eppur si muove
Bovino de alcurnia
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Espero sea de su agrado, si no les gusta evitar comentarios absurdos :jijiji:
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Un barco es cualquier construcción cóncava y fusiforme, de madera, metal, fibra de vidrio hormigón u otro material, que por su forma es capaz de flotar en el agua y que se utiliza para navegar como medio de transporte. Barco, por consiguiente, es un término genérico con el que se puede referir tanto a una ligera canoa como a un imponente portaaviones.
También se puede considerar como barco a todo vaso flotante de forma simétrica respecto de un plano longitudinal vertical, llamado plano de crujía, provisto de medios de propulsión y gobierno, que reúne las siguientes condiciones:
Flotabilidad,
Solidez o resistencia,
Estanqueidad,
Estabilidad, y
Navegabilidad (Velocidad y evolución).
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Partes importantes de un navío:
1.- Chimenea.
2.- Popa.
3.- Hélice.
4.- Obra viva.
5.- Ancla.
6.- Bulbo de Proa.
7.- Proa.
8.- Cubierta.
9.- Superestructura.
Historia
El hombre ha utilizado las embarcaciones desde hace miles de años, se tienen registro de hace más de 100.000 años en que el hombre utilizaba un tronco debidamente tallado como medio de transporte en el agua.
El mar siempre ha causado fascinación en el ser humano desde el comienzo de los tiempos. Así mismo, siempre le ha provisto de alimento para su sustento. En la costa sur central del Perú en la provincia de Pisco, en el distrito de Paracas hacia el 10.000 a. C.; los primeros hombres se volvieron sedentarios a causa del abundante alimento existente en sus playas. Aún el progreso hacia la agricultura y la ganadería estaba en marcha en sus similares de la Cordillera de los Andes. Como en este caso, en muchos otros litorales se dieron las condiciones para que los hombres en viviendas precarias se volvieran sedentarios, debido a la abundancia de recursos que el mar depositaba en sus playas.
Primero la recolección de mariscos y moluscos, luego la pesca y finalmente se aventuró a adentrarse en ese mar que generosamente le proveía de alimento. La tecnología fue progresando y el hombre construyó elementos para flotar en el agua; probablemente usó troncos de árboles u otros materiales abundantes en su entorno que tenían flotabilidad. Para impulsarse y no quedar a la deriva, echó mano del remo hasta que descubrió que la fuerza eólica podía impulsarlo con menor esfuerzo y mayor efectividad; luego, descubrió la manera de llevar la embarcación hacia donde quería e inventó el timón. Es a partir de acá que el hombre a través del tiempo fue introduciendo mejoras a sus naves, dándoles cada vez mejor impulsión y gobierno, hasta llegar a las modernas naves que surcan hoy día los océanos del mundo.
Pero a la par del gobierno y la deriva, el hombre fue encontrándole nuevos usos a las naves que ya tenía a la mano; las usó para recreación, pesca, medio de transporte y para la guerra y fue especializando el invento, con nuevas técnicas, mayores velocidades, mejor maniobrabilidad, y claro, con armamento cada vez más mortífero. La embarcación que hoy conocemos como buque o barco, descubrió nuevas tierras. Durante muchos siglos fue el único medio de comunicación entre los continentes e hizo famosos a muchos personajes en tiempo de paz y de guerra.
El empleo de los remos condicionó la vida a bordo hasta el siglo XVII; uno de los peores castigos que podía recibir una persona era ser condenado a servir en una galera, «para que la vida le sea un suplicio y la muerte un alivio», como sentenció un juez romano en el siglo XVI.
No todos los marineros que estaban en los remos eran condenados. También había hombres libres que se embarcaban por necesidad; eran llamados «de buena gana». Su única diferencia con los condenados consistía en que podían llevar bigote y cabello, que los condenados no tenían, pues eran rasurados y pelados al rape. Además, durante el día, los hombres libres que no estaban remando podían pasear y hablar libremente, pero al caer la noche eran encadenados igual que los condenados.
La disciplina era muy estricta para todos, la comida escasa y mala. El aspecto higiénico resulta inconcebible y difícil de imaginar. Los hombres de mar, oficiales y marineros, no se lavaban, ya que todos sólo llevaban la ropa que tenían puesta, sin embargo los galeotes estaban obligados a mantenerse limpios, debían a primera hora del día asomarse por sobre la borda, de acuerdo a lo que les permitía el largo de la cadena, para despiojarse y limpiar los harapos que llevaban. Debían hacer sus necesidades en su lugar pues nunca eran liberados de su cadena. Los marineros que los vigilaban, cada cierto tiempo les arrojaban un balde de agua para que las inmundicias corrieran hasta la sentina.
Edad de la vela
Las carracas eran navíos grandes y robustos, redondos, de alto bordo, de velas, especializados en el transporte de grandes cargas en travesías largas, aptos para el comercio entre Flandes y el Mediterráneo, y posteriormente para atravesar el Atlántico. Hubo carracas desde el siglo XII hasta el siglo XVI. Fueron los mayores buques de su época. Provenían de modificar la coca nórdica.
Más pequeña que la carraca, pero de excelentes condiciones marineras fue la carabela, embarcación a vela, ligera, alta y larga hasta 30 m, estrecha que contaba con tres mástiles sobre una sola cubierta y un castillo elevado en la proa y otro en la popa. Llevaba velas cuadras en los palos trinquete y mayor, y aparejo latino en el mesana. Gracias a estas características pudo afrontar con éxito los viajes a través del océano. Navegaba a diez kilómetros por hora, y fue utilizada por españoles y portugueses en los viajes de exploración durante el siglo XV. La carabela copió de la escuela mediterránea el casco, el uso de varios mástiles y la vela triangular, mal llamada latina porque proviene del mundo árabe. De la escuela del mar del Norte y Báltico, de los vikingos y de las ciudades Hanseáticas, tomó el ejemplo de la “coca” y de esta última dos elementos: el timón de codaste y la vela cuadra en el palo mayor. El timón de codaste, gruesa pieza de madera colocada en la popa le permitía a la nave mantener una dirección o rumbo.
El galeón fue una embarcación a vela utilizada desde mediados del siglo XV. Consistía en un bajel grande, de alto bordo que se movía por la acción del viento. Fue una derivación de la carraca pero combinada con la velocidad de la carabela. Los galeones eran barcos de gran tamaño y poseían gran capacidad de fuego.
En el siglo XVI, después que Juan Sebastián Elcano efectuara la primera circunnavegación a la Tierra, el comercio marítimo transatlántico aumentó considerablemente, lo que incentivó la investigación y la creación de nuevos tipos de naves, más apropiadas para largas travesías y para soportar los rigores de la mar en forma continuada. Así fue como apareció el bergantín y, en el ámbito comercial, la urca y los ya nombrados galeones.
Más adelante aparecieron, en la marina militar, la fragata, nave que tenía dos puentes y la corbeta con sólo uno. En la marina comercial apareció el bergantín-goleta y la goleta. Los barcos más grandes de madera fueron los navíos o navíos de línea, como el HMS Victory o el Santísima Trinidad. El último tipo importante de nave a vela fue el clíper que apareció en 1840 construido en los Estados Unidos de América, destinado inicialmente al tráfico entre Norteamérica y Europa y que luego se extendió a Oceanía y Asia. Era de casco de madera, fino y ligero. Alcanzaba gran velocidad en sus travesías compitiendo con las naves a vapor que ya estaban apareciendo.
También en el siglo XIX apareció el buque de pesca de mayor tonelaje, el ballenero. De gran calado y espacio en cubierta para poder faenar a las ballenas y cachalotes que cazaban.
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Vida a bordo de un navío
Como los viajes se hicieron más largos, las epidemias de escorbuto y de tifus siguieron siendo comunes. Uno se pregunta ¿cómo era posible que tantos hombres se dedicasen a la vida del mar bajo esas condiciones? La respuesta es que no muchos marineros eran voluntarios, la gran mayoría era reclutados mediante “levas forzosas”.
La vida a bordo comenzó a cambiar gracias a las observaciones de James Cook, oficial de la marina inglesa, que comprendió la importancia de la higiene a bordo tras comprobar que en sus buques, de cada diez marineros muertos, sólo uno había sido en acto del servicio y nueve habían muerto por escorbuto, desnutrición y enfermedades infecciosas. Empezó a repartir limón contra el escorbuto, mejoró la dieta y luchó porque las tripulaciones tuvieran cámaras más espaciosas, aireadas y cómodas.
Clasificación
Existen muchas formas de clasificar un barco:
Según su tamaño. En ingeniería naval se distinguen dos tipos: los barcos menores, que son los barcos con una eslora (largo) menor de 24 m y con 50 o menos de volumen interno T.R.G. y los barcos mayores, que son aquellos cuya eslora (largo) supera esa distancia y esos volúmenes internos T.R.G.
Barcos comerciales oceánicos de carga
Buque portacontenedores
Buque de carga general
Buques de carga refrigerada
Buque de carga a granel (granelero)
Buque cisterna o tanque
Buque de carga rodante o Ro-Ro
Buque de carga de vehículos
Buque metanero o LNG (con transporte criogénico de gas)
Nombres de barcos según su tipo
Bajel
Balandra
Barco
Bergantín
Bombarda (buque)
Bote
Carabela
Carraca (navío)
Chambequín
Clipper
Coca (náutica)
Corbeta
Falúa
Falucho (Falucha)
Filibote
Flauta (barco)
Fragata
Fusta
Galeaza
Galeón
Galeoncete
Galeota
Galera
Goleta
Jabeque
Lancha
Lancha cañonera
Lugre
Místico (embarcación)
Nao
Navío
Navío de línea
Patache
Pailebote
Paquebote
Paquete (barco)
Pinaza
Pingue
Polacra
Queche
Saetia (barco)
Schooners
Sumaca
Urca (embarcación)
Yate
Zabra
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