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Bovino de alcurnia
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Casi uno de cada cinco estadounidenses cree que el presidente de su país, Barack Obama, es musulmán. La cifra (18%) supone un aumento comparado con el 11% de ciudadanos que respondieron esto mismo hace un año. La encuesta se realizó antes de que el presidente de EE UU manifestase públicamente su apoyo a la construcción de una mezquita en la llamada Zona Cero de Nueva York, donde se encontraban las Torres Gemelas destruidas por el grupo terrorista islamista Al Qaeda el 11 de septiembre de 2001.
Si bien Obama se declara abiertamente cristiano, solo un tercio de los encuestados (34%) le identifican con esta religión, frente al 48% que lo hicieron en 2009, y un 43% afirma que no sabe qué religión profesa su presidente. "Esta incertidumbre o confusión es una de las conclusiones más llamativas del estudio, porque está presente tanto en sus detractores (republicanos) como en sus seguidores (demócratas)", subraya en conversación telefónica con este periódico Alan Cooperman, director adjunto del centro de análisis Pew Forum on Religion and Public Life, que ha realizado el estudio.
Según la investigación, desarrollada sobre una muestra de 3003 personas entre el 31 de julio y el 5 de agosto, la percepción de que Obama es musulmán está más extendida entre sus oponentes políticos. Así, le ven como musulmán un 31% de votantes republicanos (en 2009 eran el 17%) y un 30% de los que no están de acuerdo con su gestión, mientras el dato cae hasta solo el 10% de demócratas y de quienes apoyan su gestión.
La Casa Blanca cree que la causa del error de percepción sobre la fe de Obama es una "campaña de desinformación" de sus rivales políticos. "Aunque el presidente ha sido diligente y se ha mostrado comprometido con su fe cristiana, hay sin duda gente que intenta extender falsedades sobre sus valores y creencias", ha declarado el consejero espiritual de la Casa Blanca, Joshua DuBouis, a la agencia France Presse.
Bajo perfil religioso de Obama comparado con Bush
Cooperman prefiere exponer las cifras que interpretar sus causas, pero cree que parte de la explicación sobre la incertidumbre en torno a la fe de Obama está en que, comparado con el mandato de su predecesor, George Bush, durante el cual la religión estaba muy presente, el actual presidente mantiene un perfil bajo en cuanto a manifestar públicamente sus creencias. Este factor, "junto a los rumores que surgieron durante la campaña presidencial en los que se afirmaba que era musulmán, el hecho de que, que se sepa, la familia Obama no se ha unido a ninguna de las iglesias de Washington a las que ha sido invitada, y la falta de mensajes relacionados con la religión, pueden ser la base para las murmuraciones", apunta Cooperman con cautela.
El público estadounidense cree que la religión influye menos en Obama que en George Bush cuando este era presidente. Esto no es sin embargo necesariamente positivo en un país en el que el 43% de la población apoya que las Iglesias de distintas confesiones se involucren en cuestiones políticas, y seis de cada diez encuestados (61%) está de acuerdo con que los miembros del Congreso tengan fuertes creencias religiosas. "Un 57% de los estadounidenses afirma que la religión es muy importante en sus vidas, y seis de cada diez opina que para ser moral es necesario ser religioso", explica Cooperman para mostrar la importancia de la religión en EE UU. Señala, sin embargo, que un 48% de los americanos cree que Obama confía en la medida justa en sus creencias religiosas cuando toma decisiones políticas, lo cual significa que los estadounidenses no están necesariamente insatisfechos con la traslación de sus creencias religiosas a su labor como dirigente político.
Obama defendió la libertad religiosa y el derecho de la comunidad musulmana a construir un lugar de oración y un centro comunitario en una propiedad privada de la Zona Cero de Manhattan, el pasado 14 de agosto, en la cena que se celebra tradicionalmente en la Casa Blanca para celebrar la ruptura del ayuno en el primer día del mes sagrado de Ramadán. "Creo que los musulmanes tienen el mismo derecho a practicar su religión que cualquier persona en este país. (...) Esto es América. Nuestro compromiso con la libertad religiosa debe ser inquebrantable", afirmó el presidente.
"Hemos tenido suerte de hacer nuestro estudio antes de que el presidente hiciese esas declaraciones, porque así podemos estar seguros de que el resultado representa a la opinión pública de base", declara Cooperman. Otra encuesta, hecha por la revista Time después del día 14 con una metodología distinta aupaba el porcentaje de los que creen que Obama es musulmán hasta el 24%. Según Cooperman, donde el Pew Research preguntaba "¿Sabe de qué religión es Obama?", ofrenciendo múltiples opciones, Time pedía a sus encuestados que contestasen si personalmente creían que el presidente era cristiano o musulmán, pudiendo de esta forma influir en el resultado.
Fuente
Si bien Obama se declara abiertamente cristiano, solo un tercio de los encuestados (34%) le identifican con esta religión, frente al 48% que lo hicieron en 2009, y un 43% afirma que no sabe qué religión profesa su presidente. "Esta incertidumbre o confusión es una de las conclusiones más llamativas del estudio, porque está presente tanto en sus detractores (republicanos) como en sus seguidores (demócratas)", subraya en conversación telefónica con este periódico Alan Cooperman, director adjunto del centro de análisis Pew Forum on Religion and Public Life, que ha realizado el estudio.
Según la investigación, desarrollada sobre una muestra de 3003 personas entre el 31 de julio y el 5 de agosto, la percepción de que Obama es musulmán está más extendida entre sus oponentes políticos. Así, le ven como musulmán un 31% de votantes republicanos (en 2009 eran el 17%) y un 30% de los que no están de acuerdo con su gestión, mientras el dato cae hasta solo el 10% de demócratas y de quienes apoyan su gestión.
La Casa Blanca cree que la causa del error de percepción sobre la fe de Obama es una "campaña de desinformación" de sus rivales políticos. "Aunque el presidente ha sido diligente y se ha mostrado comprometido con su fe cristiana, hay sin duda gente que intenta extender falsedades sobre sus valores y creencias", ha declarado el consejero espiritual de la Casa Blanca, Joshua DuBouis, a la agencia France Presse.
Bajo perfil religioso de Obama comparado con Bush
Cooperman prefiere exponer las cifras que interpretar sus causas, pero cree que parte de la explicación sobre la incertidumbre en torno a la fe de Obama está en que, comparado con el mandato de su predecesor, George Bush, durante el cual la religión estaba muy presente, el actual presidente mantiene un perfil bajo en cuanto a manifestar públicamente sus creencias. Este factor, "junto a los rumores que surgieron durante la campaña presidencial en los que se afirmaba que era musulmán, el hecho de que, que se sepa, la familia Obama no se ha unido a ninguna de las iglesias de Washington a las que ha sido invitada, y la falta de mensajes relacionados con la religión, pueden ser la base para las murmuraciones", apunta Cooperman con cautela.
El público estadounidense cree que la religión influye menos en Obama que en George Bush cuando este era presidente. Esto no es sin embargo necesariamente positivo en un país en el que el 43% de la población apoya que las Iglesias de distintas confesiones se involucren en cuestiones políticas, y seis de cada diez encuestados (61%) está de acuerdo con que los miembros del Congreso tengan fuertes creencias religiosas. "Un 57% de los estadounidenses afirma que la religión es muy importante en sus vidas, y seis de cada diez opina que para ser moral es necesario ser religioso", explica Cooperman para mostrar la importancia de la religión en EE UU. Señala, sin embargo, que un 48% de los americanos cree que Obama confía en la medida justa en sus creencias religiosas cuando toma decisiones políticas, lo cual significa que los estadounidenses no están necesariamente insatisfechos con la traslación de sus creencias religiosas a su labor como dirigente político.
Obama defendió la libertad religiosa y el derecho de la comunidad musulmana a construir un lugar de oración y un centro comunitario en una propiedad privada de la Zona Cero de Manhattan, el pasado 14 de agosto, en la cena que se celebra tradicionalmente en la Casa Blanca para celebrar la ruptura del ayuno en el primer día del mes sagrado de Ramadán. "Creo que los musulmanes tienen el mismo derecho a practicar su religión que cualquier persona en este país. (...) Esto es América. Nuestro compromiso con la libertad religiosa debe ser inquebrantable", afirmó el presidente.
"Hemos tenido suerte de hacer nuestro estudio antes de que el presidente hiciese esas declaraciones, porque así podemos estar seguros de que el resultado representa a la opinión pública de base", declara Cooperman. Otra encuesta, hecha por la revista Time después del día 14 con una metodología distinta aupaba el porcentaje de los que creen que Obama es musulmán hasta el 24%. Según Cooperman, donde el Pew Research preguntaba "¿Sabe de qué religión es Obama?", ofrenciendo múltiples opciones, Time pedía a sus encuestados que contestasen si personalmente creían que el presidente era cristiano o musulmán, pudiendo de esta forma influir en el resultado.
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