El panorama indica que el coraje e indignación de las autoridades norteamericanas en este caso, podría ser un factor importante para que se regrese al Chapo a prisión.
Enrique Pérez Quintana
Proyecto sin fin
Lunes 20 de Julio del 2015
En cuanto regresó de su viaje a París a donde asistió como invitado de honor del Gobierno francés para presidir las fiestas conmemorativas de la Revolución Francesa y firmó diversos convenios de intención en materia inversión económica, turística, científica, educativa y cultural, el presidente Enrique Peña Nieto se reunió con su gabinete de seguridad y les ordenó la pronta recaptura de “El Chapo Guzmán”.
Asistieron Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, Monte Alejandro Rubido, Comisionado Nacional de Seguridad, Eugenio Ímaz, titular del Cisen, y Arely Gómez, Procuradora General de la República.
Expresó a sus colaboradores estar “indignado como ciudadano” y dijo que la única forma de revertir el agravio que representó la fuga de “El Chapo Guzmán”, será su captura y aplicar todo el peso de la ley a los que colaboraron en la evasión. Peña Nieto instruyó a Arely Gómez, Procuradora General de la República para “que realmente haga una investigación a fondo y determine dónde pudo haber complicidades, de quiénes y que sean sancionados”.
Al Gabinete de Seguridad le dijo Peña Nieto que la fuga de “El Chapo Guzmán” era la causa de la frustración y enojo de diversos sectores de la sociedad y su gobierno asume su responsabilidad en esta fuga.
Es interesante observar cómo un tema esencialmente policiaco y de seguridad pública, como es mantener a un preso en la cárcel, aunque sea el más peligroso, de inmediato se politizó cuando la terca realidad obligó Miguel Osorio Chong, secretario de Gobernación, a regresar de Paris a México y cuando llegó el asunto ya no era solo de seguridad pública había escalado a una amenaza a la Seguridad Nacional y contenía además el coraje, frustración y enojo del Gobierno de los Estados Unidos que de inmediato ofreció su colaboración para la pronta captura del delincuente, otra vez, más buscado en el mundo.
El tema de la fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, además de la cloaca de corrupción que abrió, se convirtió rápidamente en un asunto mediático que circuló en todo tipo de medios en el mundo, incluyendo las redes sociales en donde la actual opinión pública, que opera sin intermediarios, expresó con burlas, chistes, y “memes” sus puntos de vista que, en la mayoría de los casos, coincidió en el concepto de ineptitud del gobierno de Peña Nieto y la corrupción que envenena a gran parte de los grupos que se disputan el poder en México.
El gobierno reaccionó en su defensa abriendo la información sobre la fuga e invitando a importantes medios de comunicación a conocer la celda y el túnel por el que supuestamente se dio la evasión. La intención ha sido solo una, acreditar que todo lo hecho y previsto en el penal de alta seguridad de El Altiplano está bien, pero lo sucedido era totalmente imprevisible.
El Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, en entrevista con la periodista de Televisa, Adela Micha, comentó que “todos los escenarios de evasión presupuestados por la autoridad en el penal de máxima seguridad El Altiplano fueron superados por Joaquín El Chapo Guzmán. Era imprevisible una fuga de este tipo”.
Ante pregunta de Adela Micha “¿qué falló?” Rubido García responde que, “hasta el momento, no ha detectado algún descuido u omisión en los protocolos de seguridad que haya dado pie a la escapatoria del líder del cártel del Pacífico y admite, sí, es de fantasía”. No descartó que quienes planearon la fuga tuvieron acceso a los planos del penal: “Es otra de las líneas de investigación, este penal data del año 91, y los planos de los penales 1, 2 y 3 son muy similares.”
Al igual que su jefe, el secretario de Gobernación, Monte Alejandro Rubido no va a renunciar porque, dice, su deber es enfrentar la crisis. Se reunió con titulares y representantes de las secretarías de Seguridad Pública de las 32 entidades federativas para lograr la reaprehensión de Joaquín Guzmán Loera.
La segunda fuga del Chapo Guzmán fue el tema más comentado en medios nacionales y extranjeros. El gobierno de Estados Unidos lo colocó una vez más en sus listas de delincuentes más buscados. La Agencia Antidrogas (DEA), emitió un documento en el que se menciona que autoridades de los estados de Arizona, Texas, California y Nueva York tienen causas penales abiertas en su contra. Esta alerta se suma a la emitida por autoridades mexicanas para que Interpol lo rastree en más de 190 países.
La sabiduría popular se expresa con enorme certeza “De buenas intenciones está empedrado el camino al infierno”. La experiencia previa del Estado indica que tuvieron que pasar 13 años para que lograrán capturar a E Chapo Guzmán después de su fuga del Penal de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco.
En algunos medios, cuando se llevó a cabo la captura en 2014, se dijo que el dato para que se lograra la captura había llegado desde los Estados Unidos y que en el operativo participaron elementos de las fuerzas de seguridad de ese país.
Es relevante el dato porque el panorama indica que el coraje e indignación de las autoridades norteamericanas en este caso, podría ser un factor importante para que se regrese al Chapo a prisión, pero si lo capturan los policías de Estados Unidos, es probable que lo trasladen directamente a alguna prisión de ese país, porque la confianza en el gobierno mexicano está rota en materia de seguridad. Esa si sería una verdadera vergüenza.
¿Usted que opina?, lo capturan antes o después del sexenio o, si lo capturan los americanos lo dejan o se lo llevan. Hagan sus apuestas.
Fuente
Enrique Pérez Quintana
Proyecto sin fin
Lunes 20 de Julio del 2015
En cuanto regresó de su viaje a París a donde asistió como invitado de honor del Gobierno francés para presidir las fiestas conmemorativas de la Revolución Francesa y firmó diversos convenios de intención en materia inversión económica, turística, científica, educativa y cultural, el presidente Enrique Peña Nieto se reunió con su gabinete de seguridad y les ordenó la pronta recaptura de “El Chapo Guzmán”.
Asistieron Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, Monte Alejandro Rubido, Comisionado Nacional de Seguridad, Eugenio Ímaz, titular del Cisen, y Arely Gómez, Procuradora General de la República.
Expresó a sus colaboradores estar “indignado como ciudadano” y dijo que la única forma de revertir el agravio que representó la fuga de “El Chapo Guzmán”, será su captura y aplicar todo el peso de la ley a los que colaboraron en la evasión. Peña Nieto instruyó a Arely Gómez, Procuradora General de la República para “que realmente haga una investigación a fondo y determine dónde pudo haber complicidades, de quiénes y que sean sancionados”.
Al Gabinete de Seguridad le dijo Peña Nieto que la fuga de “El Chapo Guzmán” era la causa de la frustración y enojo de diversos sectores de la sociedad y su gobierno asume su responsabilidad en esta fuga.
Es interesante observar cómo un tema esencialmente policiaco y de seguridad pública, como es mantener a un preso en la cárcel, aunque sea el más peligroso, de inmediato se politizó cuando la terca realidad obligó Miguel Osorio Chong, secretario de Gobernación, a regresar de Paris a México y cuando llegó el asunto ya no era solo de seguridad pública había escalado a una amenaza a la Seguridad Nacional y contenía además el coraje, frustración y enojo del Gobierno de los Estados Unidos que de inmediato ofreció su colaboración para la pronta captura del delincuente, otra vez, más buscado en el mundo.
El tema de la fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, además de la cloaca de corrupción que abrió, se convirtió rápidamente en un asunto mediático que circuló en todo tipo de medios en el mundo, incluyendo las redes sociales en donde la actual opinión pública, que opera sin intermediarios, expresó con burlas, chistes, y “memes” sus puntos de vista que, en la mayoría de los casos, coincidió en el concepto de ineptitud del gobierno de Peña Nieto y la corrupción que envenena a gran parte de los grupos que se disputan el poder en México.
El gobierno reaccionó en su defensa abriendo la información sobre la fuga e invitando a importantes medios de comunicación a conocer la celda y el túnel por el que supuestamente se dio la evasión. La intención ha sido solo una, acreditar que todo lo hecho y previsto en el penal de alta seguridad de El Altiplano está bien, pero lo sucedido era totalmente imprevisible.
El Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, en entrevista con la periodista de Televisa, Adela Micha, comentó que “todos los escenarios de evasión presupuestados por la autoridad en el penal de máxima seguridad El Altiplano fueron superados por Joaquín El Chapo Guzmán. Era imprevisible una fuga de este tipo”.
Ante pregunta de Adela Micha “¿qué falló?” Rubido García responde que, “hasta el momento, no ha detectado algún descuido u omisión en los protocolos de seguridad que haya dado pie a la escapatoria del líder del cártel del Pacífico y admite, sí, es de fantasía”. No descartó que quienes planearon la fuga tuvieron acceso a los planos del penal: “Es otra de las líneas de investigación, este penal data del año 91, y los planos de los penales 1, 2 y 3 son muy similares.”
Al igual que su jefe, el secretario de Gobernación, Monte Alejandro Rubido no va a renunciar porque, dice, su deber es enfrentar la crisis. Se reunió con titulares y representantes de las secretarías de Seguridad Pública de las 32 entidades federativas para lograr la reaprehensión de Joaquín Guzmán Loera.
La segunda fuga del Chapo Guzmán fue el tema más comentado en medios nacionales y extranjeros. El gobierno de Estados Unidos lo colocó una vez más en sus listas de delincuentes más buscados. La Agencia Antidrogas (DEA), emitió un documento en el que se menciona que autoridades de los estados de Arizona, Texas, California y Nueva York tienen causas penales abiertas en su contra. Esta alerta se suma a la emitida por autoridades mexicanas para que Interpol lo rastree en más de 190 países.
La sabiduría popular se expresa con enorme certeza “De buenas intenciones está empedrado el camino al infierno”. La experiencia previa del Estado indica que tuvieron que pasar 13 años para que lograrán capturar a E Chapo Guzmán después de su fuga del Penal de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco.
En algunos medios, cuando se llevó a cabo la captura en 2014, se dijo que el dato para que se lograra la captura había llegado desde los Estados Unidos y que en el operativo participaron elementos de las fuerzas de seguridad de ese país.
Es relevante el dato porque el panorama indica que el coraje e indignación de las autoridades norteamericanas en este caso, podría ser un factor importante para que se regrese al Chapo a prisión, pero si lo capturan los policías de Estados Unidos, es probable que lo trasladen directamente a alguna prisión de ese país, porque la confianza en el gobierno mexicano está rota en materia de seguridad. Esa si sería una verdadera vergüenza.
¿Usted que opina?, lo capturan antes o después del sexenio o, si lo capturan los americanos lo dejan o se lo llevan. Hagan sus apuestas.
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