Crecieron en una casa avaluada en $1.5 millones en Barrington Hills, de su padre un abogado.
Fuente: abcnews/chicagotribune.com
Sus dos hijos ahora adultos han pasado los últimos dos años demandando en contra de su progenitora, Kimberly Garrity de 55 años, por “mala madre” y resarcir su mala conducta hacia ellos por daños y perjuicios, supuestamente causados por no comprar juguetes para uno y enviar una tarjeta de cumpleaños que no le gustaba al otro. El presuntos delito incluye la falta de llevar a su hija a un espectáculo en auto, obligar a su hijo entonces de 7 años de edad, a usar el cinturón de seguridad o que se pondría en contacto con la policía si no lo hace, increpar a su hija por la cantidad de dinero que gastaba en vestidos de fiesta y llamar a su hija a la medianoche para pedirle que regresara a casa, desde donde estaba divirtiéndose en una fiesta. En el 2009, los niños, representados por tres abogados como su padre, Steven A. Miner, demandó a su madre, Kimberly Garrity. Steven II, ahora de 23 años, y su hermana Kathryn, de 20 años, buscaban más de 50.000 dólares por “estrés emocional”.
Miner y Garrity estuvieron casados durante diez años antes de que ella solicitará el divorcio en 1995. Entre las exposiciones presentadas en el caso, está una tarjeta de cumpleaños que Garrity envió a su hijo, que en su demanda solicita daños y perjuicios porque la tarjeta era “inadecuada” y no incluía dinero en efectivo o un cheque. En los documentos del tribunal, el abogado de Garrity, dijo que la “letanía de quejas infantiles y de ingratitud” en la demanda no era más que un intento del ex marido de Garrity, de “buscar la venganza final”. Bruce Ottley, profesor de Derecho en la Universidad DePaul y autor de Derecho de Daños en Illinois, dijo que el tribunal, por primera vez estaba en lo cierto en tirar a la basura esta demanda. Finalmente la Corte de Apelaciones desestimó la demanda presentada por sus hijos, por supuestamente ser una “mala madre”. A pesar del juicio, su madre dijo en la corte, que aún amaba a sus hijos.
Miner y Garrity estuvieron casados durante diez años antes de que ella solicitará el divorcio en 1995. Entre las exposiciones presentadas en el caso, está una tarjeta de cumpleaños que Garrity envió a su hijo, que en su demanda solicita daños y perjuicios porque la tarjeta era “inadecuada” y no incluía dinero en efectivo o un cheque. En los documentos del tribunal, el abogado de Garrity, dijo que la “letanía de quejas infantiles y de ingratitud” en la demanda no era más que un intento del ex marido de Garrity, de “buscar la venganza final”. Bruce Ottley, profesor de Derecho en la Universidad DePaul y autor de Derecho de Daños en Illinois, dijo que el tribunal, por primera vez estaba en lo cierto en tirar a la basura esta demanda. Finalmente la Corte de Apelaciones desestimó la demanda presentada por sus hijos, por supuestamente ser una “mala madre”. A pesar del juicio, su madre dijo en la corte, que aún amaba a sus hijos.