Maariiaanaa
Bovino maduro
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Un estudiante que llevaba una máscara femenina de goma, mientras espiaba a las mujeres en los baños del centro comercial, se escapó de ser encarcelado.
Joel Hardman, de 22 años, también usó una peluca negra azabache para que pudiera deslizarse en los baños de mujeres en la Plaza de Toros, en Birmingham.
El estudiante de maestría, que se describe como un hombre inteligente, se satisfacía sexualmente al escuchar a las mujeres usar el baño, e incluso hizo grabaciones de audio.
Hardman fue finalmente capturado con la máscara de piel pálida y una peluca negra, el 3 de abril. Una mujer informó a un empleado del centro comercial que había visto a alguien que parece un “maniquí”, entrar en los baños de mujeres.
Agentes de seguridad capturaron a Hardman, cuando intentaba tomar la salida después de permanecer en un cubículo.
El estudiante de posgrado confesó que le gustaba “escuchar a las señoras orinar”.
También se encontró que tomaba imágenes en su teléfono móvil de los pies de la mujeres, e incluso había una grabación de audio extraño que parecía ser el ruido de un inodoro.
Hardman se libró de ser encarcelado, pero lo introdujeron en un tratamiento para delincuentes sexuales.
Joel Hardman, de 22 años, también usó una peluca negra azabache para que pudiera deslizarse en los baños de mujeres en la Plaza de Toros, en Birmingham.
El estudiante de maestría, que se describe como un hombre inteligente, se satisfacía sexualmente al escuchar a las mujeres usar el baño, e incluso hizo grabaciones de audio.
Hardman fue finalmente capturado con la máscara de piel pálida y una peluca negra, el 3 de abril. Una mujer informó a un empleado del centro comercial que había visto a alguien que parece un “maniquí”, entrar en los baños de mujeres.
Agentes de seguridad capturaron a Hardman, cuando intentaba tomar la salida después de permanecer en un cubículo.
El estudiante de posgrado confesó que le gustaba “escuchar a las señoras orinar”.
También se encontró que tomaba imágenes en su teléfono móvil de los pies de la mujeres, e incluso había una grabación de audio extraño que parecía ser el ruido de un inodoro.
Hardman se libró de ser encarcelado, pero lo introdujeron en un tratamiento para delincuentes sexuales.
malditos enfermos
