Cuando las cucarachas se convierten en una atracción.
Normalmente cuando vemos una cucaracha, o la pisamos o huimos de ella, algo normal, pero hay un hombre en Texas que no solo no las mata, sino que paga por ellas y luego las disfraza. ¿El motivo?, es el dueño del primer museo de la cucaracha del mundo.
Un experto en plagas llamado Michael Bohdan, harto de perseguir y matar cucarachas, tuvo una revelación empresarial y se dio cuenta que era mejor negocio disfrazarlas y exponerlas que matarlas, y es que el morbo de ver a esos insectos que nos dan tanto asco, hace que tenga cientos de visitas venidas de todas partes del mundo y que gente que las pisa en sus hogares pague por verlas en una urna.
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El resultado de su colección procede de varias “donaciones”, aunque por algún ejemplar ha pagado la friolera de 1.000 dólares, como es el caso de la mayor cucaracha encontrada en Texas y que le llevó a los platós de varias televisiones americanas para ser entrevistado por su extraña afición.
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El pianista Liberoi, la estatua dela Libertad, o los mismísimos Elvis y Marilyn en versión cucaracha, son algunas de las estrellas de este museo, incluso se puede ver a Santa Claus.
Pero no solo hay cucarachas muertas, también hay una sección dedicada a estos simpáticos insectos vivitos y coleando, sonde pueden verse varias diversidades de distintos lugares del mundo.
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Y para irte con buen sabor de este museo, que mejor que tomar un aperitivo de larvas de cucaracha dulces que también se venden aquí. Vamos, una visita completa y agradable.
Normalmente cuando vemos una cucaracha, o la pisamos o huimos de ella, algo normal, pero hay un hombre en Texas que no solo no las mata, sino que paga por ellas y luego las disfraza. ¿El motivo?, es el dueño del primer museo de la cucaracha del mundo.
Un experto en plagas llamado Michael Bohdan, harto de perseguir y matar cucarachas, tuvo una revelación empresarial y se dio cuenta que era mejor negocio disfrazarlas y exponerlas que matarlas, y es que el morbo de ver a esos insectos que nos dan tanto asco, hace que tenga cientos de visitas venidas de todas partes del mundo y que gente que las pisa en sus hogares pague por verlas en una urna.
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El resultado de su colección procede de varias “donaciones”, aunque por algún ejemplar ha pagado la friolera de 1.000 dólares, como es el caso de la mayor cucaracha encontrada en Texas y que le llevó a los platós de varias televisiones americanas para ser entrevistado por su extraña afición.
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El pianista Liberoi, la estatua dela Libertad, o los mismísimos Elvis y Marilyn en versión cucaracha, son algunas de las estrellas de este museo, incluso se puede ver a Santa Claus.
Pero no solo hay cucarachas muertas, también hay una sección dedicada a estos simpáticos insectos vivitos y coleando, sonde pueden verse varias diversidades de distintos lugares del mundo.
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Y para irte con buen sabor de este museo, que mejor que tomar un aperitivo de larvas de cucaracha dulces que también se venden aquí. Vamos, una visita completa y agradable.
iiiuuu asco! Aunque el morbo es el que manda y la verdad si entraria jajajaja 
