En términos de rendimiento bruto, la ROG XG Station sería 6,7 veces más rápida que la solución integrada X3100 de Intel, presente en muchos notebooks, y ofrecería jugabilidad decente en muchos títulos actuales y futuros. El lado (muy) negativo de esta historia está en el hecho que la tarjeta gráfica sólo se puede aprovechar con un monitor externo, en otras palabras, no podremos disfrutar del poder de la tarjeta usando el monitor del propio notebook, lo que es verdaderamente decepcionante y limita mucho el potencial de esta solución