contra la supervia poniente
Apoyo cultural al plantón de la Malinche contra la Supervía Poniente
x Carolina S. Romero La alerta de desalajo sigue vigente.
La Caravana Cultural Informativa estaba en las calles de la Delegación Magdalena Contreras el domingo 31 de octubre para hacer su tercer acto cultural y brigadeo contra la Supervía Poniente de cuota en medio de una alerta sobre el desalojo del plantón en la Colonia la Malinche.
Durante unas siete horas, payasos y criaturas aladas repartieron volantes a la gente que pasaba por la Avenida Luis Cabrera en coches, peseros y camiones, mientras otros compañeros y compañeras pararon el tráfico durante breves intervalos con mantas que decían “No a la Supervía”, “Apoyo total al plantón permanente en la Malinche contra la supervía de cuota” y “Queremos que nuestros niños respiren aire limpio”.
A pesar de la tensión, el ambiente fue animado gracias a la música en vivo de varias bandas y el teatro del Ollin Compani. Muchos de los músicos viven en la Magadalena, incluso el grupo Cerrrito de Yamel que abrió con un buen son jarocho, zapateo y baile de la Iguana. Luego tocaron dos grupos de punk de alta energía, Los de Lidia y Erratas, seguidos por los sonidos movidos de Copal.
El día anterior 20 camiones y 30 camionetas de granaderos habían llegado a la 1 de la mañana para desalojar el plantón, acompañado por Televisa y Televisión Azteca, medios que nunca han dado cobertura a las protestas contra la Supervía.
La llegada de los granaderos no fue una sorpresa. El Frente Amplio ya había recibido información “que el Jefe de Gobierno ante la urgencia de entregar a las concesionarias OHL y COPRI el polígono de la Malinche expropiado, ha decidido que en este puente del 30 de octubre al 2 de noviembre, usará de nuevo la fuerza pública para reprimir por la madrugada a los vecinos que estén de guardia en el Campamento permanente del Frente Amplio”.
Afortunadamente llegó mucha gente para apoyar al plantón y el desalojo no se realizó, aunque existe la preocupación que la represión aún podría realizarse en estos días como se hizo el 19 de octubre cuando 15 personas fueron lesionadas por elementos de la empresa concesionaria apoyados por supuestos funcionarios del DF.
Dijo una representante del Frente: “La alerta es continua. Lo sabemos. Este fin de semana, que es de puente, es crítico. Tenemos que cuidarnos, que difundirlo, que denunciar lo que está sucediendo aquí. Estamos concientizando a todos los vecinos de Contreras en el transporte. Estas dos próximas noches también son de riesgo porque los granaderos todavía quieren amedrentarnos, llegando en la noche al plantón, por eso hace falta su apoyo”.
Consigna: “¡La Malinche vive! ¡La lucha sigue!”
En lugar de amedrentarse el 19 de octubre, el Frente organizó una marcha de antorchas asistida por 1100 personas, asegura el compañero Rafael Estévez, aunque los medios reportaron menos de la mitad de esta cantidad de gente. El Frente se había formado en septiembre del 2008 en defensa del medioambiente después de que individuos y grupos habían empezado a pedir información sobre el proyecto de la Supervía y manifestar su inconformidad a principios del año.
Al caminar hacia la “zona cero” por las calles donde su familia ha vivido durante generaciones, se observan muchos letreros en las paredes en contra de la Supervía. Rafael explica que la comunidad entera no se opone a la obra, que hay diferencias de opinión, pero que hay cada vez más gente dispuesta a defender su territorio. Aunque las expropiaciones iniciales se limitan a unas 126 familias, miles de personas en la delegación podrían ser despojadas.
El plantón de la Malinche consiste en una sencilla cocina y un espacio con sillones y una mesa de trabajo. Aquí los integrantes del Frente se reúnen, trabajan en proyectos comunes, comen y duermen—en turnos. El plantón se instaló el 26 de julio del 2010 después de que la empresa contratada por el gobierno del DF introdujo maquinaria pesada para llevar a cabo la demolición de las casas expropiadas el 6 de abril. Al caminar por la “zona cero”, Rafa dice: “No, no es Irak aunque lo parezca”. Y sí, lo parece porque aún antes de la introducción de la maquinaria pesada, los trabajadores habían usado mazos para empezar la demolición, dejando las paredes con enormes hoyos y los terrenos llenos de escombros.
Los compañeros explicaron que “cuando empezaron a querer derrumbar las casas abandonadas y expropiadas, no había las condiciones. Son barrancas. El movimiento se cimbraba. Las otras casas que estaban aledañas que todavía están habitadas, corrían riesgo. No nos estaba dando la cara el gobierno. Metieron maquinaria. Empezaron a derrumbar casas. No tenían un dictamen técnico. Por eso pusimos el plantón como medida de protesta para exigir al gobierno que nos muestren los estudios, pero no sólo esto, que se pongan a debate en una cuestión de otras alternativas”.
Entrevistado, un vecino dijo: “Tengo más de 40 años aquí en la Magdalena y hemos vivido la problemática del crecimiento de la ciudad. Muchos llegamos de la provincia porque ahí no hay oportunidades. Recuerdo cuando se sembraba aquí, cuando había magueyes, cuando se elaboraba el pulque. Era una provincia en el Distrito Federal…El proyecto de la Supervía viene a acabar con lo que nosotros construimos con nuestras manos, con nuestra lucha, con nuestro sudor. Aquí ha habido proyecto tras proyecto desde la época de los priistas. Pero dimos la lucha y se cancelaron... Luego los gobiernos perredistas empezaron a lanzar proyectos como el segundo piso de Lopez Obrador, siempre dando prioridad a las minorías que tienen mucho dinero y no a las mayorías. El actual gobierno de Marcel Ebrard da más pauta al neoliberalismo y sobre todo en la zona surponiente, que es una zona de gran vegetación….Su gobierno no tiene nada de izquierdista. En la Magdalena Contreras no ha habido represión desde hace muchos años pero hoy tenemos un gobierno completamente represor”.
En el transcurso de la tarde, varias personas hacen uso del micrófono para denunciar el daño al medioambiente y el despojo a la gente.
“Estamos aquí para parar la Supervía y estamos totalmente en contra del destrozo del río de Los Dinamos donde están cortando árboles y entubando el río para abastecer a todos estos multinacionales. Estamos atentos para defender al plantón de la Malinche. No pasarán”.
“El megaproyecto está combinado con otros proyectos comerciales—como todos los Wal Mart que quieren hacer ¿Saben por qué? Porque el hermano de Marcelo Ebrard es gerente de los Wal Mart de aquí de México. Todos los partidos son iguales de traidores y de vendepatrias –lo único que les interesa es el hueso, porque con el hueso pueden roer, pueden traficar influencias y se vuelven inmensamente ricos.”
Se denunció que Marcelo Ebrard es presidente del Consejo Mundial de Alcaldes sobre el Cambio Climático que se realizará su Cumbre Mundial el 21 de noviembre en la Ciudad de México. “¨Pero él está al lado de los super ricos los que están acabando con el mundo. Mientras en otros países se está diciendo que reduzcamos el consumo de automóviles, aquí se está imponiendo la Supervía Poniente, en que va a haber más de 34,000 automóviles al día, el cual causará daños irreversibles, acabando con miles de árboles, trayendo como consecuencia un aumento en el calentamiento global”.
Consigna: “Se ve, se nota, Marcelo es un idiota”.
En el brigadeo, se reparte y se lee en voz alta el “Decálogo del buen jefe de gobierno y funcionario público”:
1. Amarás la voluntad popular sobre todas las cosas.
2. No jurarás promesas de campaña en vano.
3. Santificarás los pueblos originarios, los usos, costumbres y tradiciones de sus habitantes.
4. Honrarás al pueblo soberano y a la naturaleza.
5. No matarás a los árboles, a los animales ni a las comunidades.
6. No violarás los derechos humanos del pueblo.
7. No robarás.
8. No levantarás falso testimonio ni mentirás.
9. No desearás la tierra de tu prójimo.
10. No codiciarás los territorios y el patrimonio de tu prójimo.
La compañera Deyanira del Frente Amplio explica: “Cuando se dio a conocer el proyecto de la Supervía en el 2008, lo primero que se hacía era pedir información porque se hablaba de la obra pero el gobierno no decía claro ni por dónde ni dónde ni cómo se trataba. Se supone que cuando se decreta una obra, el gobierno debería dar una manifestación de impacto ambiental. Sin embargo en diciembre del 2009, se hizo el decreto de necesidad pública de la obra y la manifestación de impacto ambiental apenas apareció en julio del 2010”.
La compañera afirma que aunque el gobierno dice que el impacto es mínimo, el Frente cuenta con información proporcionada por científicos, técnicos, biólogos y abogados que demuestran que el impacto es muy amplio y muy grave. Dicen que “la Ciudad de México por sí sola, por el grado de emisiones de dióxido de carbono, contribuye al 1% del calentamiento global. La Supervía Poniente es una obra privada que impulsa el automóvil y por lo tanto las emisiones de dióxido de carbono en esta ciudad que está colapsando. También los especialistas nos dicen que las áreas naturales protegidas donde cruzaría esta obra, que son partes de la Sierra de las Cruces, reunamos el 60% de la Cuenca del Valle de México. Entonces si hay hundimientos evidentes en líneas del metro, la misma Ciudad de México se está hundiendo y estamos viviendo un colapso, esta obra implica un colapso mayor ¿no?, menos agua, más contaminación…Según el gobierno, van a derribar 70,000 árboles ya grandes, nativos de la zona que por su edad purifican bastante el aire…”
“Estamos diciendo que este daño es para toda la Ciudad de México, y si lo vemos globalmente, el calentamiento global es un gran colapso para el mundo ¿no? El gobierno nunca dio información. Nunca dio la cara para decir cómo estaba pensando hacer esta obra. Lo presentan como una solución al problema de tráfico en el sur de la ciudad. Nunca hubo una audiencia pública para escuchar de otras opciones que no fueran privadas, que no contaminaran y que pudieran fomentar el transporte público”.
“La manifestación de impacto ambiental salió después del decreto de necesidad, después de las expropiaciones. Ni siquiera tienen los verdaderos ni científicamente comprobados análisis de impacto ambiental de esta obra, ni siquiera los estudios de mecánica de suelo que son básicos”.
“Desde el principio, nosotros decimos: Esta obra no es necesaria. Es falsa. Es sólo para Santa Fe para una clase privilegiada, entonces nuestra postura es un rechazo total”.
El Frente Amplio denunciará la obra de la Supervía Poniente en el Foro sobre el Cambio Climático en Cancún y que también se manifestará su oposición durante el debate sobre el calentamiento global en la Ciudad de México del 16 al 20 de noviembre y en la marcha ambiental el 30 de noviembre.
Mientras tanto, la alerta actual sigue y varios compañeros de la Caravana Cultural Informativa permanecen en el plantón de la Malinche.
las fotos estan en
http://www.lahaine.org/index.php?p=49045
