Sigo sin entender porque se mete la iglesia en estos asuntos,¿acaso quieren quedar bien ante la sociedad? porque no le veo otra explicación en fin les dejo la info
La Arquidiócesis Primada de México afirma que la tragedia provocada por el huracán Álex tiene rostro de corrupción. A través de la editorial del Semanario desde la Fe, órgano de difusión de este organismo, la iglesia católica mexicana denuncia que existen graves responsabilidades gubernamentales que aumentan las consecuencias de los fenómenos naturales ocurridos en Nuevo León, Tamaulipas y Chihuahua.
Sostiene que, por un lado, existen acciones deliberadas que provocan asentamientos humanos irregulares debido a la corrupción de autoridades locales y federales que permiten se violen las leyes y normas establecidas de vivienda, lo que ha costado la vidas humanas. Por otro lado, se permite la construcción de infraestructura deficiente por la que se pagan cantidades millonarias.
Expresa que detrás de estos desastres naturales hay negligencia y acciones deliberadas que “constituyen verdaderos delitos”. Abundó que la impunidad sólo propiciará que México sea un país subdesarrollado debido a los malos manejos que algunos que algunos gobernantes hacen de los presupuesto hacen de los presupuestos públicos y los fraudes de muchas compañías privadas que generan grandes negocios vendiendo pésimas instalaciones.
Por otro lado, la Arquidiócesis señaló que imprudencia, la ignorancia y la pobreza de quienes construyen sus viviendas en zonas de riesgo, a las orillas de ríos o en el fondo de las barrancas ha coadyuvado a la potencialización de los desastres; “todo ello ante la indiferencia culposa de las autoridades”.
La Iglesia católica abundó que también existe en todo el territorio nacional un desorden urbano el cual propicia la dispersión de la población, sin ningún plan regulador para el crecimiento de las ciudades y “nuevamente ante la ausencia de la autoridad”.
Externó que el mayor desastre urbano se centra en la Zona Metropolitana del Valle de México y se ha repetido en distintas ciudades del país, por lo que las urbes que otrora tuvieran cierta planeación “hoy son manchas de asfalto y concreto, sin belleza ni concierto”, lo que a decir de esta institución religiosa genera un enorme deterioro ecológico, dando como resultado zonas de altísimo riesgo y una pésima calidad de vida para todos.
Por ello, exigió a los funcionarios a las autoridades actuales y a las administraciones recientes, “dar cuenta de su propia responsabilidad y exigir la acción de la justicia”.
FUENTE
La Arquidiócesis Primada de México afirma que la tragedia provocada por el huracán Álex tiene rostro de corrupción. A través de la editorial del Semanario desde la Fe, órgano de difusión de este organismo, la iglesia católica mexicana denuncia que existen graves responsabilidades gubernamentales que aumentan las consecuencias de los fenómenos naturales ocurridos en Nuevo León, Tamaulipas y Chihuahua.
Sostiene que, por un lado, existen acciones deliberadas que provocan asentamientos humanos irregulares debido a la corrupción de autoridades locales y federales que permiten se violen las leyes y normas establecidas de vivienda, lo que ha costado la vidas humanas. Por otro lado, se permite la construcción de infraestructura deficiente por la que se pagan cantidades millonarias.
Expresa que detrás de estos desastres naturales hay negligencia y acciones deliberadas que “constituyen verdaderos delitos”. Abundó que la impunidad sólo propiciará que México sea un país subdesarrollado debido a los malos manejos que algunos que algunos gobernantes hacen de los presupuesto hacen de los presupuestos públicos y los fraudes de muchas compañías privadas que generan grandes negocios vendiendo pésimas instalaciones.
Por otro lado, la Arquidiócesis señaló que imprudencia, la ignorancia y la pobreza de quienes construyen sus viviendas en zonas de riesgo, a las orillas de ríos o en el fondo de las barrancas ha coadyuvado a la potencialización de los desastres; “todo ello ante la indiferencia culposa de las autoridades”.
La Iglesia católica abundó que también existe en todo el territorio nacional un desorden urbano el cual propicia la dispersión de la población, sin ningún plan regulador para el crecimiento de las ciudades y “nuevamente ante la ausencia de la autoridad”.
Externó que el mayor desastre urbano se centra en la Zona Metropolitana del Valle de México y se ha repetido en distintas ciudades del país, por lo que las urbes que otrora tuvieran cierta planeación “hoy son manchas de asfalto y concreto, sin belleza ni concierto”, lo que a decir de esta institución religiosa genera un enorme deterioro ecológico, dando como resultado zonas de altísimo riesgo y una pésima calidad de vida para todos.
Por ello, exigió a los funcionarios a las autoridades actuales y a las administraciones recientes, “dar cuenta de su propia responsabilidad y exigir la acción de la justicia”.
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