El Mimo de la carretera.
Buenas noches.
La historia es la siguiente, ya anteriormente había subido historias de taxistas, como no pude agregar esta historia la pongo aparte. pero relataré la historia.
Hace como mes y medio tuve que ir a Walmart Toltecas, ahí está el módulo del INE, que se encuentra en Avenida Hidalgo Colonia Industrial Tlaxcopan, ya que el módulo del INE de Viveros de Asís, que era el que me quedaba más cerca de la casa de ustedes, lo cerraron, de modo que tuve que ir a recoger la identificación a ese sitio.
Cuando salí hay un sitio de taxis, le pregunte al chofer voy por la Vicky Form de Tlalnepantla, ah. Si le cobro 60 pesos.
Le conté del caso del taxista de Veracruz y este señor me comento su historia:
Me dijo ahora soy taxista, pero hace unos años trabaje como trailero llevando cargas en toda la República. Esto me sucedió cuando trabaje en Nuevo León, me mandaron por una carga ya en la madrugada, la localidad se llama Matehuala; de modo que revise mi camión, subieron la mercancía y me embarque a dejar mi cargamento.
Me subí a mi tráiler y luego de encomendarme a Dios inicié mi trayecto, paso un rato y venia escuchando la radio, pero atento a la radio de banda civil, luego de un rato, al pasar una curva, vi algo que se movía a mitad de la carretera.
Conforme me acerque a eso pudo distinguirlo bien. En medio de la carretera estaba una persona.
Pensé que está haciendo una persona a mitad de la carretera a las tres de la mañana.
Me dijo muy serio el taxista. Cuando lo vi bien dije ah caray, pero si es un Mimo.
¿Qué rayos hace un mimo en medio del camino a esta hora de la madrugada? Si fuera de día pensaría está haciendo su rutina por unas monedas para ganarse la vida, pero a esta hora de la madrugada, no tiene sentido. Y como ese estúpido, seguía en el camino y no se movió de ese sitio, tuve que dar un giro brusco del volante para no atropellarlo.
Cuando lo esquive, pensé ay Dios seguro que me quede dormido y lo imaginé. En eso estaba cuando por mi espejo retrovisor vi que venía otro tráiler detrás del mío y pude constatar que el otro chofer también vio aquel sujeto, ya que tuvo que hacer lo mismo que yo, dar un giro brusco para no atropellar a ese pelmazo que seguía parado a mitad de la carretera.
Luego de ver aquello me di cuenta no estaba soñando; porque a veces a los camioneros nos gana el sueño y estando manejando nos quedamos dormidos y es peligroso, pues podemos tener un accidente. pero efectivamente estaba despierto, no entendí por qué estaba ese sujeto ahí a esa hora.
No quise pensar más en lo que había visto y seguí el viaje, pues debía entregar mi carga sin demora, luego de eso podría estacionar en algún restaurante para dormir y a la mañana siguiente desayunar y seguir con mi trabajo.
Maneje un rato no recuerdo si fueron 30 o 45 minutos. En eso estaba cuando vi que había un accidente adelante.
Nosotros los traileros somos muy solidarios, ya sea con compañeros; a veces tenemos problemas mecánicos, o en accidentes nos detenemos para ayudar en lo que podamos.
Busque un sitio adecuado para detener el tráiler, para que no hubiera otro percance. Bajé del tráiler y me dispuse a auxiliar a las personas era un automóvil particular parece que su coche tuvo un problema mecánico.
En esa época del año hacía frío de madrugada. Recordé que traía unas mantas de más, así como café y algo de comida que traía, regresé al tráiler por eso para obsequiárselos y de esa forma ayudarlos.
Total, que les di las mantas, el café y comieron algo, estaba platicando con estas personas. Cuando de pronto sentí que alguien me estaba viendo; esa sensación que a veces tiene uno. En eso volteo a ver hacia donde sentí la mirada.
Por Dios santo, sentí como un miedo como jamás lo había sentido nunca. Ahí sentado sobre una roca estaba el mismo, con perdón de la palabra el mismo desgraciado hijo de la fregada. Si el Mimo, pero lo que más me asusto fue su mirada. Una sonrisa infernal.
En ese instante sentí como el miedo me recorrió desde la cabeza los pies, sentí como mis cabellos se me erizaron. Jamás en toda mi vida había sentido algo así y nunca más lo he sentido.
No puede ser, mientras temblaba del susto. ¿Cómo es que estaba ahí sentado sobre esa roca, si lo vi hace, como 45 minutos y avancé muchos kilómetros?, desde que lo vi parado a mitad de la carretera. Reflexione es que no puede ser posible.
No sé qué fue lo que vi esa noche, nunca supe que fue ese Mimo, ¿era un fantasma, un alma en pena, sería el Diablo?
Termino su historia y cuando vi ya habíamos llegado, le pagué el viaje y le agradecí su relato.
Por mi parte me quedé meditando lo que me dijo luego de reflexionar caí en cuenta la hora en que vio al Mimo la primera vez las tres de la mañana.
Bueno eso es todo ojalá les haya gustado este relato saludos.
Buenas noches.
La historia es la siguiente, ya anteriormente había subido historias de taxistas, como no pude agregar esta historia la pongo aparte. pero relataré la historia.
Hace como mes y medio tuve que ir a Walmart Toltecas, ahí está el módulo del INE, que se encuentra en Avenida Hidalgo Colonia Industrial Tlaxcopan, ya que el módulo del INE de Viveros de Asís, que era el que me quedaba más cerca de la casa de ustedes, lo cerraron, de modo que tuve que ir a recoger la identificación a ese sitio.
Cuando salí hay un sitio de taxis, le pregunte al chofer voy por la Vicky Form de Tlalnepantla, ah. Si le cobro 60 pesos.
Le conté del caso del taxista de Veracruz y este señor me comento su historia:
Me dijo ahora soy taxista, pero hace unos años trabaje como trailero llevando cargas en toda la República. Esto me sucedió cuando trabaje en Nuevo León, me mandaron por una carga ya en la madrugada, la localidad se llama Matehuala; de modo que revise mi camión, subieron la mercancía y me embarque a dejar mi cargamento.
Me subí a mi tráiler y luego de encomendarme a Dios inicié mi trayecto, paso un rato y venia escuchando la radio, pero atento a la radio de banda civil, luego de un rato, al pasar una curva, vi algo que se movía a mitad de la carretera.
Conforme me acerque a eso pudo distinguirlo bien. En medio de la carretera estaba una persona.
Pensé que está haciendo una persona a mitad de la carretera a las tres de la mañana.
Me dijo muy serio el taxista. Cuando lo vi bien dije ah caray, pero si es un Mimo.
¿Qué rayos hace un mimo en medio del camino a esta hora de la madrugada? Si fuera de día pensaría está haciendo su rutina por unas monedas para ganarse la vida, pero a esta hora de la madrugada, no tiene sentido. Y como ese estúpido, seguía en el camino y no se movió de ese sitio, tuve que dar un giro brusco del volante para no atropellarlo.
Cuando lo esquive, pensé ay Dios seguro que me quede dormido y lo imaginé. En eso estaba cuando por mi espejo retrovisor vi que venía otro tráiler detrás del mío y pude constatar que el otro chofer también vio aquel sujeto, ya que tuvo que hacer lo mismo que yo, dar un giro brusco para no atropellar a ese pelmazo que seguía parado a mitad de la carretera.
Luego de ver aquello me di cuenta no estaba soñando; porque a veces a los camioneros nos gana el sueño y estando manejando nos quedamos dormidos y es peligroso, pues podemos tener un accidente. pero efectivamente estaba despierto, no entendí por qué estaba ese sujeto ahí a esa hora.
No quise pensar más en lo que había visto y seguí el viaje, pues debía entregar mi carga sin demora, luego de eso podría estacionar en algún restaurante para dormir y a la mañana siguiente desayunar y seguir con mi trabajo.
Maneje un rato no recuerdo si fueron 30 o 45 minutos. En eso estaba cuando vi que había un accidente adelante.
Nosotros los traileros somos muy solidarios, ya sea con compañeros; a veces tenemos problemas mecánicos, o en accidentes nos detenemos para ayudar en lo que podamos.
Busque un sitio adecuado para detener el tráiler, para que no hubiera otro percance. Bajé del tráiler y me dispuse a auxiliar a las personas era un automóvil particular parece que su coche tuvo un problema mecánico.
En esa época del año hacía frío de madrugada. Recordé que traía unas mantas de más, así como café y algo de comida que traía, regresé al tráiler por eso para obsequiárselos y de esa forma ayudarlos.
Total, que les di las mantas, el café y comieron algo, estaba platicando con estas personas. Cuando de pronto sentí que alguien me estaba viendo; esa sensación que a veces tiene uno. En eso volteo a ver hacia donde sentí la mirada.
Por Dios santo, sentí como un miedo como jamás lo había sentido nunca. Ahí sentado sobre una roca estaba el mismo, con perdón de la palabra el mismo desgraciado hijo de la fregada. Si el Mimo, pero lo que más me asusto fue su mirada. Una sonrisa infernal.
En ese instante sentí como el miedo me recorrió desde la cabeza los pies, sentí como mis cabellos se me erizaron. Jamás en toda mi vida había sentido algo así y nunca más lo he sentido.
No puede ser, mientras temblaba del susto. ¿Cómo es que estaba ahí sentado sobre esa roca, si lo vi hace, como 45 minutos y avancé muchos kilómetros?, desde que lo vi parado a mitad de la carretera. Reflexione es que no puede ser posible.
No sé qué fue lo que vi esa noche, nunca supe que fue ese Mimo, ¿era un fantasma, un alma en pena, sería el Diablo?
Termino su historia y cuando vi ya habíamos llegado, le pagué el viaje y le agradecí su relato.
Por mi parte me quedé meditando lo que me dijo luego de reflexionar caí en cuenta la hora en que vio al Mimo la primera vez las tres de la mañana.
Bueno eso es todo ojalá les haya gustado este relato saludos.
