Otra vez la burra al trigo...
Iglesia arremete contra GDF por bodas gay
La Arquidiócesis considera que Marcelo Ebrard dio a los niños la calidad de objetos, al aprobar la unión y adopción de homosexuales, cuyos matrimonios podrán ser legales pero nunca morales
Cuatro parejas homosexuales formalizaron su matrimonio en el DF; opositores se manifestaron afuera del recinto
JULIÁN SÁNCHEZ
El Universal
Ciudad de México Jueves 11 de marzo de 2010
20:46
La Arquidiócesis Primada de México sostuvo que incurren en una inmoralidad y no pueden estar bien con la Iglesia católica, quienes promueven, apoyan, ejecutan o se someten a las uniones de parejas del mismo sexo. "Podrán ser legales, pero nunca morales", subrayó la Arquidiócesis a través de su vocero, el sacerdote Hugo Valdemar,
Consideró que el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, ha vulnerado el derecho de los niños a tener un padre y una madre, y los entregará como objetos, no como personas, a estas parejas, "con los graves riesgos morales y psicológicos que traerá esta arbitraria, injusta e irresponsable medida".
A través de un pronunciamiento firmado por Valdemar, la Arquidiócesis, encabezada por el cardenal Norberto Rivera Carrera insistió:
"Queda en claro que el señor Marcelo Ebrard es el responsable de la aprobación y ejecución de estas leyes destructivas de la familia, y no disimula su aversión a las Iglesias y a la mayoría de los habitantes que gobierna, que profesan la fe cristiana y que rechazan la perversión de sus valores más respetables y queridos, como es el caso de la familia".
La Iglesia católica consideró que es evidente el autoritarismo de Ebrard, quien burlándose de la sociedad hizo caso omiso a las encuestas en las que quedó claro que más de 70% de la población rechaza las adopciones de parejas homosexuales.
Sobre los matrimonios de estas personas, reiteró que la sociedad está siendo testigo, una vez más, del embate contra la familia y los valores cristianos encabezado por el jefe capitalino y la Asamblea Legislativa.
"Esperamos que la Suprema Corte de Justicia de la Nación defienda el derecho superior de los niños y eche abajo esta ley perversa, y que las siguientes legislaturas capitalinas deroguen el cúmulo de leyes que están destruyendo a las familias mexicanas, y que han sido aprobadas y ratificadas", concluyó.