Un niño de cinco o seis años que corría llorando rodó por el suelo. Otros niños que corrían junto a el huyeron despavoridos, pero un chiquito como de seis años se regresó a sacudirlo: "Juanito, Juanito, levantate". Lo empezó a jalonear como si con eso fuera a reanimarlo: "Juanito ¿que te paso?"...