Del primer respiro de Luis Ricardo

rick_torr

Bovino Milenario
#1
Documento escrito por mi buen amigo Antonio Andrade al cual agradezco el estar al pendiente en todo el proceso de ese nuevo bb en mi vida,

Una mirada a nuestra realidad

Del primer respiro de Luis Ricardo


A veces me imagino que el primer respiro de un ser humano debería tener sabor de esperanza, de gozo por la vida y sobre todo de ganas y no dudo que quizá así sepa esa primera bocanada, desafortunadamente nuestra conciencia aún no se encuentra desarrollada y resulta difícil decir si en verdad ese es su sabor.

El pasado tres de octubre, Luis Ricardo dio su primer respiro, me hubiera gustado poderle contar que vino a un mundo sin distinciones de clase, sin corrupción, sin problemas monetarios y que las guerras eran solo un invento de locuaces escritores como Asimov, Lovecraft y Bradbury, que nadie era perseguido por hablar de la verdad pues nunca había nada que ocultar, que aquí solo se pierde la vida por decisión o errata propia y que nadie jamás había pensado en hacerse de nada que no le perteneciera.

Me hubiera gustado contarle en estas líneas que Ricardo y Barbra –sus padres- nunca se preocuparían por su tranquilidad y su seguridad, que el nunca estaría expuesto, al crecer, a un sin fin de malintencionados vendedores de sustancias, que habría siempre algún uniformado dispuesto a auxiliarlo en caso de así necesitarlo y que podría confiar por completo –y a su debido tiempo- en cualquier personaje de corbata y papelitos en mano que dijera estar a cargo del pueblo.

Desafortunadamente no puedo hablar de estas cosas y de muchísimas más que como a mi en esta nota, a tantos otros, se nos cuecen las habas por ver realizadas, porque día con día llegan al mundo nuevas personas que sin deberla ni temerla, ya han sido condenadas a aguantar las carbonadas y los desvaríos de un gremiecito inservible –al menos en lo tocante a sociedad y nación- que se enfoca únicamente a enriquecerse y a escupir promesas que ni siquiera han pensado en cumplir.

Para prueba un botón –o mejor decido varios-, porque no conformes con habernos arrastrado al fin, a uno de los tantos extremos conocidos de la pobreza, nos han anunciado que debemos apretarnos todavía más el cinturón y soportar el largo listado de aumentos que están por imponernos, prestemos atención a lo siguiente, nuestro actual presidente, don Felipe, no solo llegó a la presidencia de la república mexicana prometiendo entre otras cosas que quitaría el pago de tenencia –impuesto abusivo y ladrón desde 1968- y no nos ha cumplido sino que ahora, con la mano en la cintura, avala la propuesta de su obeso e improductivo secretario de hacienda quien propone aumentar el IVA un 2% quesque para ayudar a los pobres –siendo esta obligación del gobierno y no del pueblo-, eliminar subsidios en gasolina, electricidad y gas –siendo que ellos han mamado literalmente por años de estos rubros-, aumentar el ISR del 26 al 28% y aumentos similares a productores de cigarrillos, bebidas embriagantes y algunos servicios más, siendo que para ayudar a los pobres –si verdaderamente quisieran hacerlo, aunque yo ya no les creo ni madres- deberían comenzar por reducir el número de diputados y además reducirles el salario –al final de todas las cuentas ya bastantes prestaciones reciben los inútiles mantenidos ¿no?- no solo a ellos sino también a los grandes secretarios y dependientes y al mismo presidente que no solo ganan miles y miles de pesos al mes sino que seguimos siendo nosotros, el pisoteado pueblo mexicano, quienes mantenemos sus comidas, sus cenas, sus trajes de marca y sus gastos personales sin recibir nada a cambio masque un palmo de narices y un aumento en los impuestos, eso en mi pueblo se llama descaro, cinismo y contumelia.

En fin, para mi tristeza, no puedo contarle maravillas al pequeño Luis Ricardo en su bienaventurada llegada a esta tierra pero si puedo hacerle una promesa que no solo ya se está gestando sino que va a reventar en el momento menos esperado, la gente comienza no solo a darse cuenta sino que también ha comenzado a actuar de diferentes maneras, algunos dejaremos de pagar impuestos, otros dejaremos de consumir los productos habituales y optaremos por ciertas alternativas libres de impuestos, otros más iremos directo al grano y comenzaremos a hacer pintas y a colocar mantas diciendo YA BASTA y otros muchos quizá, decidamos alzar la voz y demostrarles que hasta aquí llegaron sus abusos, sus raterías y sus jaladas y que el que paga manda.

Bienvenido a esta tierrita Luis Ricardo, yo por lo pronto te prometo no cesar en las palabras que para bien o para mal, de algo servirán.

Y tu lector, ¿hasta cuando seguirás tolerando tanto pisoteo a tus esfuerzos?

Antonio Andrade
www.antonioandrade.com.mx
 
Arriba