañana que mi mama fue a levantarme para que me arreglara y llegara a la preparatoria, cuando se percató de mi situacion.
Me vio retorcido en la cama, llorando, con cara de sufrimiento acorralado en una esquina y empapado en sudor y viendola con cara de sufrimiento diciendole "Por favor ayudame", mi mama no supo que hacer, con sus manos y como pudo, me relajo los musculos, estaban completamente tensos. Tenía miedo que algo le hicieran a mi mamá. Fue cuando me abrí con ella y le conté todas las cosas que había estado pasando, todo lo que había estado viendo.
Pocos días antes, iba pasando por una escuela cerca de mi casa y escuche un niño llorar, sabía que no había pasado mucho tiempo antes de la salida del turno vespertino y me acerqué a donde oía el llanto y alcancé a ver al niño. Me recordó mucho a mi, porque yo era de los niños que siempre recogían al final, mi papá por su trabajo no podía pasar por mi a tiempo y a veces mandaba a otras personas a recogerme (yo no lloraba, me quedaba quieto , pero triste).
Me inspiro mucha ternura el niño y pensé que quizá podría quedarme con él hasta que pasaran sus padres a recogerlo. Cuando le toqué el hombro al niño para preguntarle si podía ayudarlo en algo, volteo a verme y me quedé pasmado. El niño era yo, era mi viva imagen cuando tenía su edad y me vio a los ojos y me dijo "No" y se desvaneció frente a mi.
Cuando se vive en un mundo alterno, con estas personas, uno no sabe distinguir entre lo que es cierto y lo que no. No parecen fantasmas, no son personas traslucidas que se andan lamentando, no flotan ni tienen la cara borrosa. Llegué a sentir muchas de esas personas, sentir su carne, sus huesos, oler su presencia, sentir sus alientos, escuchar sus voces y distinguirlas unas de otras. En mi mundo, eran personas reales, diferentes, pero a final de cuentas reales.
Despues de una serie de analisis medicos, antes de abordar lo psiquiatrico tenían que eliminar todo lo fisiologico. Me hicieron muchos examenes bastante traumatizantes, hasta que final de cuenta se dieron cuenta que mi problema era mental. Me llevaron con un psiquiatra, el cual me diagnosticó esquizofrenia catatonica. Me dijo que tomando el medicamente "Olanzapina" me la iban a controlar e iba a poder llevar una vida normal.
No se a que le llame vida normal el Psiquiatra, era un medicamento que me tumbaba (osea me dormía) 20 horas de las 24 horas diarias. Los días que tenía que ir a la escuela, iba como zombie, me movía, comía, hablaba, escuchaba, pero no estaba ahí, mi mente estaba en otro lado, lo sorprendente para el psiquiatra es que, perdía muchas de mis otras habilidades, pero mi razonamiento y mi analisis siempre se mantuvo en crecimiento. Nunca ralentizo mi aprendizaje y siempre me mantuve en los primeros lugares de la clase (hasta hoy).
Fue por iniciativa propia y despues de ver "una mente brillante" cuando decidí dejar de tomar el medicamento, supe que ese problema estaba dentro de mi cabeza y solo yo tenía el poder de controlarlo y asi fue.
Actualmente no tomo ningun medicamento y no se si aun veo cosas, pero se que ya no me molestan. Sin embargo he tenido esporadicos contactos con "fantasmas" como el que les relaté hace algunos días, en un hospital abandonado en mi ciudad.
Elestar en contacto con este tipo de imagenes se ha vuelto frecuente para mi, que no les tengo miedo. En realidad tengo curiosidad de saber que esta pasando.
Estos ultimos meses, he estado siendo atacado nuevamente por seres, seres que me jalan las extremidades y siento que me las quieren arrancar. He visto a muchos de ellos, pero no los he podido dibujar. Cuando trato de hacer un bosquejo de sus caras, simplemente no puedo. Hasta ahora no me han hablado, pero se que están ahi y no hay momento antes de dormir, que no piense en que me encuentro vulnerable para ser atacado.
Sin embargo, esto tampoco me asusta, me emociona, me gusta sentirme así, no quiero ser exorcizado ni visitar a ningun sacerdote, en cambio, quiero saber hasta donde son capaces de llegar. Siempre he querido conocer la experiencia de estar "poseído". Nunca he conocido ni he estado presente en un exorcizmo, pero es una de las metas en mi vida.
Es por eso que me tiene sin cuidado que mucha gente piense que mi relato del hospital es mentira o que andaba mal viajado, yo se lo que vi, se lo que hay ahí y se contra lo que me enfrento. Quiza ahora le estoy dando bases a muchos excepticos que piensen "Sigues enfermo, ve al psiquiatra de nuevo", reitero, eso me tiene sin cuidado. Solamente queríacompartir esta experiencia en este nuevo foro y al mismo tiempo, en cuanto tenga tiempo, tratar de documentar todas mis visiones (que son muchas).
No les prometo un tiempo, porque tambien tengo una vida
en este momento deberia estar estudiando para un examen final, pero fue a raiz de un eventito que acaba de pasar en este momento, que fue que me decidi a compartirles esta parte de mi a ustedes, de momento es todo y esperen las fotos del hospital abandonado :vientos: Quizá para la próxima semana.
Él decía que me cuidaba, que no me pasara nada malo. Platicaba conmigo y me daba consejos, conforme fui creciendo Daniel dejó de visitarme hasta que un día se despidio para siempre de mí y me dijo que ya no podía seguir viniendo, que ese era el último dia que nos veríamos, hoy por hoy, sigo sin saber que fue lo que pasó (cualquier persona diría que maduré, tal vez sea cierto).
Sin embargo, Daniel pasó de ser una figura en la ventana a ser una voz en mi cabeza. La conciencia quizá, siempre fue mi voz prudente, el super-yo que me decía "piensa las cosas dos veces", el que controlaba mis impulsos y me hacía pensar las cosas analíticamente. Daniel se convirtio en prudencia, tolerancia y respeto.
Durante muchos años viví una vida completamente normal, hasta que me tocó la adolescencia. Ese etapa de cambio que muchos de nosotrs ya vivimos y que quizá algunos muchos lectores estan viviendo en este momento.
Es dentro de esta etapa, cuando empezó mi contacto con lo paranormal. Desde muy temprana edad, tuve acceso a información no adecuada para mi en esos momentos, me interesaba el tema del satanismo, no para practicarlo, sino por curiosidad. En algun punto mi interés se desvió y poco a poco fui cayendo víctima de mis propias "investigaciones".
Pensaba que los satánicos, mas allá de adorar a Satán, tenían bases para repudiar a la Iglesia católica y a Dios mismo, empecé a letrarme en sus mandamientos, en sus creencias y convicciones.
En un principio pensé que me había convertido en una especie de medium, por fin logré lo que siempre había querido, tener contacto con demonios y entidades del "mas allá", empecé a ver cosas (Aunque nunca tuve poderes :eolo
, en numerosas ocasiones "personas" (o fantasmas, si asi lo quieren llamar) me visitaron (o quizá ya estaban aqui y simplemente los pude ver).En principio nunca me hicieron daño, simplemente me veían, me observaban y yo pensaba que quizá siempre estuvieron haciendolo y simplemente no me había dado cuenta.
Fue un día en la madrugada, que una intensa luz me despertó, tendría yo unos 14 años. La luz venía de mi ventana, era una luz intensa, sin embargo no cegaba. Algo me llamaba a la ventana, me acerque y con sorpresa vi a mi amigo de la infancia Daniel.
Sin embargo, mi amigo Daniel no era el mismo, lo reconocía por sus ropas, pero su cara era diferente. Era una cara triste, una cara desolada, decepcionada, me vio con tristeza y me dijo que ya no lo necesitaba mas y esa fue la última vez que vi a Daniel(hasta hoy).
Pasó el tiempo y aprendí a convivir con estas "apariciones", con el tiempo se fueron intensificando al grado que no me dejaban vivir. Se me aparecían en todo lado, en el camión, en la escuela, en el coche, en el cuarto, en el baño, en mis sueños, las voces en mi cabeza nunca paraban, siempre habia alguien hablandome, distrayendome, insinuandome cosas.
Me decían que hacia cosas y yo las negaba porque no las recordaba. Tuve problemas legales en ese tiempo, porque empecé a robar, sin embargo yo no recordaba haber robado, pero mi mamá encontraba todo el dinero en mi cuarto. Ella nunca me creyó que no me acordaba.
Fue un día en la madrugada (por estas fechas de hace ya bastantes años) cuando estaba acostado en mi cama, estaba siendo asediado por las voces y personas en mi cuarto. Me voltearon boca abajo y solamente sentía como una mano huesuda me apretaba contra la cama. Sentía como me mordían y me arañaban el cuerpo, me gritaban y me escupían, las voces no me dejaban en paz, me aterrorizaban, me decían que estaba muerto en vida, que nunca iban a parar, que nunca iban a detenerse.
Me faltaba la respiracion, estaba sudando a cantaros a pesar de estar el aire acondicionado prendido, sentía como cuerpos musgosos se me subían encima para morderme, sentía como me introducían objetos por ya saben donde (se que no faltara el que se burle, pero me vale), me metian las manos a la boca, me picaban los ojos, me arrancaban vello, me quemaban con objetos.
Sentía como me mataban y me revivían solo para seguirme torturando, nunca pensé que esto fuera acabar, este proceso siguió durante horas, no fue hasta las 6 de la mañana que mi mama fue a levantarme para que me arreglara y llegara a la preparatoria, cuando se percató de mi situacion.
Me vio retorcido en la cama, llorando, con cara de sufrimiento acorralado en una esquina y empapado en sudor y viendola con cara de sufrimiento diciendole "Por favor ayudame", mi mama no supo que hacer, con sus manos y como pudo, me relajo los musculos, estaban completamente tensos. Tenía miedo que algo le hicieran a mi mamá. Fue cuando me abrí con ella y le conté todas las cosas que había estado pasando, todo lo que había estado viendo.
Pocos días antes, iba pasando por una escuela cerca de mi casa y escuche un niño llorar, sabía que no había pasado mucho tiempo antes de la salida del turno vespertino y me acerqué a donde oía el llanto y alcancé a ver al niño. Me recordó mucho a mi, porque yo era de los niños que siempre recogían al final, mi papá por su trabajo no podía pasar por mi a tiempo y a veces mandaba a otras personas a recogerme (yo no lloraba, me quedaba quieto , pero triste).
Me inspiro mucha ternura el niño y pensé que quizá podría quedarme con él hasta que pasaran sus padres a recogerlo. Cuando le toqué el hombro al niño para preguntarle si podía ayudarlo en algo, volteo a verme y me quedé pasmado. El niño era yo, era mi viva imagen cuando tenía su edad y me vio a los ojos y me dijo "No" y se desvaneció frente a mi.
Cuando se vive en un mundo alterno, con estas personas, uno no sabe distinguir entre lo que es cierto y lo que no. No parecen fantasmas, no son personas traslucidas que se andan lamentando, no flotan ni tienen la cara borrosa. Llegué a sentir muchas de esas personas, sentir su carne, sus huesos, oler su presencia, sentir sus alientos, escuchar sus voces y distinguirlas unas de otras. En mi mundo, eran personas reales, diferentes, pero a final de cuentas reales.
Despues de una serie de analisis medicos, antes de abordar lo psiquiatrico tenían que eliminar todo lo fisiologico. Me hicieron muchos examenes bastante traumatizantes, hasta que final de cuenta se dieron cuenta que mi problema era mental. Me llevaron con un psiquiatra, el cual me diagnosticó esquizofrenia catatonica. Me dijo que tomando el medicamente "Olanzapina" me la iban a controlar e iba a poder llevar una vida normal.
No se a que le llame vida normal el Psiquiatra, era un medicamento que me tumbaba (osea me dormía) 20 horas de las 24 horas diarias. Los días que tenía que ir a la escuela, iba como zombie, me movía, comía, hablaba, escuchaba, pero no estaba ahí, mi mente estaba en otro lado, lo sorprendente para el psiquiatra es que, perdía muchas de mis otras habilidades, pero mi razonamiento y mi analisis siempre se mantuvo en crecimiento. Nunca ralentizo mi aprendizaje y siempre me mantuve en los primeros lugares de la clase (hasta hoy).
Fue por iniciativa propia y despues de ver "una mente brillante" cuando decidí dejar de tomar el medicamento, supe que ese problema estaba dentro de mi cabeza y solo yo tenía el poder de controlarlo y asi fue.
Actualmente no tomo ningun medicamento y no se si aun veo cosas, pero se que ya no me molestan. Sin embargo he tenido esporadicos contactos con "fantasmas" como el que les relaté hace algunos días, en un hospital abandonado en mi ciudad.
Elestar en contacto con este tipo de imagenes se ha vuelto frecuente para mi, que no les tengo miedo. En realidad tengo curiosidad de saber que esta pasando.
Estos ultimos meses, he estado siendo atacado nuevamente por seres, seres que me jalan las extremidades y siento que me las quieren arrancar. He visto a muchos de ellos, pero no los he podido dibujar. Cuando trato de hacer un bosquejo de sus caras, simplemente no puedo. Hasta ahora no me han hablado, pero se que están ahi y no hay momento antes de dormir, que no piense en que me encuentro vulnerable para ser atacado.
Sin embargo, esto tampoco me asusta, me emociona, me gusta sentirme así, no quiero ser exorcizado ni visitar a ningun sacerdote, en cambio, quiero saber hasta donde son capaces de llegar. Siempre he querido conocer la experiencia de estar "poseído". Nunca he conocido ni he estado presente en un exorcizmo, pero es una de las metas en mi vida.
Es por eso que me tiene sin cuidado que mucha gente piense que mi relato del hospital es mentira o que andaba mal viajado, yo se lo que vi, se lo que hay ahí y se contra lo que me enfrento. Quiza ahora le estoy dando bases a muchos excepticos que piensen "Sigues enfermo, ve al psiquiatra de nuevo", reitero, eso me tiene sin cuidado. Solamente queríacompartir esta experiencia en este nuevo foro y al mismo tiempo, en cuanto tenga tiempo, tratar de documentar todas mis visiones (que son muchas).
No les prometo un tiempo, porque tambien tengo una vida
en este momento deberia estar estudiando para un examen final, pero fue a raiz de un eventito que acaba de pasar en este momento, que fue que me decidi a compartirles esta parte de mi a ustedes, de momento es todo y esperen las fotos del hospital abandonado :vientos: Quizá para la próxima semana.
Vaya, vaya, vaya
