cuderilso
Bovino maduro
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Estimados amigos ateos, agnósticos, o foristas en general, realmente quisiera conocer su opinión en este tema.
Como me quedo claro con mi post anterior sobre el Apocalipsis que estoy obligado a discutir al abrir un post, pues esta sobreentendido que en este así lo haré.
Y comienzo…
Yo cuderilso, te tomo a ti como mi esposa, para amarte y respetarte, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y la enfermedad, por todos los días de mi vida, hasta que la muerte nos separe.
El sacerdote termina recordando una última frase que se desprende del evangelio de Marcos 10, 1 -12
Por eso dejara el hombre a su padre y madre, hermanos y hermanas, y se unirá a su esposa, por tanto ya no son dos sino uno solo, puesto así, lo que Dios a unido que no lo separe el hombre.
El matrimonio eclesiástico es perpetuo, exclusivo, absoluto y definitivo, por tanto para siempre. Este sacramento está destinado a perfeccionar el amor de los cónyuges, y por ende a fortalecer su unidad indisoluble. La unidad del matrimonio aparece ampliamente confirmada por la igual dignidad personal de la mujer y del varón en el mutuo y pleno amor. La poligamia es contraria a esta igual dignidad de uno por el otro y al amor conyugal que es único y exclusivo
Como no es una forma de experimentación, es concluyente, debe ser el último paso de la unión de una pareja que esta de acuerdo en un sin fin de particularidades. Y con esto también se expresa definitivamente, que para todos no es apto, y no por ser elitista, sino que existen personas que prefieren la promiscuidad sexual, o el libertinaje, y esta bien por ellos, por tanto no necesitan casarse por la iglesia, con esto me enfoco específicamente en aquellos que después de vivir una vida en unión libre o casados mediante leyes civiles escogen dar otro paso mas, y unirse mediante el vinculo eclesiástico.
Es decir, que para esa nueva pareja rigen como en un libro de la ley de cheques, ahora, las leyes eclesiásticas, y estas excluyen faltas tales como la infidelidad, el maltrato físico o el psicológico.
Claros, de que si en un negocio conociendo de mi falta de fondos, entrego un cheque sin los recursos, y me lo devuelven con ese concepto, puedo ser sancionado penalmente por estafa, así mismo lo es por ejemplo la infidelidad en el caso de los esposos casados por la iglesia.
Que debe hacer el marido o la mujer traicionada. El nuevo testamento tipifica y regula esto en Mateo 5, 32 “Quien repudie a su mujer y se case con otra, comete adulterio contra aquella; y si ella repudia a su marido y se casa con otro, comete adulterio"
Un escrito muy antiguo, El Pastor, de hermas, es la más clara posición ante este punto:
Si el esposo es traicionado por su mujer, y este no advierte tal situación, hasta que no lo sepa, el no comete pecado, pero si al descubrirlo aun así lo permite, entonces acepta y comparte el pecado, lo que procede es que el marido le de un certificado de divorcio, la perdone de corazón, se aleje de ella, y se quede solo, pues si el se volviera a casar, cometería adulterio sobre la primera esposa. Si la esposa pecadora se arrepiente, y no lo vuelve a hacer, entonces es nuestro deber perdonarla, y continuar juntos.
Como respuesta rápida para ciertos caso de maltrato intrafamiliar, por excesos de alcohol, o drogas, en las que el marido machista maltrata física o verbalmente a su mujer, expongo, que ningún tipo de esas acciones se deben de permitir, por el hecho de haber contraído nupcias eclesiásticas, tales actos deben ser denunciados ante las autoridades civiles correspondientes y exigir la justicia que procede.
Si sometemos a una relación a un mínimo de 8 años de convivencia obviamente, tales rasgos afloraran durante ese periodo de vida conyugal, por tanto lo que procede es vivir primero en unión de hecho antes que como esposos eclesiásticos, sin que finalmente, tal condición socave mi opinión sobre el maltrato físico, verbal o cualquier otro tipo, aunque esto no termine así mismo y definitivamente con la condición eclesiástica que los une.
Algo muy importante de recordar, y que actualmente no se lo aplica con objetividad, es que los protagonistas de la alianza matrimonial son un hombre y una mujer libres para contraer el matrimonio lo que quiere decir:
– Que no obran por coacción (Embarazo no deseado)
– Y no están impedido por una ley natural (Mismo sexo) o eclesiástica (Poligamia).
La Iglesia considera el intercambio de los consentimientos entre los esposos como el elemento indispensable. Si el consentimiento falta, no hay matrimonio.
Como dije al principio, espero sus comentarios,
Gracias de antemano
Cuderilso
Como me quedo claro con mi post anterior sobre el Apocalipsis que estoy obligado a discutir al abrir un post, pues esta sobreentendido que en este así lo haré.
Y comienzo…
Yo cuderilso, te tomo a ti como mi esposa, para amarte y respetarte, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y la enfermedad, por todos los días de mi vida, hasta que la muerte nos separe.
El sacerdote termina recordando una última frase que se desprende del evangelio de Marcos 10, 1 -12
Por eso dejara el hombre a su padre y madre, hermanos y hermanas, y se unirá a su esposa, por tanto ya no son dos sino uno solo, puesto así, lo que Dios a unido que no lo separe el hombre.
El matrimonio eclesiástico es perpetuo, exclusivo, absoluto y definitivo, por tanto para siempre. Este sacramento está destinado a perfeccionar el amor de los cónyuges, y por ende a fortalecer su unidad indisoluble. La unidad del matrimonio aparece ampliamente confirmada por la igual dignidad personal de la mujer y del varón en el mutuo y pleno amor. La poligamia es contraria a esta igual dignidad de uno por el otro y al amor conyugal que es único y exclusivo
Como no es una forma de experimentación, es concluyente, debe ser el último paso de la unión de una pareja que esta de acuerdo en un sin fin de particularidades. Y con esto también se expresa definitivamente, que para todos no es apto, y no por ser elitista, sino que existen personas que prefieren la promiscuidad sexual, o el libertinaje, y esta bien por ellos, por tanto no necesitan casarse por la iglesia, con esto me enfoco específicamente en aquellos que después de vivir una vida en unión libre o casados mediante leyes civiles escogen dar otro paso mas, y unirse mediante el vinculo eclesiástico.
Es decir, que para esa nueva pareja rigen como en un libro de la ley de cheques, ahora, las leyes eclesiásticas, y estas excluyen faltas tales como la infidelidad, el maltrato físico o el psicológico.
Claros, de que si en un negocio conociendo de mi falta de fondos, entrego un cheque sin los recursos, y me lo devuelven con ese concepto, puedo ser sancionado penalmente por estafa, así mismo lo es por ejemplo la infidelidad en el caso de los esposos casados por la iglesia.
Que debe hacer el marido o la mujer traicionada. El nuevo testamento tipifica y regula esto en Mateo 5, 32 “Quien repudie a su mujer y se case con otra, comete adulterio contra aquella; y si ella repudia a su marido y se casa con otro, comete adulterio"
Un escrito muy antiguo, El Pastor, de hermas, es la más clara posición ante este punto:
Si el esposo es traicionado por su mujer, y este no advierte tal situación, hasta que no lo sepa, el no comete pecado, pero si al descubrirlo aun así lo permite, entonces acepta y comparte el pecado, lo que procede es que el marido le de un certificado de divorcio, la perdone de corazón, se aleje de ella, y se quede solo, pues si el se volviera a casar, cometería adulterio sobre la primera esposa. Si la esposa pecadora se arrepiente, y no lo vuelve a hacer, entonces es nuestro deber perdonarla, y continuar juntos.
Como respuesta rápida para ciertos caso de maltrato intrafamiliar, por excesos de alcohol, o drogas, en las que el marido machista maltrata física o verbalmente a su mujer, expongo, que ningún tipo de esas acciones se deben de permitir, por el hecho de haber contraído nupcias eclesiásticas, tales actos deben ser denunciados ante las autoridades civiles correspondientes y exigir la justicia que procede.
Si sometemos a una relación a un mínimo de 8 años de convivencia obviamente, tales rasgos afloraran durante ese periodo de vida conyugal, por tanto lo que procede es vivir primero en unión de hecho antes que como esposos eclesiásticos, sin que finalmente, tal condición socave mi opinión sobre el maltrato físico, verbal o cualquier otro tipo, aunque esto no termine así mismo y definitivamente con la condición eclesiástica que los une.
Algo muy importante de recordar, y que actualmente no se lo aplica con objetividad, es que los protagonistas de la alianza matrimonial son un hombre y una mujer libres para contraer el matrimonio lo que quiere decir:
– Que no obran por coacción (Embarazo no deseado)
– Y no están impedido por una ley natural (Mismo sexo) o eclesiástica (Poligamia).
La Iglesia considera el intercambio de los consentimientos entre los esposos como el elemento indispensable. Si el consentimiento falta, no hay matrimonio.
Como dije al principio, espero sus comentarios,
Gracias de antemano
Cuderilso