Gato y maullidos personalizados

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os expertos en comportamiento felino están casi unánimemente de acuerdo en que un gato es capaz de emitir alrededor de 70 tipos de maullidos con sus respectivos significados.

El maullido es diferente en función del estado de ánimo, de las circunstancias propias del momento y del entorno, del temperamento del gato y también varía mucho en función de si el maullido va dirigido a otro gato, a un animal de otra especie o a la persona con la que vive.

Los maullidos más fuertes se producen cuando un gato se comunica con otro gato. Los maullidos más suaves acostumbran a ser un saludo o una bienvenida. Los maullidos prolongados, en tono elevado y algo entrecortado son los típicos maullidos de la época de celo. Éstos suelen ser nocturnos y, por tanto, molestos, y la única manera de evitarlos es la esterilización; puesto que si no desaparecerán cuando pase el celo y llegarán de nuevo en el celo siguiente. Una función muy importante del maullido de los gatos es “identificar a la familia”, es decir, una gata que tiene gatitos maúlla de una manera específica para que los gatitos identifiquen ese maullido con su madre y solamente con su madre.

Cuando un gato se comunica con su familia humana sus maullidos son más cortos, menos intensos, a veces casi susurros. Con ellos llaman la atención, piden comida, reclaman mimos, muestran su desacuerdo con alguna cosa o, simplemente, hacen ver que están ahí y que quieren atención.

La convivencia prolongada construye un vínculo fuerte entre gatos y personas, de tal manera que ambos se van conociendo mejor y, por su parte, el gato aprende a adaptar y modular sus maullidos en función de las reacciones que ve que provocan en las personas. Seguramente esta es una de las razones por las que se dice que “los gatos son unos extraordinarios negociadores” y que nadie puede resistirse a ese maullido y a esas caritas que ponen y consiguen que hagamos cualquier cosa por ellos. Y puesto que los maullidos son el lenguaje de los gatos, y que los adaptan a nosotros para que les entendamos, prestémosles mucha atención porque a través de ellos podremos identificar cuando algo no va bien y más rápidamente podremos solucionarlo.

Fuente: elsecretodelosgatosfelices.com
 
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