tiburonxx
Bovino de la familia
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http://www.sinembargo.mx/20-09-2011/43255
Un grupo de víctimas de sacerdotes pederastas instó hoy a los trabajadores del Vaticano y de la Iglesia Católica a “romper el silencio” para declarar sobre casos de abuso ante la Corte Penal Internacional (CPI).Representantes de la Red de Sobrevivientes de los Abusos de Sacerdotes (Snap, por sus siglas en inglés) y del Centro por los Derechos Constitucionales se reunieron con la prensa en Roma para hablar de su denuncia en la CPI contra el Papa y tres cardenales.
“Cientos de empleados actuales y pasados del Vaticano tienen información sobre agresiones sexuales perpetradas en contra de niños. El silencio es complicidad”, dijo Peter Isely de la Snap.
“Ha llegado el momento para que los empleados de la Iglesia (de cualquier nivel) hagan un examen de conciencia y compartan todo lo que saben sobre estos crímenes y ocultaciones”, agregó.
Esas dos organizaciones presentaron la semana pasada una acusación en La Haya por “crímenes contra la humanidad” contra el pontífice y la cúpula vaticana, argumentando que han tolerado y encubierto de manera sistemática a los sacerdotes pederastas.
Pam Spees, del Centro por los Derechos Constitucionales de los Estados Unidos, aseguró que el tribunal de La Haya sí es competente para juzgar su demanda, pese a que El Vaticano no ha suscrito el Tratado de Roma que dio origen a la Corte.
Aseguró que ese organismo puede proceder con base en la nacionalidad de la víctima o siguiendo el principio de territorialidad, es decir el país en el que se cometió el delito.
“Muchas de las objeciones que hemos leído hacia nuestra denuncia en estos días están ya previstas y consideradas en las 22 mil páginas de documentación de nuestro caso, recopiladas durante más de un año de trabajo preparativo”, añadió.
Por su parte Barbara Blaine, presidenta de Snap, afirmó que el objetivo de la denuncia es “sacudir a los responsables vaticanos, para que cambien sus políticas”, que miran por la “cobertura y ocultación”, y para que dejen de “esperar que seamos nosotros los que hagan salir a la luz nuevos casos”.
“Si Jesús estuviera en la Tierra, estaría de la parte de las víctimas y pediría las reformas que nosotros pedimos”. Aunque la Iglesia “nos considera enemigos, un día entenderá que somos un don”, estableció Spees.
:eolo:
Un grupo de víctimas de sacerdotes pederastas instó hoy a los trabajadores del Vaticano y de la Iglesia Católica a “romper el silencio” para declarar sobre casos de abuso ante la Corte Penal Internacional (CPI).Representantes de la Red de Sobrevivientes de los Abusos de Sacerdotes (Snap, por sus siglas en inglés) y del Centro por los Derechos Constitucionales se reunieron con la prensa en Roma para hablar de su denuncia en la CPI contra el Papa y tres cardenales.
“Cientos de empleados actuales y pasados del Vaticano tienen información sobre agresiones sexuales perpetradas en contra de niños. El silencio es complicidad”, dijo Peter Isely de la Snap.
“Ha llegado el momento para que los empleados de la Iglesia (de cualquier nivel) hagan un examen de conciencia y compartan todo lo que saben sobre estos crímenes y ocultaciones”, agregó.
Esas dos organizaciones presentaron la semana pasada una acusación en La Haya por “crímenes contra la humanidad” contra el pontífice y la cúpula vaticana, argumentando que han tolerado y encubierto de manera sistemática a los sacerdotes pederastas.
Pam Spees, del Centro por los Derechos Constitucionales de los Estados Unidos, aseguró que el tribunal de La Haya sí es competente para juzgar su demanda, pese a que El Vaticano no ha suscrito el Tratado de Roma que dio origen a la Corte.
Aseguró que ese organismo puede proceder con base en la nacionalidad de la víctima o siguiendo el principio de territorialidad, es decir el país en el que se cometió el delito.
“Muchas de las objeciones que hemos leído hacia nuestra denuncia en estos días están ya previstas y consideradas en las 22 mil páginas de documentación de nuestro caso, recopiladas durante más de un año de trabajo preparativo”, añadió.
Por su parte Barbara Blaine, presidenta de Snap, afirmó que el objetivo de la denuncia es “sacudir a los responsables vaticanos, para que cambien sus políticas”, que miran por la “cobertura y ocultación”, y para que dejen de “esperar que seamos nosotros los que hagan salir a la luz nuevos casos”.
“Si Jesús estuviera en la Tierra, estaría de la parte de las víctimas y pediría las reformas que nosotros pedimos”. Aunque la Iglesia “nos considera enemigos, un día entenderá que somos un don”, estableció Spees.
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