Las autoridades de Los Ángeles, California, aprobaron ayer por amplia mayoría una ordenanza municipal que obliga a los actores de cine porno a usar condón en los rodajes para prevenir la transmisión de VIH, informó Los Angeles Times.
El 10 de enero legisladores de la ciudad votaron una medida que exige que estos actores utilicen preservativos en las filmaciones. El resultado fue de 11 votos a favor y uno en contra, pero debía ser confirmado por la junta municipal.
Ayer esta tramitación salió adelante con el respaldo de nueve de los 10 votos emitidos y supone un duro revés al multimillonario sector que tiene en el valle de San Fernando, en el área de Los Ángeles, su principal zona productiva de películas porno en Estados Unidos.
La medida fue promovida por la organización AIDS Healthcare Foundation que tras años tratando de movilizar a los políticos locales para que impusieran el uso de preservativos durante el rodaje de filmes pornográficos terminaron por ser escuchados cuando decidieron forzar un referendo al respecto.
Esa fundación logró las firmas necesarias para que se decidiera en las urnas en junio de este año la idoneidad del condón en el cine pornográfico rodado en Los Ángeles, pero los concejales de la ciudad optaron finalmente por ahorrarse el trámite electoral.
Según informó el periódico citado en su portal de internet, los políticos locales asumieron la semana pasada que los votantes de la ciudad aprobarían la iniciativa en las urnas, y ese referendo habría supuesto un costo de 4 millones de dólares, por ello prefirieron votar la iniciativa ellos mismos.
“Personalmente, cada ocasión que tengo para hacer algo que pueda reducir el contagio del sida siempre la aprovecho. Creo que no hay duda, los votantes habrían visto esto como algo de sentido común”, comentó el concejal Paul Koretz.
La nueva ordenanza municipal, además de exigir el empleo del condón, establece un impuesto a las productoras de cine para adultos con el fin de financiar las inspecciones por sorpresa a los rodajes.
Reacciones
Los empresarios del sector y sus agrupaciones afines expresaron su malestar de inmediato y entendieron la medida como una sobreactuación de las autoridades.
“Esto no se trata de la seguridad y la salud de los actores, trata sobre el gobierno regulando lo que ocurre en una relación consentida por dos adultos”, dijo Diane Duke, de la asociación comercial de la industria pornográfica Free Speech Coalition.
Michael Weinstein, presidente de la AHF, una fundación que lucha contra el sida, dijo que el voto era un paso hacia la regulación de “la máquina que promueve el sexo inseguro” en la industria porno de Estados Unidos.
Pero Nina Hartley, actriz porno desde 1984 y enfermera, criticó la decisión. Explicó que los filmes requieren coitos que duran entre 30 y 60 minutos, y con un condón se pueden generar heridas y por lo tanto un mayor riesgo de transmisión de enfermedades.
“Es un desastre para el cuidado de la salud. Sé que parece diferente visto desde fuera, pero no funcionará y no protegerá a nadie”, agregó.
Contagios
Durante los últimos dos años las filmaciones de cine porno en el área de Los Ángeles tuvieron que suspenderse en numerosas ocasiones después de que se detectaran casos de contagio de VIH entre estrellas del género.
A finales de agosto de 2011 los productores de este tipo de películas suspendieron los rodajes luego de que un actor supuestamente diera positivo a un examen de VIH.
La Free Speech Coalition pidió una moratoria de filmaciones “para pecar de prudentes y eliminar cualquier riesgo para los artistas”, tras revelar que se enteró de un posible caso de VIH.
“El incidente ocurrió fuera de California; sin embargo, la comunidad de producción de Los Ángeles voluntariamente accedió a la moratoria como una respuesta apropiada a la situación actual”, señaló la coalición en su blog.
A partir de octubre de 2010, y durante varias semanas, al menos cuatro grandes productoras dejaron de filmar luego de que el actor porno de 24 años, Derrick Burts, diera positivo al VIH, el virus causante del sida.
