APARICIÓN DE TERROR

José Ramón, de oficio taxista, tuvo una experiencia terrorífica y muy desagradable, cuando esa noche, pasadas las 24 horas, regresaba a la ciudad, bajando por las peligrosas curvas del camino de acceso, allá por donde se ubican los cenadores.
Escuchaba música y recordaba que el día había sido muy especial, ya que logró reunir buen dinero y estaba contento porque llevaría recursos para su familia, así que solamente portaba buenos pensamientos.
Acababa de terminar su jornada de trabajo y solo quería llegar al lado de su esposa para descansar y continuar al día siguiente con su labor, como es la rutina de los trabajadores del volante.
Durante el trayecto, el vehículo pasó por un escarpado camino y tras de salir de una curva, José Ramón vio que una mujer se encontraba a un lado de la carretera, estaba esperando quizá el transporte, pero solamente que reparó que eran más de la media noche y entonces le llamó la atención que estuviera en ese lugar, además de solitaria.
José Ramón no le veía la cara, pero sí pudo advertir que traía un vestido blanco, vaporoso, que el viento le hacía ondular para todos lados y sus cabellos estaban sueltos, sin embargo y debido a la oscuridad no le podía ver su cara, es mas ella ocultaba el rostro.
Disminuyó la velocidad de su taxi, se acercó un poco al lugar y cuando lo tuvo a un costado y por la ventanilla le preguntó si la llevaba a algún lugar...silencio....no hubo respuesta.
"Yo pude ver en ese momento que la mujer ocultaba su cara, que no respondía, solamente hizo un ademán con sus manos en que me refería que no quería los servicios del taxi. Además me llamó la atención el hecho de que el viento moviera su vestido blanco, su cabello pero por nada pude ver su cara....en ese momento un frío recorrió mi espina dorsal y sentí que algo me pasaba por el cuerpo.
"Seguí mi camino en el taxi, iba llegando a la avenida Camelinas cuando de repente me sucedió lo indescriptible. Sin querer miré por el retrovisor y justamente vi en ese momento que por fuera del taxi, en la parte trasera estaba ¡esa misma mujer¡ como si estuviera pegada, yo iba en tránsito y nunca pude explicarme qué estaba haciendo afuera, como si se desplazara en forma rápida a la velocidad del taxi.
"Miré su entorno, nunca su cara, y como si fuera un ser poseído aceleré el motor, me pasé el alto y me interné entre la avenida Juárez creyendo que con ello podría librarme de esa terrible pesadilla.
"Pero no la quitaba del retrovisor y en verdad que me dio mucho miedo, porque no entendía quién era y mucho menos que estuviera corriendo al igual que el vehículo, pero me dio mucho miedo, porque sentía que era el mismo diablo, así que comencé a rezar con todas mis fuerzas y de pronto como si fuera pompa de jabón se desapareció, ya no la vi más".

Esa noche José Ramón llegó a su casa más alterado que nunca y en su mente estaba la figura de esa mujer que se le apareció justamente en una curva pronunciada y ahora sí lo creyó porque algunos de los taxistas, sus amigos, ya le habían dicho que en ese lugar se aparecían muchos fantasmas, los que desde luego que andan levitando por las sombras de la noche y dicen que se esconden entre los viejos y vetustos árboles.
Pero ¿Quién esa mujer que no ha podido salir de este plano existencial y sobre todo qué busca, para salir en las noches, no subirse a los taxis y en cambio los sigue durante unos metros, como si fuera una placa trasera, pegada y desafiando la velocidad de los autos?...hay una historia en el sentido de que ahí murió una mujer atropellada hace más de 10 años y que desde entonces a la fecha se sigue mostrando solamente a algunas personas, pero de hecho se ha convertido en una leyenda mortal …

Los Fantasmas, Alejandro Catillo, El Sol de Morelia, 9 de junio de 2008.

No olviden su poner su valioso punto de vista :vientos: