Bastante interesante esta información que proporciona Jenaro Villamil y que nos invita a estar más atentos a este tipo de situaciones.
Facebook y Wall Street: visos del poder absoluto de la red social
Facebook continúa dando de qué hablar con su reciente salida a la bolsa. A una semana de haber mandado su solicitud a Wall Street y cumplir 8 años, Facebook reveló hoy una serie de datos interesantes tras haber presentado más documentos ante la Comisión del Mercado de Valores (SEC).
Una de las primeras cosas que destaca es que está trabajando en conjunto con Zynga, compañía encargada de desarrollar los juegos de la red social, para ”incrementar” el número de usuarios tanto de la red social, como de los juegos producidos por Zynga.
Si bien, casi el 90% de los ingresos de Facebook provienen de publicidad, el 12% restante es ingresado por los juegos que la desarrolladora de San Francisco provee a Facebook.
Otro dato interesante revelado hoy por los documentos de la SEC es el contrato de Mark Zuckerberg, quien desde 2005 gana medio millón de dólares pero que, a partir de 2013, humildemente se dedicará a cobrar 1 dólar mensual; sin embargo, eso no quita que pueda recibir bonificaciones del 45 % y las ya mencionadas opciones totalitarias sobre acciones de la compañía.
Como habíamos mencionado previamente, el miembro más valioso (al menos en términos económicos) para Facebook es la directora ejecutiva, Sheryl Sandberg, cuyo sueldo de ahora en adelante será de 300 mil dólares.
Entre la información que destaca está que las oficinas centrales de Facebook, ubicadas en Palo Alto, California, pagaron el año pasado una renta de 11 millones de dólares, misma que ascenderá a 22.7 millones en 2025, lo cual indica que la compañía tiene grandes planes a largo plazo, sobre todo si se considera que Zuckerberg espera que su red social recaude 5 mil millones de dólares en su venta inicial de acciones. Éstas empezarán a cotizarse durante el segundo trimestre del año, sin embargo, aún no se ha determinado si será en la Bolsa de Nueva York (NYSE) o en el mercado Nasdaq, donde se encuentran algunas de las principales empresas tecnológicas del mundo.
La letra pequeña del contrato
Si bien, lo anterior pareciera información meramente financiera, existen ciertos datos que se pueden leer en el entre líneas de toda esta documentación. En su artículo titulado Las reglas del juego según Facebook publicado en el sitio alt1040, Ángel Buendía destaca que lo importante del contrato entre Facebook y Zynga no es sólo la relación económica entre estos dos, sino que saca a relucir ”los poderes esencialmente absolutos que Facebook se concede sobre nuestras cuentas e información”. Entre éstos, Buendía destaca:
Los perfiles privados no serán usados para el beneficio comercial de la compañía.
No se enviará ningún tipo de información comercial no autorizada por el usuario, ”como por ejemplo spam”.
Si se desactiva una cuenta, no será posible crear otra sin la autorización de Facebook.
Facebook tiene el derecho de remover o reclamar el nombre de usuario que se elija si la compañía lo creemos apropiado.
Si se cambia o desactiva el número de teléfono móvil, Facebook actualizará esta información en un lapso de 48 horas o menos.
Al subir contenido con derechos de propiedad intelectual, como fotos o video el usuario le otorgará a Facebook un permiso que, según su configuración de privacidad y aplicaciones, le otorga a la red social una “licencia no-exclusiva, transferible, sub-licensiable, libre de regalías y mundial para usar cualquier contenido (…) que postee en o en conexión con Facebook”. A esto se le denomina Licencia PI y termina al momento de ser borrados el contenido PI o la cuenta; sin embargo, si el contenido ha sido compartido con otros, y éstos no lo han borrado, seguirá siendo propiedad de Facebook.
Si bien, como menciona Buendía, el contenido siempre es propiedad del usuario, llama la atención el poder absoluto con el que se hace Facebook con estos contenidos. Otro punto interesante que el autor destaca es que estas medidas nunca han sido secretas y que todos hemos accedido a ellas sin chistar.
Es muy importante que el usuario ponga atención a estos denominados contenidos PI por dos razones: en primer lugar, al cotizar en la bolsa y tener derechos sobre nuestros contenidos, Facebook podría llegar a hacer uso de ellos (cosa que resulta difícil, particularmente por la primera cláusula en la que dicen que no se beneficiarán comercialemente de los perfiles); pero sobre todo, en estos tiempos en los que la censura está al máximo en Internet y todos los sitios han comenzado a ceder ante los reclamos de industrias y países, Facebook tiene el poder absoluto de bajarnos o quitarnos algún contenido sin –a diferencia de sitios como Twitter– pedir nuestra previa autorización.
Aunque moderado y discreto, es un hecho que el poder de Facebook y Mark Zuckerberg se hace cada vez más absoluto. Esperemos que éstos no acaben por desbordarse, por lo mismo, nosotros como usuarios debemos poner mayor atención y cuidado a la información que compartimos y a nuestros propios perfiles.
Facebook y Wall Street: visos del poder absoluto de la red social
Facebook continúa dando de qué hablar con su reciente salida a la bolsa. A una semana de haber mandado su solicitud a Wall Street y cumplir 8 años, Facebook reveló hoy una serie de datos interesantes tras haber presentado más documentos ante la Comisión del Mercado de Valores (SEC).
Una de las primeras cosas que destaca es que está trabajando en conjunto con Zynga, compañía encargada de desarrollar los juegos de la red social, para ”incrementar” el número de usuarios tanto de la red social, como de los juegos producidos por Zynga.
Si bien, casi el 90% de los ingresos de Facebook provienen de publicidad, el 12% restante es ingresado por los juegos que la desarrolladora de San Francisco provee a Facebook.
Otro dato interesante revelado hoy por los documentos de la SEC es el contrato de Mark Zuckerberg, quien desde 2005 gana medio millón de dólares pero que, a partir de 2013, humildemente se dedicará a cobrar 1 dólar mensual; sin embargo, eso no quita que pueda recibir bonificaciones del 45 % y las ya mencionadas opciones totalitarias sobre acciones de la compañía.
Como habíamos mencionado previamente, el miembro más valioso (al menos en términos económicos) para Facebook es la directora ejecutiva, Sheryl Sandberg, cuyo sueldo de ahora en adelante será de 300 mil dólares.
Entre la información que destaca está que las oficinas centrales de Facebook, ubicadas en Palo Alto, California, pagaron el año pasado una renta de 11 millones de dólares, misma que ascenderá a 22.7 millones en 2025, lo cual indica que la compañía tiene grandes planes a largo plazo, sobre todo si se considera que Zuckerberg espera que su red social recaude 5 mil millones de dólares en su venta inicial de acciones. Éstas empezarán a cotizarse durante el segundo trimestre del año, sin embargo, aún no se ha determinado si será en la Bolsa de Nueva York (NYSE) o en el mercado Nasdaq, donde se encuentran algunas de las principales empresas tecnológicas del mundo.
La letra pequeña del contrato
Si bien, lo anterior pareciera información meramente financiera, existen ciertos datos que se pueden leer en el entre líneas de toda esta documentación. En su artículo titulado Las reglas del juego según Facebook publicado en el sitio alt1040, Ángel Buendía destaca que lo importante del contrato entre Facebook y Zynga no es sólo la relación económica entre estos dos, sino que saca a relucir ”los poderes esencialmente absolutos que Facebook se concede sobre nuestras cuentas e información”. Entre éstos, Buendía destaca:
Los perfiles privados no serán usados para el beneficio comercial de la compañía.
No se enviará ningún tipo de información comercial no autorizada por el usuario, ”como por ejemplo spam”.
Si se desactiva una cuenta, no será posible crear otra sin la autorización de Facebook.
Facebook tiene el derecho de remover o reclamar el nombre de usuario que se elija si la compañía lo creemos apropiado.
Si se cambia o desactiva el número de teléfono móvil, Facebook actualizará esta información en un lapso de 48 horas o menos.
Al subir contenido con derechos de propiedad intelectual, como fotos o video el usuario le otorgará a Facebook un permiso que, según su configuración de privacidad y aplicaciones, le otorga a la red social una “licencia no-exclusiva, transferible, sub-licensiable, libre de regalías y mundial para usar cualquier contenido (…) que postee en o en conexión con Facebook”. A esto se le denomina Licencia PI y termina al momento de ser borrados el contenido PI o la cuenta; sin embargo, si el contenido ha sido compartido con otros, y éstos no lo han borrado, seguirá siendo propiedad de Facebook.
Si bien, como menciona Buendía, el contenido siempre es propiedad del usuario, llama la atención el poder absoluto con el que se hace Facebook con estos contenidos. Otro punto interesante que el autor destaca es que estas medidas nunca han sido secretas y que todos hemos accedido a ellas sin chistar.
Es muy importante que el usuario ponga atención a estos denominados contenidos PI por dos razones: en primer lugar, al cotizar en la bolsa y tener derechos sobre nuestros contenidos, Facebook podría llegar a hacer uso de ellos (cosa que resulta difícil, particularmente por la primera cláusula en la que dicen que no se beneficiarán comercialemente de los perfiles); pero sobre todo, en estos tiempos en los que la censura está al máximo en Internet y todos los sitios han comenzado a ceder ante los reclamos de industrias y países, Facebook tiene el poder absoluto de bajarnos o quitarnos algún contenido sin –a diferencia de sitios como Twitter– pedir nuestra previa autorización.
Aunque moderado y discreto, es un hecho que el poder de Facebook y Mark Zuckerberg se hace cada vez más absoluto. Esperemos que éstos no acaben por desbordarse, por lo mismo, nosotros como usuarios debemos poner mayor atención y cuidado a la información que compartimos y a nuestros propios perfiles.
