Lugares Malditos en el Mundo. Parte 2

#1
seguimos con la recopilación de los lugares malditos en el mundo para todos aquellos que amablemente comentaron el post anterior y que les interesó leer una segunda parte... Espero que disfruten de leer, porque estos sitios tienen una descripción algo larga.

6. Poveglia: la isla de los muertos veneciana. La isla del no retorno.



Poveglia es una pequeña isla situada entre Venecia y el Lido en la Laguna de Venecia, al norte de Italia. Un pequeño canal divide la isla en dos partes y a día de hoy su visita sigue estando prohibida. De hecho los venecianos la llaman “la isla del no retorno”. No es un lugar especialmente violento en el oleaje pero algunas veces, este es capaz de arrastrar restos humanos carbonizados procedentes de la historia más terrorífica que podamos imaginar.

La oscura historia de la Isla de Poveglia comenzó durante la época romana cuando se usó para aislar víctimas de la peste de la población general. Siglos más tarde serviría para el mismo menester.

A comienzos del Renacimiento (XIV ),Europa sufrió una tremenda plaga de peste bubónica. En Venecia se cebó especialmente, un lugar del que era imposible escapar, sus ya sucias aguas, la humedad y el trasiego de mercaderes hicieron el resto. Se llegó a tal extremo que no había sitio dónde dejar los cadáveres, se apilaban como montañas de naipes, pero no era suficiente y había que buscar una salida a la situación desesperada. Ante tal desastre humano las autoridades de la ciudad deciden en consenso con el clero que los cuerpos sean trasladados a la isla de Poveglia.

Los cadáveres eran trasladados a la isla y en enormes fosas eran incinerados. Mientras Venecia y media Europa era devastada por la peste negra, según un censo de la época fue aniquilada más de un tercio de la población europea. Las autoridades médicas y civiles decidieron que no sólo había que llevar a los muertos, sino también a los que padeciesen los síntomas. Hasta allí eran arrastrados hombres, mujeres y niños todavía vivos y lanzados a las piras crematorias. En pocos años más de 160.000 personas acabaron sus días en aquella isla.

Tal fue el enorme crematorio que se originó y tal fue la cantidad de restos humanos calcinados que a día de hoy el oleaje aún arrastra despojos humanos a las costas más cercanas a la isla. Nadie puede visitar la isla salvo los dueños de los viñedos que allí existen, incluso los pescadores temen acercarse al lugar por si acaso sus redes capturan huesos humanos.

La isla se ha convertido en una zona podrida de hecho. El suelo de la isla junto con los restos carbonizados de los cuerpos arrojados allí, ha desembocado en la creación de una gruesa capa de ceniza pegajosa. El núcleo de la isla es, literalmente, los restos humanos que ha dado a la isla una reputación detestable, aunque parece ser muy bueno para las vides que se plantan allí.

Tuvieron que pasar muchos años hasta que la isla quedó totalmente abandonada, pero en el año 1922 construyeron allí un psiquiátrico completo con un impresionante campanario que puede verse en toda la isla. Los recluidos allí (enfermos mentales, psicópatas) fueron los primeros en informar de que veían a los fantasmas de las víctimas de la peste y escuchaban los lamentos de sus espíritus atormentados por el sufrimiento, pero nadie, por el estado mental de los testigos, quiso creerlos.

El Director del psiquiátrico comenzó a experimentar con los pacientes nuevos métodos de curación, lobotomías y trepanaciones eran prácticas habituales en los pacientes con herramientas rudimentarias como taladros de mano, cinceles y martillos. Muchos de ellos fueron llevados a la torre del campanario, donde fueron torturados y sometidos a una serie de inhumanos horrores.

7. Mary King´s Close, los laberintos de la muerte.




Edimburgo es una metrópoli anclada en épocas pretéritas. Pasear por sus calles es evocar los pensamientos oscuros que hubieron de tomar la mente de Robert-Louis Stevenson para crear el infierno antagónico de Jeckyll y Hyde. Al pisar la Royal mile, la milla real que vertebra la ciudad vieja desde el castillo hasta el palacio de Hollyrood, pocos son conscientes de que bajo este empedrado hubo otra ciudad, callejones de contraluces donde habitan las almas perdidas.

El año, 1347. La peste negra avanza por Europa Central dejando un reguero de padecimientos y muerte sin parangón hasta la fecha. Siguiendo la ruta de Crimea se ha extendido como la pólvora, una vez los mongoles han arrojado con las catapultas los cadáveres de los apestados contra las murallas de Teodosia, allí donde la última colonia de genoveses veían aterrados los efectos de la terrible enfermedad sobre los cuerpos de los afectados. Y de ahí a Italia, Francia, España, Inglaterra… La mitad de la población del viejo continente sucumbe bajo la afilada guadaña de la “muerte negra”, el castigo que en su infinita misericordia los dioses han dejado caer sobre el hombre, frágil vástago de sus propias debilidades… A tal punto llegó la situación, que en el año 1561, el monje carmelita y profesor de teología en la Universidad de París Jean de Venette, aseguró que “tan grande era la mortalidad, que durante largo tiempo, 500 difuntos eran llevados en carretas, con gran devoción, al cementerio de los Santos Inocentes para ser enterrados. Un gran número de santas hermanas, sin temor atendieron con dulzura y humildad a los enfermos y sin pensar en el horror, hoy descansan en paz con Cristo, como nosotros piadosamente lo creemos”. La falta de salubridad en las grandes urbes, las ratas y pulgas –auténticas transmisoras de las imparable pandemia–, el hacinamiento de una población que acudía a las ciudades para otear un futuro más venturoso, los callejones que pasaban por ser enormes estercoleros dada la carencia de un sistema de saneamiento que eliminase tanta basura, convertía a éstas en auténticas incubadoras de virus que campaban a sus anchas, y contra los que el ser humano únicamente podía combatir con un sistema inmunológico deficiente, dada la carencia de medicamentos. Y es que cuando la muerte negra se manifestaba el horror se apoderaba de los entornos, y los apestados se convertían en parias a los que aislar.

El siniestro nombre derivaba de las enormes manchas de tonos pardo-negruzcos que afloraban en la dermis del “condenado”, a lo que posteriormente seguía, durante aproximadamente tres días de insufrible agonía, la esputación de sangre, tumores de gran tamaño por toda la anatomía –especialmente bajo las axilas y alrededor del pecho–, delirios… marcando el final de una vida, en la mayoría de las ocasiones, castigada por la pobreza. El horror se apoderó de media Europa y parte de la restante, siendo representado de manera grotesca en el arte de tan oscuros tiempos. Así nació el Ars Moriendi –“arte de morir”–, un gusto por lo macabro que llenó de esqueletos, de danzas mortuorias y de tenebrismo, pinturas, esculturas y obras literarias. Trescientos años en los que muchos creyeron ver la siniestra figura de Satanás gobernando aquel infierno.

8. Ochate ¿La puerta del infierno?



Ochate, situado en el condado de Treviño (Burgos) a 14 kilómetros de Vitoria, se puede llegar en coche hasta San Vicentejo, luego hay que proseguir el camino a pie por un camino de tierra, al poco se verá la torre de Ochate que será nuestra misteriosa guía, seguirla visualmente y llegaréis al pueblo de Ochate. Donde el misterio os envolverá sin que podais hacer nada para remediarlo.

Datos históricos

Año 1134: Goate (puerta de arriba) aparece por primera vez dentro de la Nomina de San Millán, en ese momento el pueblo contaba con tan solo 15 habitantes.
Año 1234: En este año se construye la “famosa” torre de Ochate, ubicada sobre la llanura, se cree que su primera función fue la de actuar como faro para orientar a carruajes y campesinos.
Año 1254: Incomprensiblemente en este año y hasta muy bien entrado el siglo XVI no se recogió ningún dato.
Año 1557: Ochate aparece como un pueblo despoblado debido a la emigración de sus habitantes a otras zonas o su muerte y desaparición.
Año 1750: En este año el censo da referencia a tan solo seis habitantes.

A partir del siglo XIX es cuando Ochate se convierte en uno de los lugares más habitados en la comarca y cuando empieza a desarrollarse la maldición.

Son tres las epidemias que arrasan Ochate:

1º En 1860 se extiende la viruela, de la que apenas sobreviven una decena de personas.
2º En 1864 se extiende el tifus, arrasando también con casi toda la totalidad de habitantes.
3º En 1870 se extiende el cólera, que fulmina para siempre a toda la vida de este pueblo.Lo raro del caso es que estas epidemias solo afectaron al pueblo de Ochate y no a las otras comarcas que había a los alrededores.

Desapariciones

En Noviembre de 1868 el párroco del pueblo Antonio Villegas, se dirigía a la ermita de Bergondo, para recoger unos utensilios. Varios vecinos le vieron subir por la ladera. Pero aquella vez fue la última que fue visto, ya que despareció sin dejar rastro.

Un joven agricultor llamado Juan Peché desapareció sin dejar rastro. Nadie supo nunca que ocurrió. En su casa se encontró la comida a medio hacer, enseres personales, ropa, dinero, etc…
El mismo día en el que despareció Juan Peché, el agricultor F. Amestoy apareció en el sendero que conduce al pueblo totalmente calcinado. Nadie fue capaz de encontrar nada que pudiera explicar tal hecho, y hoy en día se sigue sin saber qué sucedió aquella noche.

Ovnis sobre Ochate


El labrador Víctor Moraza, fue el primero en denunciar en 1947 la presencia de luces extrañas sobre las ruinas de Ochate. Destellos que, como recoge Iker Jiménez en su libro, «parecían descender en vertical hacia el poblado. Raudo se adentró en las ruinas y allí,
sobre la torre, se balanceaba algo parecido a un globo blanquecino y silencioso de dos metros de diámetro. Tras permanecer estático unos segundos, se desplomó sobre la edificación iluminando toda la zona con fuertes resplandores».

El 17 de Agosto de 1978, Ángel Resines se encontraba regando su huerto cuando observó en las proximidades de Ochate una luz blanquecina que se iba acercando rápidamente. Ángel muy asustado tuvo que echarse al suelo para que la esfera no chocase sobre él. Rápidamente se dirigió hacia un cobertizo para esconderse observando como el objeto luminoso ascendía estrepitosamente dividiéndose en tres luces de similar tamaño. Al momento se alejaron
rápidamente y en silencio hacia unos montes cercanos, donde cayeron a tierra.

El 24 de junio de 1981 Prudencio Muguruza observó una gran esfera de color azul que parecía descender en las cercanías de
Ochate. “Sentía un miedo indescriptible, oía a mi alrededor una especie de intensísimo zumbido; sin pensarlo dos veces, como un autentico autómata, saque una foto con mi modesta cámara a aquel increíble fenómeno”.

Encuentros con lo imposible


En 1986 el empresario Fernando Gil encontrándose junto a la torre de Ochate, pudo oír unas pisadas que formaban un circulo que se iban cerrando a su alrededor, hasta que notó como una mano invisible le tocaba el hombro.

En Julio de 1987 la primera y tercera compañías de carros blindados de la base militar de Araca (Vitoria) estuvieron perdidas durante más de cuatro horas deambulando por una espesa niebla en Ochate. Entre una y otra compañía no podían establecer contacto alguno pese a
estar separados por tan solo 300 m. Los equipos de comunicación no funcionaban, había unas inexplicables interferencias, y las dos compañías estuvieron deambulando por las inmediaciones del pueblo durante cuatro horas sin encontrarse entre sí. Por lo raro de la
situación y debido a la imposibilidad de comunicación, el sargento Resines, a cargo de una de las compañías, decidió salir a buscar a la otra y conociendo bien la zona admitió que por unos momentos se sintió perdido sin conocer donde se encontraba y tuvo que volver.
Debido a la situación de desconcierto y nerviosismo, el capitán Aparicio ordenó volver a la base.

En ese mismo año un grupo de investigadores entre los que se encontraba Alberto Fernández, decidieron ir a Ochate. Cuando se dirigían a los coches, se encontraron a Alberto Fernández muerto dentro de su coche.

Algunos meses después de su muerte, esos mismos investigadores escucharon una especie de lamentos en el cobertizo de Ochate, se asomaron por la puerta y vieron una figura humana con barba y nariz aguileña como la de Alberto Fernández, según relataron después.

Pero sin duda una de las historias que más me han impresionado es la de Mikel Colmenero, cámara y radioaficionado de Vitoria. Al ir alejándose del grupo principal con su vehículo éste comenzó a fallar, y al intentar volver vio como pasaron por los laterales de su coche
dos humanoides de unos tres metros de altura y cabezas ovaladas, con unos trajes ceñidos de color negro y dos franjas más claras. Se quedo inmóvil y los dos humanoides se fueron alejando. Parece ser que en ese momento, en una cinta que llevaba Mikel en el radio-casete de su coche, se grabó la frase “yo sí estoy”, y provocó tanto pavor en el testigo que la destruyó.

Estas son muchas de las leyendas y acontecimientos que han ocurrido en Ochate. Pone a uno la piel de gallina saber que en ese recóndito lugar cercano a Vitoria, han ocurrido tantos sucesos inexplicables.

9. Hotel Stanley, durmiendo entre los fantasmas de “El resplandor




La rarología del hotel no se limita a las supuestas experiencias de Stephen King, sus empleados y sus clientes han informado de extraños sucesos en el lugar: objetos que se mueven solos, luces que se encienden y apagan solas, y presencias…

Al parecer, algunos espíritus frecuentan el edificio, el señor Stanley, fundador del hotel, ha sido visto en el vestíbulo y la sala de billar del edificio, la señora Stanley frecuenta la sala de baile, a veces se oye música de un piano, pero cuando alguien se acerca la música se detiene.

El hotel Stanley tiene una habitación que no suele alquilarse al público, es la habitación 407, pues se dice que allí habita un espectro que no admite la presencia de huéspedes, se trata del señor Dunraven, terrateniente que compró parte de los terrenos del hotel y que fue ejecutado por estafar a cientos de personas, que suele aparecer en una esquina, según personas que tuvieron “la suerte” de quedarse alguna noche, informaron que las luces de la habitación se encendían solas, la temperatura de la habitación descendía repentinamente y de ruidos provocados por alguien en la misma estancia.

En la habitación 418 se obtienen la mayoría de informes de actividad inquietante. El equipo de limpieza asegura haber oído risas y llantos de niños, incluso notar como alguien se sentaba en la cama sin haber estado nadie allí, algunos huéspedes que se alojaron en las habitaciones contiguas se han quejado de ruidos provocados por niños, infantes que juegan en el pasillo, correteando por él a altas horas de la madrugada.

En la historia del hotel Stanley se descubren finalmente, tras estos sucesos inexplicables, algunos reportes sobre asesinatos en el lugar que no fueron resueltos, hechos que no estuvieron bien documentados en la época en la que sucedieron, y que evidentemente, en su tiempo, el personal del hotel se negó a sacar a la luz, temiendo perder clientela y prestigio.

En cuanto a ubicación geográfica se refiere, el hotel se encuentra situado 96 Km. al noroeste de Denver, a casi 2.300 pies de altura sobre el mar, y más concretamente en los aledaños del pueblo de montaña de Estes Park. Stanley Hotel data del año 1909, y aun a día de hoy cientos de visitantes se hospedan en él, con el objeto de descubrir a los supuestos fantasmas que merodean sus pasillos.

10. Ciudades bajo tierra, la ciudad oculta de Mao.





Proyecto 131: Un paso bajo tierra
China, 1970, el mundo convulsionado por el socialismo y el comunismo y aún recuperándose de esas terribles guerras mundiales que, queramos o no, siempre estarán en nuestras memorias. La tensión en estos tiempos era aplastante, los países se volvían locos por obtener armamento nuclear en secreto y se empezaban a desarrollar o a mejorar las armas bacteriológica

Todo parecía indicar una tercera guerra mundial, las relaciones entre los países era cada vez más ofensiva que diplomática. Siendo Rusia en ese entonces la antigua unión soviética esta amenazaba a medio mundo con su poderío militar dominados por las malversadas ideas de sus líderes y entonces en la China bajo el mando de Mao Tse Tung se decide lanzar un proyecto de gran ambición arquitectónica como prevención ante un posible conflicto nuclear: “La ciudad bajo tierra” ó (地下城)(Dìxià Chéng) codificado 131 y creado con propósitos de salvaguardar a la población y como refugio anti bombas. Concebido como una compleja red de túneles bajo Beijing se diseño para albergar a los entonces seis millones de habitantes de la época bajo esta ciudad, sin embargo, este no fue su único propósito ya que en algunos puntos se instalaron puestos militares siendo una especie de último bastión de defensa y ataque.

De un diámetro aproximado de 85 kilómetros a la redonda y bajo aproximadamente 8 a 18 metros bajo tierra, se instalaron también 90 entradas por todo Quiamen y Chongwen, distritos de Beijing, ocultos en negocios y tiendas para no levantar sospechas de que semejante obra se llevaba acabo. Como se mencionó, diseñado para soportar conflictos convencionales o nucleares. Esta compleja red se diseño pensando y posteriormente construyendo: Restaurante, colegios, hospitales, fábricas, graneros, granjas todas estas estructuras muy bien ventiladas mediante una especie de túneles que se cerrarían herméticamente en caso de algún conflicto nuclear o químico en tierra. Se diseñaron también puertas de concreto para evitar “escapes” y/o inundaciones o cualquier otra clase de evento en el que sea necesario cerrar estás puertas. Aunque muchos de estos datos tal vez dejan cortos algunos testimonios de personas que han recorrido está ciudad dejando entrever que muchas entradas se conectan con los lugares más importantes de la capital china tales como son: Plaza Tiananmen, el Templo del cielo, la ciudad prohibida y las colinas del oeste.

No se sabe tampoco a ciencia cierta si el proyecto fue culminado o dejado a medio construir. Paradójicamente, tampoco fue al parecer utilizado. En caso de que si sucediera realmente un ataque parece ser que la mitad de la población de Beijing iriá a esta ciudad y la otra mitad a las colinas de oeste donde, al parecer, también parecen existir refugios nucleares. Como dato curioso incluso parece ser que también algunas entradas se conectan a los hogares de la gente con más poder económico y político de esa época en Beijing.

Construído con una fuerza obrera de aproximadamente 300,000 ciudadanos chinos de diferente procedencias. Reclutados sin ningún orden ni concierto, no dudo que muchos hayan muerto en la construcción, como deja evidencia histórica muchos proyectos de semejante naturaleza a lo largo de la historia. Varias entradas antiguas se demolieron para poder dar paso a la inmensa cantidad de material necesario para esta obra.

Hoy, 2010, y con algunos datos que sugieren de que Beijing se hunde literalmente y creo que ya sabemos porqué. Esta obra ha sido olvidada a tal punto que muchos ciudadanos de Beijing ni siquiera saben de su existencia. Como muchos suponen, fue utilizado con fines no necesariamente humanitarios en caso de una guerra. Se sabe que fue utilizado como prostíbulo, hotel y sólo dios sabe que más.

El gobierno chino reabrió las puertas de este complejo el año 2000 y con entrada libre y restringida a sólo algunas áreas y posteriormente cerrado de nuevo el 2008. Hoy se puede acceder, no necesariamente de manera legal, por 2.50 dólares (20 yuans) en las que a duras penas por la pésima o nula iluminación se observan vestigios de semejante obra. Hay incluso una fábrica de seda aún operativa en este complejo, carteles con propagandas políticas y militares de esa época, dormitorios con camas y purificadores de agua ya oxidados por el paso del tiempo. Poco a poco el tiempo y la frágil mente de las personas le están pasando factura a este lugar. Como reflexión final y como siempre se ha dicho, el poder vuelve ciegos a los hombres y estos se ahogan en sus sueños. Aún hoy, no creo que ningún movimiento armado o violento tenga la razón en sus acciones y menos si estos involucran en sus asuntos con las personas que sólo desean vivir en paz. Creo que para realizar cualquier acción o comentario hay que reflexionar muy bien primero sobre este, ya que una simple palabra o pensamiento puede cambiar el curso de todo.

Como verán esta última no es nada paranormal ni maldita, pero me pareció muy interesante así que decidí agregarla a este top :D espero les agrade
 
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