Los 'diez mandamientos' en el éxito de Jobs

nanchi1982

Bovino adicto
#1
Los 'diez mandamientos' en el éxito de Jobs

Fue multimillonario desde los 25 años, sin embargo el dinero nunca fue una motivación. Dormía en un colchón tirado en el suelo en una mansión que no amuebló. Llegó a a trabajar en Apple por un salario anual de un dólar, aunque claro sus acciones le reportaban 44 millones. ¿Cómo se manejaba Steve Jobs para lograr su éxito?





Mantener equipos de trabajo reducidos
En los inicios de Macintosh, la plantilla de empleados era de cien personas, ni una más ni una menos. Si era necesario contratar a uno nuevo, antes se despedía a otra persona, para que el número siguiera siendo el mismo exacto. Jobs estaba convencido de que tan solo podía acordarse de los nombres de pila de cien personas.



Usar la zanahoria antes que el palo
Jobs a veces podía dar miedo, pero su carisma personal era lo que de verdad motivaba a sus empleados. Su entusiasmo contagioso fue la razón por la que el personal que diseñó el primer Mac se pasó tres años seguidos trabajando 90 horas a la semana, lo que redundó en una computadora “demencialmente buena“




Crear prototipos de todas las cosas
Todo cuanto Jobs sacaba al mercado venía precedido por una exhaustiva sucesión de prototipos: el hardware, el software, las mismas tiendas de Apple... Los diseñadores y arquitectos se pasaban un año entero construyendo en secreto el prototipo de la tienda ideal en el interior de un hangar situado cerca de la sede de la compañía. Jobs, al final, desechaba su propuesta y ordenaba que volvieran a empezar de cero.




Guardar los secretos
En Apple, nadie habla. Todas las labores se ejecutan de forma compartimentada, para que nadie sepa más de lo que es estrictamente necesario. Este secretismo provoca que exista un interés entusiasta por sus sorprendentes presentaciones de producto, lo que a su vez permite acaparar los titulares de los periódicos



Abstenerse de realizar estudios de mercado
Es famosa la frase de Jobs: «La gente no sabe lo que quiere hasta que uno se lo muestra». Él mismo se encargaba de realizar sus personales estudios de mercado: se lleva los prototipos a su casa y los ponía a prueba durante meses seguidos.




Investigar de forma permanente
A la hora de diseñar los folletos comerciales de Apple, Jobs estudiaba a detalle el uso que Sony hacía de los tipos de letra, la maquetación y el papel con un peso determinado. Cuando llegó el momento de diseñar la caja de cartón para la primera Mac, estuvo paseando por el estacionamiento de Apple fijándose con atención en las carrocerías de los automóviles alemanes e italianos.



Tomar decisiones sin vuelta atrás
Jobs estaba tan orgulloso de los productos que descartaba, como de los que había lanzado al mercado. Durante un tiempo trabajó con ahínco en el desarrollo de un clon del Palm Pilot, proyecto que acabó por cancelar cuando comprendió que los teléfonos móviles iban a imponerse a las computadoras de bolsillo. Esto permitió a sus empleados disponer de tiempo para desarrollar el iPod.




Buscar la perfección
Jobs prestaba meticulosa atención al detalle. La víspera del lanzamiento del primer iPod, los empleados del staff se pasaron la noche entera sustituyendo las clavijas de los auriculares porque Jobs consideraba que no hacían clic de la forma precisa y deseable.




Contratar a los mejores
Esa era siempre su consigna. Por eso contrató al arquitecto I. M. Pei para que diseñara el logotipo de NeXT y reclutó a Mickey Drexler, de Gap, para que formara parte del consejo de administración de Apple con vistas al lanzamiento de la cadena de tiendas de la compañía.




Simplificar
La filosofía del diseño que tiene Jobs se basa en la constante simplificación. En su momento ordenó a los diseñadores del iPod que eliminaran todos los botones y las teclas de los primeros prototipos. Los diseñadores se quejaron, pero luego crearon la tan icónica función de desplazamiento.



Sin duda un gran hombre que, de alguna u otra forma marco la vida de cada uno de nosotros.
 

Y3K

Bovino Milenario
#6
Hay tanta gente (y mucha más ha fallecido) con muchísimo más talento y de inventos de mayor uso en la sociedad que los ""inventados"" por éste señor pero todos insisten en lamerle las nalgas como su fuera el mesias del siglo presente...

Respetable en ciertas cosas, sí, nadie lo neiga, pero de eso a querer hacerle un monumento y venderle su alma... Hay una diferencia enorme.
 

Ayrton Senna

Bovino de la familia
#9
Los 'diez mandamientos' en el éxito de Jobs

Fue multimillonario desde los 25 años, sin embargo el dinero nunca fue una motivación. Dormía en un colchón tirado en el suelo en una mansión que no amuebló. Llegó a a trabajar en Apple por un salario anual de un dólar, aunque claro sus acciones le reportaban 44 millones. ¿Cómo se manejaba Steve Jobs para lograr su éxito?





Mantener equipos de trabajo reducidos
En los inicios de Macintosh, la plantilla de empleados era de cien personas, ni una más ni una menos. Si era necesario contratar a uno nuevo, antes se despedía a otra persona, para que el número siguiera siendo el mismo exacto. Jobs estaba convencido de que tan solo podía acordarse de los nombres de pila de cien personas.

Bueno, eso no es precisamente una fórmula para el éxito, más bien era una forma de trabajar que usaba Jobs. Hay empresas enormes como IBM que tienen enormes grupos de trabajo y aún hoy día IBM sigue siendo un gigante, aunque no tanto como en el pasado.

Usar la zanahoria antes que el palo
Jobs a veces podía dar miedo, pero su carisma personal era lo que de verdad motivaba a sus empleados. Su entusiasmo contagioso fue la razón por la que el personal que diseñó el primer Mac se pasó tres años seguidos trabajando 90 horas a la semana, lo que redundó en una computadora “demencialmente buena“
Jobs anteponía el diseño a la ingeniería y eso también se nota en la Mac 128k, es decir, la primera Mac. Ciertamente fue un producto revolucionario, pues al contrario que la Apple Lisa, la Mac llevó al público la primera computadora personal con interfaz gráfica con precio relativamente económico. Sin embargo, la Mac tenía defectos, pues aunque necesitaba de componentes potentes para poder desplegar los gráficos, Jobs decidió que no debería llevar ventilador y eso llevó a que muchas Mac's dejaran de funcionar después de un tiempo debido al sobrecalentamiento. ¿Demencialmente buena?, pregúntenselo a los dueños de Macs a los que la computadora les falló después de un rato de usarla. La Mac y su sistema de enfriamiento es uno de los precursores de las computadoras con diseños defectuosos como lo son la laptios HP de hace unos pocos años.

Crear prototipos de todas las cosas
Todo cuanto Jobs sacaba al mercado venía precedido por una exhaustiva sucesión de prototipos: el hardware, el software, las mismas tiendas de Apple... Los diseñadores y arquitectos se pasaban un año entero construyendo en secreto el prototipo de la tienda ideal en el interior de un hangar situado cerca de la sede de la compañía. Jobs, al final, desechaba su propuesta y ordenaba que volvieran a empezar de cero.
Eso no fue suficiente para evitar errores de diseño, como en la Apple original, o el mentado fallo en el iPhone 4 que disminuye la señal al usarlo con cierta mano...


Guardar los secretos
En Apple, nadie habla. Todas las labores se ejecutan de forma compartimentada, para que nadie sepa más de lo que es estrictamente necesario. Este secretismo provoca que exista un interés entusiasta por sus sorprendentes presentaciones de producto, lo que a su vez permite acaparar los titulares de los periódicos



Abstenerse de realizar estudios de mercado
Es famosa la frase de Jobs: «La gente no sabe lo que quiere hasta que uno se lo muestra». Él mismo se encargaba de realizar sus personales estudios de mercado: se lleva los prototipos a su casa y los ponía a prueba durante meses seguidos.
Otro problema con Apple es que no sólo trata de imponer a la gente un producto con ciertas características, sino que consideraba a la gente como poco apta para usar un producto tecnológico o peor aún: creer que esa gente haría mal uso de esos productos. Es por ello que sus productos no permiten la recepción y envío de archivos por BlueTooth, o que las aplicaciones a instalar deben estar "firmadas y autorizadas" por Apple. Además de que, por cierto, es un negocio redituable que sólo Apple pueda vender aplicaciones.

Investigar de forma permanente
A la hora de diseñar los folletos comerciales de Apple, Jobs estudiaba a detalle el uso que Sony hacía de los tipos de letra, la maquetación y el papel con un peso determinado. Cuando llegó el momento de diseñar la caja de cartón para la primera Mac, estuvo paseando por el estacionamiento de Apple fijándose con atención en las carrocerías de los automóviles alemanes e italianos.


Tomar decisiones sin vuelta atrás
Jobs estaba tan orgulloso de los productos que descartaba, como de los que había lanzado al mercado. Durante un tiempo trabajó con ahínco en el desarrollo de un clon del Palm Pilot, proyecto que acabó por cancelar cuando comprendió que los teléfonos móviles iban a imponerse a las computadoras de bolsillo. Esto permitió a sus empleados disponer de tiempo para desarrollar el iPod.
Es innegable que tenía una gran visión de lo que podía funcionar en el mercado. El iPod es un ejemplo de ello, pues era muy distinto de los dispositivos existentes en la época para reproducción de MP3. Aunque a mí siempre me pareció molesto que se necesitara por fuerza de instalar iTunes, y por cierto, los primeros iPod fueron un fracaso, pues sólo servían en Mac y con interfaz FireWire. Ya después, los iPods fueron compatibles con Windows, aunque siguieran usando FireWire y finalmente los hicieron compatibles con USB. Fue precisamente el hacerlos compatibles con Windows y USB, lo que llevo a los iPods a ser tan populares.


Buscar la perfección
Jobs prestaba meticulosa atención al detalle. La víspera del lanzamiento del primer iPod, los empleados del staff se pasaron la noche entera sustituyendo las clavijas de los auriculares porque Jobs consideraba que no hacían clic de la forma precisa y deseable.
Jobs era un perfeccionista y el perfeccionismo es una característica indeseable en las personas, pues su misma falta de autoestima los impulsa a exagerar en su trabajo. Apple jamás podría controlar de la misma manera en que Jobs controló las clavijas en las fábricas en China.

Contratar a los mejores
Esa era siempre su consigna. Por eso contrató al arquitecto I. M. Pei para que diseñara el logotipo de NeXT y reclutó a Mickey Drexler, de Gap, para que formara parte del consejo de administración de Apple con vistas al lanzamiento de la cadena de tiendas de la compañía.

Simplificar
La filosofía del diseño que tiene Jobs se basa en la constante simplificación. En su momento ordenó a los diseñadores del iPod que eliminaran todos los botones y las teclas de los primeros prototipos. Los diseñadores se quejaron, pero luego crearon la tan icónica función de desplazamiento.
Sin duda un gran hombre que, de alguna u otra forma marco la vida de cada uno de nosotros.
Una de las características de los productos de Apple, es la simplificación de los mismos. Se conoce como minimalismo, es decir, usar un mínimo de componentes en la interfaz. Es una característica apta para neófitos, pero para gente con conocimiento y que busca explotar su producto, resulta a veces molesto acceder a ciertas caraterísticas con un producto minimalista que con un producto con, por ejemplo, un número mayor de botones.
 

Andr3w7

Bovino maduro
#12
Orale! Buena info... Creo que ya la tenía peeeeeero ni idea de donde quedó... ahora me lo piratearé para un cuadrito aquí en la oficina...
 
#14
estuvo feo eso de "despedir a un empleado en el día de su cumpleaños"... pero bueno, cada quién impone sus políticas... ni hablar, un personaje que marcó tendencias, sin embargo tampoco fue alguien que haya descubierto el hilo negro...
 

rueh_87

Bovino maduro
#19
Hay tanta gente (y mucha más ha fallecido) con muchísimo más talento y de inventos de mayor uso en la sociedad que los ""inventados"" por éste señor pero todos insisten en lamerle las nalgas como su fuera el mesias del siglo presente...

Respetable en ciertas cosas, sí, nadie lo neiga, pero de eso a querer hacerle un monumento y venderle su alma... Hay una diferencia enorme.
Opino lo mismo, este wey que??? osea como dice el comercial "ya fue"total se murio y no se llevo ni siquiera un puto ipod... la vida es una hay que vivirla con la familia, hijos, padres, hermanos, hay que sonreir un chingo no solo hay que ser una maquina de trabajo
 
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