consejos matrimoniales

VISITA

Bovino de la familia
#1
"Una joven pareja judía ortodoxa se entrevista con su rabino, pocos días antes del matrimonio, para pedirle consejos.

El joven, tímidamente le pregunta si es posible hacer una excepción a las estrictas normas que rigen la vida de la ortodoxia. Y dice:


- Rabino: ¿es posible que sólo por esta vez los varones puedan bailar con las mujeres?


- ¡De ninguna manera!


- Pero rabino: es nuestra boda... ¿No voy a poder bailar con mi esposa en mi propia fiesta?


- ¡No! ¡Terminantemente no!, sería una falta total de pudor, y además una violación a nuestras tradiciones. Hombre y mujeres siempre han bailado separados, y seguirán haciéndolo.


- ¿Y después de la ceremonia?


- ¡No insistas! ¡No se puede! ¡Está prohibido y se acabó! Temeroso, el novio decide cambiar el ángulo de las preguntas:


- Bien, de bailar ni hablar, pero ¿sexo? ¿Podemos tener relaciones?


- ¡Por supuesto! Dentro del matrimonio el sexo es una "mitzvah" (una buena acción), para tener hijos.


Algo más entusiasmado ante esta alternativa, el joven vuelve a la carga:


- ¿Podemos ensayar diferentes posiciones? ¿El hombre arriba? ¿La mujer arriba?


- Ningún problema. Es una "mitzvah".


- ¿Estilo perro? ¿Arriba de la mesa de la cocina?


- Seguro, pero cuidado con los objetos cortantes...


- ¿Sobre sábanas de goma, con un balde de miel y aceite tibio, mirando un video porno? ¿Con un par de aparatos, un arnés de cuero, un látigo de lana?


- Seguro... Otra mitzvah.


- ¿De parados?


- ¡No; de parados no! ¡Dios no lo permita!


Sorprendido, el joven pregunta:


- ¿Y por qué no de parados?


- Porque de parados parece que están bailando... "
 
Arriba