Buenas noches nuevamente vuelvo con este tema anteriormente había escrito un articulo aquí mismo llamado investigando encuentros con humanoides, ahora traigo este otro caso que investigue se los cuento.
Estudie en la UAM-Azcapotzalco, hace un tiempo, un día estaba platicando con una amiga que me dijo, Oye a ti que te gustan los Ovnis, es necesario que sepas que bajo uno en Zacatenco, mi hermano me lo contó.
Resulta que hace como unos años había un señor que trabajaba en las instalaciones de la escuela en Zacatenco, este señor, vivía lejos del plantel, así que pidió a las autoridades del IPN permiso para pernoctar en las mismas y solo se iba a su casa los fines de semana. Una noche era época de lluvias por cierto, se fue a dormir como siempre, a la mañana siguiente se levanto temprano se aseo y camino unos pasos cuando de pronto vio lo que creyó era una persona, pensó para sus adentros: "Que extraño, es muy temprano para que sea un alumno o maestro, se habrá brincado alguien de afuera será un vagabundo o un borracho". En eso estaba cuando se acercó más a aquella persona, de pronto lo vio bien en ese instante este señor se quedo pasmado viendo a lo que él creía era un vagabundo que se había brincado; al verlo de más cerca se quedo petrificado de miedo.
Fue entonces que empezó a sudar frío y al verlo bien exclamo una grosería, que no voy a decir por respeto a ustedes. Que carajos es, ese fulano, no es una persona, ¡Dios Santo que es!, se dio la vuelta regreso a dónde él dormía se encerró y comenzó a rezar de lo asustado que estaba.
Paso el tiempo, cuando se empezó a escuchar el ruido normal de un día de clases con los autos, alumnos, profesores y trabajadores entrando a la escuela. Al escuchar a las personas se armó de valor y salió, caminó y se encontró a sus compañeros de trabajo, Que en el acto lo vieron aún seguía pálido le preguntaron Oye Armando; por supuesto este no es su nombre, no puedo decirlo por petición de esta persona. ¿Qué te paso estas blanco?
Es que me asustaron hace rato vi algo extraño. Que viste le inquirieron, él les platico lo que había ocurrido, pero como siempre en estos casos se burlaron de él. Lo tildaron de loco o que quizás estaba borracho o había sido una pesadilla.
En eso él señor Armando les dijo, No estoy loco, ni borracho, lo vi por los edificios por allá, les señalo el sitio dónde lo vio, en esa tiempo era temporada de lluvias, caminaron y encontraron las huellas de lo que vio, se quedaron pasmados al ver que no eran huellas de zapatos de una persona por la forma de las mismas.
De todas formas fueron pocos los que le creyeron, y el señor Armando estaba tan asustado que juro que nunca más pernoctaría ahí, aunque tuviera que irse muy temprano y llegar temprano jamás volvería a estar de noche de un día para otro.
En este punto de la historia este señor había sido blanco de burlas y muchos no le creyeron, pero a quien se pregunte el ser que vio era muy delgado con una cabeza enorme brazos muy largos y de ojos muy extraños, por cierto este señor, no sabia nada sobre Ovnis ni sobre encuentros, ni nada por el estilo y no quiso que saber más al respecto, pues no solo estaba asustado, sino que no quería volver a tocar el tema.
En este punto debo decir que era una persona honesta que no quería publicidad, ni tampoco le interesaba que su historia de diera a conocer, en ese sentido tuve suerte de conocer su relato.
Es relevante en este punto decir que no es la primera vez que un suceso similar pasa en ese sitio conozco de otro caso que ocurrió en Zacatenco en julio de 1965 un Ovni bajo en Zacatenco lo pueden hallar en el libro Ovnis vistos en México de los autores: Carlos Alberto Guzmán Rojas y Alfonso Salazar Mendoza en la página 38-40 y cito el mencionado libro.
"Los hermanos Payo y Yago Rodríguez Díaz y Jorge Rueda Navarro, el primero de 17 años y los dos últimos de 19 años Los jóvenes relataron que el miércoles 11 de Julio, a las 0:15 horas transitaban en su automóvil escuchando la radio. De repente percibieron un ruido en el motor, la radio dejo de transmitir y sus relojes se detuvieron. Al mismo tiempo, las luces de la calle se apagaron. Jorge bajo del auto, abrió el cofre para tratar de ubicar el extraño ruido, pero, instantáneamente, se vieron rodeados de una increíble claridad. Llenos de asombro y miedo vieron a corta distancia de donde estaban un enorme "aparato luminoso", posado sobre el terreno con tres "patas gigantescas".
Calcularon que las dimensiones del objeto eran de unos 20 metros de diámetro y 20 de altura. Parecía estar hecho de aluminio. lucía muy brillante y pulido, y estaba completamente iluminado. No vieron focos o tubos que pudieran ser los emisores de luz.
Describieron al objeto como "dos platos superpuestos y en la parte superior se podía ver una doble cúpula".
Asombrados vieron aparecer un ser en lo alto del objeto, perdiéndolo inmediatamente de vista. En la parte inferior vieron un tubo ancho que llego a tocar el suelo, se abrió una especie de escotilla y apareció una persona, bajo algo que asemejaba un radiador de carro, y se colocó sobre la tierra. No resistieron más y se desmayaron".
Volviendo a mi historia, cuando investigue el caso del señor Armando no sabia del caso que acabo de reseñarles investigado por Carlos Guzmán y Alfonso Salazar. Tengo la idea de que quizás halla en ese sitio haya "algo", quizá minerales o estén investigando a la población humana o que se yo, solo se que en todos estos años de estudiar este fenómeno que esto es real, es una lástima que la ciencia no lo contemplé con mas seriedad ya que se podría establecer que efectivamente hay casos de encuentros con seres desconocidos y aportar algo a este estudio para tratar de dar una explicación racional a cada caso. Gracias por su paciencia al leer estas líneas.
Estudie en la UAM-Azcapotzalco, hace un tiempo, un día estaba platicando con una amiga que me dijo, Oye a ti que te gustan los Ovnis, es necesario que sepas que bajo uno en Zacatenco, mi hermano me lo contó.
Resulta que hace como unos años había un señor que trabajaba en las instalaciones de la escuela en Zacatenco, este señor, vivía lejos del plantel, así que pidió a las autoridades del IPN permiso para pernoctar en las mismas y solo se iba a su casa los fines de semana. Una noche era época de lluvias por cierto, se fue a dormir como siempre, a la mañana siguiente se levanto temprano se aseo y camino unos pasos cuando de pronto vio lo que creyó era una persona, pensó para sus adentros: "Que extraño, es muy temprano para que sea un alumno o maestro, se habrá brincado alguien de afuera será un vagabundo o un borracho". En eso estaba cuando se acercó más a aquella persona, de pronto lo vio bien en ese instante este señor se quedo pasmado viendo a lo que él creía era un vagabundo que se había brincado; al verlo de más cerca se quedo petrificado de miedo.
Fue entonces que empezó a sudar frío y al verlo bien exclamo una grosería, que no voy a decir por respeto a ustedes. Que carajos es, ese fulano, no es una persona, ¡Dios Santo que es!, se dio la vuelta regreso a dónde él dormía se encerró y comenzó a rezar de lo asustado que estaba.
Paso el tiempo, cuando se empezó a escuchar el ruido normal de un día de clases con los autos, alumnos, profesores y trabajadores entrando a la escuela. Al escuchar a las personas se armó de valor y salió, caminó y se encontró a sus compañeros de trabajo, Que en el acto lo vieron aún seguía pálido le preguntaron Oye Armando; por supuesto este no es su nombre, no puedo decirlo por petición de esta persona. ¿Qué te paso estas blanco?
Es que me asustaron hace rato vi algo extraño. Que viste le inquirieron, él les platico lo que había ocurrido, pero como siempre en estos casos se burlaron de él. Lo tildaron de loco o que quizás estaba borracho o había sido una pesadilla.
En eso él señor Armando les dijo, No estoy loco, ni borracho, lo vi por los edificios por allá, les señalo el sitio dónde lo vio, en esa tiempo era temporada de lluvias, caminaron y encontraron las huellas de lo que vio, se quedaron pasmados al ver que no eran huellas de zapatos de una persona por la forma de las mismas.
De todas formas fueron pocos los que le creyeron, y el señor Armando estaba tan asustado que juro que nunca más pernoctaría ahí, aunque tuviera que irse muy temprano y llegar temprano jamás volvería a estar de noche de un día para otro.
En este punto de la historia este señor había sido blanco de burlas y muchos no le creyeron, pero a quien se pregunte el ser que vio era muy delgado con una cabeza enorme brazos muy largos y de ojos muy extraños, por cierto este señor, no sabia nada sobre Ovnis ni sobre encuentros, ni nada por el estilo y no quiso que saber más al respecto, pues no solo estaba asustado, sino que no quería volver a tocar el tema.
En este punto debo decir que era una persona honesta que no quería publicidad, ni tampoco le interesaba que su historia de diera a conocer, en ese sentido tuve suerte de conocer su relato.
Es relevante en este punto decir que no es la primera vez que un suceso similar pasa en ese sitio conozco de otro caso que ocurrió en Zacatenco en julio de 1965 un Ovni bajo en Zacatenco lo pueden hallar en el libro Ovnis vistos en México de los autores: Carlos Alberto Guzmán Rojas y Alfonso Salazar Mendoza en la página 38-40 y cito el mencionado libro.
"Los hermanos Payo y Yago Rodríguez Díaz y Jorge Rueda Navarro, el primero de 17 años y los dos últimos de 19 años Los jóvenes relataron que el miércoles 11 de Julio, a las 0:15 horas transitaban en su automóvil escuchando la radio. De repente percibieron un ruido en el motor, la radio dejo de transmitir y sus relojes se detuvieron. Al mismo tiempo, las luces de la calle se apagaron. Jorge bajo del auto, abrió el cofre para tratar de ubicar el extraño ruido, pero, instantáneamente, se vieron rodeados de una increíble claridad. Llenos de asombro y miedo vieron a corta distancia de donde estaban un enorme "aparato luminoso", posado sobre el terreno con tres "patas gigantescas".
Calcularon que las dimensiones del objeto eran de unos 20 metros de diámetro y 20 de altura. Parecía estar hecho de aluminio. lucía muy brillante y pulido, y estaba completamente iluminado. No vieron focos o tubos que pudieran ser los emisores de luz.
Describieron al objeto como "dos platos superpuestos y en la parte superior se podía ver una doble cúpula".
Asombrados vieron aparecer un ser en lo alto del objeto, perdiéndolo inmediatamente de vista. En la parte inferior vieron un tubo ancho que llego a tocar el suelo, se abrió una especie de escotilla y apareció una persona, bajo algo que asemejaba un radiador de carro, y se colocó sobre la tierra. No resistieron más y se desmayaron".
Volviendo a mi historia, cuando investigue el caso del señor Armando no sabia del caso que acabo de reseñarles investigado por Carlos Guzmán y Alfonso Salazar. Tengo la idea de que quizás halla en ese sitio haya "algo", quizá minerales o estén investigando a la población humana o que se yo, solo se que en todos estos años de estudiar este fenómeno que esto es real, es una lástima que la ciencia no lo contemplé con mas seriedad ya que se podría establecer que efectivamente hay casos de encuentros con seres desconocidos y aportar algo a este estudio para tratar de dar una explicación racional a cada caso. Gracias por su paciencia al leer estas líneas.
