¡En Oaxaca subes cinco kilos en tres días!
yo soy de oax
y para botanear nada como unos chapulines con mezcalito jejejej
y ya comida uuuuffffff hay un buen cambias de pueblo y hay un platillo diferente jejejej
pero nada como un buen tamalito de mole envuelto en hoja de platano jejeje
:baba:¡¡¡ No manches !!!
En Oaxaca no te la acabas. Hay demasiadas cosas para comer (con lana, claro). Por ejemplos:
-Molotes. Son como balones de fut americano pero alargados (8 a 10 cm), de masa de maiz, fritos, rellenos de papa con chorizo. ¡Ingue su madre la dieta!
-Chalupas. Son pequeñas pizzitas de maíz con un guisado encima llamado "chiliajo" (papa con chile y ajo), fritas en manteca de kuino. ¡Colesterol hasta arribotototota!
-Clayudas (o Tlayudas). Son tortillas grandes de maíz blanco, untadas con asiento (residuo de las carnitas de puerco), y acompañadas de frijol molido, quesillo deshebrado, salsa verde o guacamole, col picada y un buen trozo de tasajo (cecina oaxaqueña de res). La tortilla se dobla (como empanada) y se somete al fuego de carbón. ¡¿Por qué crees que los oaxacos son panzones?!
-Sesadillas. Son quesadillas de maíz pequeñas, rellenas con seso de cerdo, fritas y rociadas de salsa roja picosa, acompañadas de lechuga. Son una posible explicación de por qué ninguna oaxaqueña ha sido Miss México y menos Miss Universo (bueno, ni Playmate), y ningún oaxaco es actor de telenovelas.
-Tamal de verde. No son los del D.F. Éstos se rellenan del mole verde oaxaqueño (hecho con hoja santa, yerba santa o acuyo) con carne de cuche. Van en hoja de mazorca. Son un insulto a los diabéticos.
-Carne de horno. Es barbacoa de res. La carne destazada se acuesta en una cama de hojas de aguacate, dentro de un horno previamente calentado con leña de nogal. Es comida obligada en bodas. Mejor que el Viagra (te pones como el brazo de "El Santo").
-Quesillo de crema. Aplicable a casi todo. Cuando es de leche entera es muy "chamaquero" (aumenta tu volumen de esperma y ganas de... ya sabes).
-Mole negro de guajolote. Más picoso que el de Puebla. Aquí se le agrega chocolate para amansarlo. Es la pesadilla de Fidel Castro, que alguna vez lo probó cuando vivía en México y su panza gallega protestó una semana. No lo coman cuando anden ebrios, porque corren el riesgo de ahogarse con el picante si vomitan.
-Nieve de nuez o leche quemada. Las mejores se expenden fuera de la capital; es decir, en pueblitos (como Zaachila, 15 km al sur de la ciudad de Oaxaca; pregunten por "Tía Chabe").
-Estofado de fiesta. Guiso muy condimentado a base de jitomate y chiles, que incluye carne de puerco o pollo. Es más sabroso en bodas, aunque lo sirven en algunos velorios (que son en la casa del "morido").
-Tejate. Bebida a base de cacao. Lo mejor es beber la "nata" (le llaman "flor"), que es la espuma del cacao. Es un aliviane tremendo para la cruda, especialmente después de una borrachera con mezcal y cruce con mota oaxaqueña.
-Espuma. Postre de lujo en Oaxaca, elaborado con arroz y cierto tipo de cacao llamado "cuanesle". Es, básicamente, una espuma dulce que se consume a cucharadas en un recipiente llamado "jícara" (calabaza natural secada y pintada vistosamente).
-Buñuelos. Muy consumidos en las fiestas de septiembre y diciembre. Son tortillas delgadísimas de harina de trigo fritas en aceite vegetal. Se sirven a veces rociadas o empapadas con agua de miel o azúcar. Es tradicional quebrar el plato al terminar de comer el postre, por superstición (conseguir pareja o alejar envidias), aunque eso cada vez se hace menos por razones económicas y ecológicas.
-Guetabaches. Son propios del pueblito llamado Ocotlán y sus alrededores. Son tamales planos, de masa de maíz con hojas de yerba santa, envueltos en una hoja de milpa (maíz). El secreto de su elaboración lo desconozco, pero son deliciosos untados con un poco de frijol molido picosito.
-Chiles rellenos. Mi "jechu" (que es de allá) los hace con picadillo de puerco, pasas, almendras, ajo, jitomate y tomate verde. Este guiso se mete en un chile verde previamente asado a las brasas y despojado de la piel. Luego el chile se capea con espuma de clara de huevo y se fríe. Pueden hacerse también de chile pasilla.
-Tamales de chepil. Incluyen hojas de una yerbita silvestre llamada chepil. Se les agrega un poco de salsa de jitomate con chile verde. Se acompañan de champurrado (atole con chocolate de Oaxaca).
En fin. Seguir enumerando los pecados tan deliciosos que hay en Oaxaca sería una tortura. Me faltaron demasiados.
Mejor vayan a Oaxaca y busquen estos platillos. Provecho.