yoxie
Bovino maduro
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- 27 Dic 2010
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- #1
Durante los años que me encontraba estudiando en la facultad, no tenía un nivel económico muy alto debido a los gastos que conlleva una ingeniería, sin embargo no me iba tan mal, rentaba una casa compartida, llevaba a casa a mis amistades para celebrar cualquier idiotez (fantasías de estudiante),etc…
Lo que os voy a narrar, es una historia real como las anteriores, y como en cada historia, los nombres son ficticios para no afectar a los implicados en el voyeuricidio (como hubiese dicho el Sr. Juez de la Tremenda Corte con Tres Patines)…
La casa, aunque era fría, grande y sumamente espaciosa, la compartíamos tres personas, una madre soltera con su hijo al que pocas veces de lo dejaban ver sus suegros, pues era un hijo bastardo con la amante de su hijo (algo revuelto verdad?) en fin, no importa, solo es para ambientaros… La otra persona, una mujer mayor (cerca de los 50 años), divorciada y madre de cuatro hijos ya mayores, la mayor de sus hijas de mi edad y los demás hijos con algo de diferencia entre edades, hijos de padres distintos y como cereza del pastel, prostituta muy demacrada por la vida, nada atractiva y avejentada por la mala vida que llevaba… y la tercer persona: vuestro servidor…
Lógico deciros que por mi cama pasaron varias mujeres de las cuales os contaré uno de estos días.
No pasó mucho tiempo hasta que llegó un nuevo inquilino, una joven de 20 años, de piel morena, 1.65m. de estatura, delgada pero muy bien marcadas sus curvas, deportista, atlética y jugadora de Foot Ball en un equipo local femenil, con un cuerpo menudo, pero a la vez fuerte y firme… sus senos pequeños talla 32-A, sus nalgas firmes, sostenidas por la musculatura de sus muslos y sensualmente separadas como las bailarinas de ballet. Un vientre plano sensualmente suavizado por sus bellitos corporales como la piel de un durazno…
El día de su mudanza caballerosamente me ofrecí a ayudare con su equipaje y platicamos largo rato mientras descargábamos todo lo que traía, yo he quedado absorto al verla cuando llegó, pues traía puestos unos mallones color blanco con un minidress color lila prácticamente entallados como si fuese su segunda piel… el sudor de rodaba por su piel me excitaba tanto que no podía disimular mi erección, por lo tanto cargaba las cajas frente a mí, presionando mi pene contra ellas y masturbándome de cierta manera al verla caminar hacia su dormitorio…
Recordáis a las personas que además de Alicia (La llamaré así porque me sentía como en el país de las maravillas) y yo compartíamos la casa? Pues al poner un poco de atención a sus actividades, descubrí que la mayoría de las noches no llegaban, por lo tanto prácticamente podría decirse que nos quedábamos solos Alicia y yo… ella tenía un novio en su ciudad natal, y al parecer estaba muy enamorada del tío, pues nunca me había dado señal alguna de interés incluso de una amistad para conmigo, sin embargo, las cosas iban a dar un giro radical muy pronto…
Ella acostumbraba ducharse antes de ir a dormir, así que mientras ella tomaba esa ducha, revisaba su dormitorio, abría sus cajoneras, olfateaba sus bragas “sucias”, revisaba su teléfono móvil y enviaba vía bluetooth a mi pc las fotografías de ella desnuda que se tomaba y le enviaba a su pareja, me masturbaba con el dulce aroma impregnado en su cama limpiándome con sus bragas del cesto de ropa sucia (nunca se daría cuenta, pues era ropa para la lavandería)… así pasaba los días, descubrí un lado muy oscuro de mi ser con su llegada… no tarde mucho en intentar verla desnuda, instalé una cámara vga antigua en su dormitorio para verla desde mi pc, pero ella al ser tan desordenada aventaba la toalla, su pollera, sus bragas o cualquier prenda obstruyendo la visión de la cámara, a lo cual me interrumpía la visión y obviamente la masturbación del momento…
Desesperadamente busque la manera de verla desnuda lo más cercano posible, pero instalar la webcam en el baño, sería una labor difícil, pues en el baño solo había lo necesario (recordando que vivíamos 4 personas distintas y cada quien tenía sus cosas de aseo personal en su habitación), así que descubrí la manera:
La puerta del baño era muy vieja, por lo tanto la madera estaba podrida por la humedad, asi que poco a poco y con los días fui haciendo un hoyo pequeño para verle desde debajo de la puerta cuando entrara, finalmente tenía la casa solo con ella la mayoría de las veces… un día llegando de la facultad mi sorpresa fue que el pequeño agujero que había horadado ya no era, digamos, pequeño! Era un enorme agujero justo en la esquina de la puerta!, un rato después llegó Alicia y se disculpó por lo sucedido, se había atorado su bolso en el suelo y al cogerlo le ha tirado tan fuerte que rompió la esquina de la puerta… yo simplemente solté a reír y le he dicho que se preocupara, le diríamos a la dueña de la casa para que lo mandase reparar, yo no podía creer mi suerte!!!
Esa misma noche puse en marcha mi malévolo plan: entre a su recámara en cuanto escuche el correr del agua por la ducha y cogí sus bragas mas recientes! Aún tibias, la entrepierna con la humedad fresca y con su aroma delicioso, mezcla de sudor y sus fluidos vaginales producto de la excitación por el juego, yo estaba a punto de estallar! Silenciosamente me coloqué pecho tierra de manera lateral para ver discretamente cuando saliera de ducharse, pero al ver por el agujera de la puerta, mi sorpresa fue mayor al ver que se duchaba con la puerta del cancel abierta!!!, fue delicioso ver como con suavidad se deslizaba la espuma del jabón por su deliciosa piel bajando por sus senos, llegando a su vientre y pasando a su entrepierna para finalmente caer hacia el desagüe, el olor era delicioso! mezcla de su aroma con los dulces olores frutales de su jabón y su shampoo mientras yo me masturbaba con sus bragas sintiendo como si tuviera ese delicioso cuerpo sobre mí y moviéndose de arriba abajo, por un segundo perdí la noción del tiempo y el espacio… no fue hasta que cerró las llaves de la ducha y tosió que me percaté de lo que estaba haciendo, rápidamente corrí a su recámara para dejar sus bragas llenas de mi semen mezclado con su sudor y sus fluidos vaginales en el cesto de ropa sucia, aún caliente por la fricción y mi mano, suavemente cerré su puerta y me dirigí a la cocina por un vaso de agua para enfriarme, pero mi camino fue interrumpido con su voz… -Hola! No sabía que aun seguías despierto! No sabía si me habría visto salir de su recámara, solo me contuve a decir: -H-Hola! S-Si, estaba haciendo un trabajo y voy por un vaso de agua, gustáis algo de la cocina? –Si! Por favor podéis traerme un vaso con agua a mí? Recorrí el pasillo hasta la cocina que para ese momento se me hizo el camino mas largo que recorrer completa la muralla china de lado a lado, no sabía si me ha visto o no y si se daría cuenta de sus bragas… normalmente volví con su vaso con agua y se lo di sonriendo, ella lo tomó y con su dedo índice me acarició mi mejilla y me dijo sensualmente “Gracias” mientras guiñaba uno de sus hermosos ojos color miel…
La noche pasó lentamente, no pude cerrar los ojos en toda la noche, la curiosidad de saber si sabía lo que había hecho, y el miedo de pensar cómo podría reaccionar ante ello… nunca antes había sentido tanto temor ante algo, pero al mismo tiempo me excitaba pensar que tal vez ella lo sabía y no le molestaba, incluso que podría llegar a algo más con ella… en fin, llegó la mañana siguiente, apenas si he cerrado los ojos por un momento, la curiosidad y el temor, no aguantaba más! Tenía que averiguar algo!
En cuanto escuché que salía de su habitación yo me hice el gracioso con un vaso de leche fría… -Hola! Buen día! Gustáis? Desperté con antojo de un vaso de leche fría! Ella lo tomó y me sonrió! –Cómo has sabido? Me encanta la leche fría por la mañana! Gracias! Y delicadamente se acercó a mi mejilla y me besó! –Nos vemos chico, buen día, disculpa que no me quede a charlar, pero llevo un poco de prisa… bebió su leche y dejó el vaso sobre la mesa… me tranquilizó saber que por lo menos hasta ahora no había sucedido nada, pero cuando quise ir a ver el resultado de mi fechoría en su habitación, estaba cerrada con llave! Nunca antes la había cerrado con llave! Pero no quise turbarme más de lo que ya estaba, así que decidí que no pasó nada y continué con mi vida normalmente hasta esa noche…
Días después de que sucedía lo mismo observando cómo se duchaba y masturbándome con sus bragas, y no sucedía nada extraño, le encontré gusto a la adrenalina de pensar que podían encontrarme masturbándome con las bragas de ella y observándola desnuda mientras tomaba una ducha, o ella saliera y me encontrara con sus bragas en el pene y observándola desnuda…
Así paso el tiempo, e incluso hasta nos hicimos buenos amigos… cuando llego el tiempo de que ella volviera a su ciudad natal, nos despedimos y hasta una pequeña reunión hicimos para convivir una última vez, antes de partir, ella me dio una carta en la que me decía lo siguiente:
“Sabes? Me encanta ver como tomas mis bragas en vuestras manos y las hueles con deseo y un aire de lujuria, me gusta veros cómo os masturbáis viéndome en la ducha, me encanta veros cuando corres a mi habitación a dejar mis bragas cuando habéis acabado… cómo es que lo sé? También os he visto con una webcam que instalé cuando no estabais, y me excita veros a vos desnudo con vuestro pene erecto como la torre de Pisa, proyectando la leche que me encanta saborear cuando salgo de la ducha.. sí, cuando dejáis mis bragas, yo lamo vuestro semen de ellas y me masturbo mientras saboreo vuestro sabor, por eso tapaba vuestra cámara… Disculpadme por no haberos dicho nada en mi estancia en la casa, pero es que no quiero dejar a mi pareja, sin embargo me gustáis mucho, sois un hombre al que voy a recordar con todo mi amor siempre… espero volver a veros algún día… disfrutad de mis fotos, no me olvidéis y pensad siempre en mi cuando deseéis satisfacer vuestros deseos íntimos mas sexuales…
Con amor: ******”
Lo que os voy a narrar, es una historia real como las anteriores, y como en cada historia, los nombres son ficticios para no afectar a los implicados en el voyeuricidio (como hubiese dicho el Sr. Juez de la Tremenda Corte con Tres Patines)…
La casa, aunque era fría, grande y sumamente espaciosa, la compartíamos tres personas, una madre soltera con su hijo al que pocas veces de lo dejaban ver sus suegros, pues era un hijo bastardo con la amante de su hijo (algo revuelto verdad?) en fin, no importa, solo es para ambientaros… La otra persona, una mujer mayor (cerca de los 50 años), divorciada y madre de cuatro hijos ya mayores, la mayor de sus hijas de mi edad y los demás hijos con algo de diferencia entre edades, hijos de padres distintos y como cereza del pastel, prostituta muy demacrada por la vida, nada atractiva y avejentada por la mala vida que llevaba… y la tercer persona: vuestro servidor…
Lógico deciros que por mi cama pasaron varias mujeres de las cuales os contaré uno de estos días.
No pasó mucho tiempo hasta que llegó un nuevo inquilino, una joven de 20 años, de piel morena, 1.65m. de estatura, delgada pero muy bien marcadas sus curvas, deportista, atlética y jugadora de Foot Ball en un equipo local femenil, con un cuerpo menudo, pero a la vez fuerte y firme… sus senos pequeños talla 32-A, sus nalgas firmes, sostenidas por la musculatura de sus muslos y sensualmente separadas como las bailarinas de ballet. Un vientre plano sensualmente suavizado por sus bellitos corporales como la piel de un durazno…
El día de su mudanza caballerosamente me ofrecí a ayudare con su equipaje y platicamos largo rato mientras descargábamos todo lo que traía, yo he quedado absorto al verla cuando llegó, pues traía puestos unos mallones color blanco con un minidress color lila prácticamente entallados como si fuese su segunda piel… el sudor de rodaba por su piel me excitaba tanto que no podía disimular mi erección, por lo tanto cargaba las cajas frente a mí, presionando mi pene contra ellas y masturbándome de cierta manera al verla caminar hacia su dormitorio…
Recordáis a las personas que además de Alicia (La llamaré así porque me sentía como en el país de las maravillas) y yo compartíamos la casa? Pues al poner un poco de atención a sus actividades, descubrí que la mayoría de las noches no llegaban, por lo tanto prácticamente podría decirse que nos quedábamos solos Alicia y yo… ella tenía un novio en su ciudad natal, y al parecer estaba muy enamorada del tío, pues nunca me había dado señal alguna de interés incluso de una amistad para conmigo, sin embargo, las cosas iban a dar un giro radical muy pronto…
Ella acostumbraba ducharse antes de ir a dormir, así que mientras ella tomaba esa ducha, revisaba su dormitorio, abría sus cajoneras, olfateaba sus bragas “sucias”, revisaba su teléfono móvil y enviaba vía bluetooth a mi pc las fotografías de ella desnuda que se tomaba y le enviaba a su pareja, me masturbaba con el dulce aroma impregnado en su cama limpiándome con sus bragas del cesto de ropa sucia (nunca se daría cuenta, pues era ropa para la lavandería)… así pasaba los días, descubrí un lado muy oscuro de mi ser con su llegada… no tarde mucho en intentar verla desnuda, instalé una cámara vga antigua en su dormitorio para verla desde mi pc, pero ella al ser tan desordenada aventaba la toalla, su pollera, sus bragas o cualquier prenda obstruyendo la visión de la cámara, a lo cual me interrumpía la visión y obviamente la masturbación del momento…
Desesperadamente busque la manera de verla desnuda lo más cercano posible, pero instalar la webcam en el baño, sería una labor difícil, pues en el baño solo había lo necesario (recordando que vivíamos 4 personas distintas y cada quien tenía sus cosas de aseo personal en su habitación), así que descubrí la manera:
La puerta del baño era muy vieja, por lo tanto la madera estaba podrida por la humedad, asi que poco a poco y con los días fui haciendo un hoyo pequeño para verle desde debajo de la puerta cuando entrara, finalmente tenía la casa solo con ella la mayoría de las veces… un día llegando de la facultad mi sorpresa fue que el pequeño agujero que había horadado ya no era, digamos, pequeño! Era un enorme agujero justo en la esquina de la puerta!, un rato después llegó Alicia y se disculpó por lo sucedido, se había atorado su bolso en el suelo y al cogerlo le ha tirado tan fuerte que rompió la esquina de la puerta… yo simplemente solté a reír y le he dicho que se preocupara, le diríamos a la dueña de la casa para que lo mandase reparar, yo no podía creer mi suerte!!!
Esa misma noche puse en marcha mi malévolo plan: entre a su recámara en cuanto escuche el correr del agua por la ducha y cogí sus bragas mas recientes! Aún tibias, la entrepierna con la humedad fresca y con su aroma delicioso, mezcla de sudor y sus fluidos vaginales producto de la excitación por el juego, yo estaba a punto de estallar! Silenciosamente me coloqué pecho tierra de manera lateral para ver discretamente cuando saliera de ducharse, pero al ver por el agujera de la puerta, mi sorpresa fue mayor al ver que se duchaba con la puerta del cancel abierta!!!, fue delicioso ver como con suavidad se deslizaba la espuma del jabón por su deliciosa piel bajando por sus senos, llegando a su vientre y pasando a su entrepierna para finalmente caer hacia el desagüe, el olor era delicioso! mezcla de su aroma con los dulces olores frutales de su jabón y su shampoo mientras yo me masturbaba con sus bragas sintiendo como si tuviera ese delicioso cuerpo sobre mí y moviéndose de arriba abajo, por un segundo perdí la noción del tiempo y el espacio… no fue hasta que cerró las llaves de la ducha y tosió que me percaté de lo que estaba haciendo, rápidamente corrí a su recámara para dejar sus bragas llenas de mi semen mezclado con su sudor y sus fluidos vaginales en el cesto de ropa sucia, aún caliente por la fricción y mi mano, suavemente cerré su puerta y me dirigí a la cocina por un vaso de agua para enfriarme, pero mi camino fue interrumpido con su voz… -Hola! No sabía que aun seguías despierto! No sabía si me habría visto salir de su recámara, solo me contuve a decir: -H-Hola! S-Si, estaba haciendo un trabajo y voy por un vaso de agua, gustáis algo de la cocina? –Si! Por favor podéis traerme un vaso con agua a mí? Recorrí el pasillo hasta la cocina que para ese momento se me hizo el camino mas largo que recorrer completa la muralla china de lado a lado, no sabía si me ha visto o no y si se daría cuenta de sus bragas… normalmente volví con su vaso con agua y se lo di sonriendo, ella lo tomó y con su dedo índice me acarició mi mejilla y me dijo sensualmente “Gracias” mientras guiñaba uno de sus hermosos ojos color miel…
La noche pasó lentamente, no pude cerrar los ojos en toda la noche, la curiosidad de saber si sabía lo que había hecho, y el miedo de pensar cómo podría reaccionar ante ello… nunca antes había sentido tanto temor ante algo, pero al mismo tiempo me excitaba pensar que tal vez ella lo sabía y no le molestaba, incluso que podría llegar a algo más con ella… en fin, llegó la mañana siguiente, apenas si he cerrado los ojos por un momento, la curiosidad y el temor, no aguantaba más! Tenía que averiguar algo!
En cuanto escuché que salía de su habitación yo me hice el gracioso con un vaso de leche fría… -Hola! Buen día! Gustáis? Desperté con antojo de un vaso de leche fría! Ella lo tomó y me sonrió! –Cómo has sabido? Me encanta la leche fría por la mañana! Gracias! Y delicadamente se acercó a mi mejilla y me besó! –Nos vemos chico, buen día, disculpa que no me quede a charlar, pero llevo un poco de prisa… bebió su leche y dejó el vaso sobre la mesa… me tranquilizó saber que por lo menos hasta ahora no había sucedido nada, pero cuando quise ir a ver el resultado de mi fechoría en su habitación, estaba cerrada con llave! Nunca antes la había cerrado con llave! Pero no quise turbarme más de lo que ya estaba, así que decidí que no pasó nada y continué con mi vida normalmente hasta esa noche…
Días después de que sucedía lo mismo observando cómo se duchaba y masturbándome con sus bragas, y no sucedía nada extraño, le encontré gusto a la adrenalina de pensar que podían encontrarme masturbándome con las bragas de ella y observándola desnuda mientras tomaba una ducha, o ella saliera y me encontrara con sus bragas en el pene y observándola desnuda…
Así paso el tiempo, e incluso hasta nos hicimos buenos amigos… cuando llego el tiempo de que ella volviera a su ciudad natal, nos despedimos y hasta una pequeña reunión hicimos para convivir una última vez, antes de partir, ella me dio una carta en la que me decía lo siguiente:
“Sabes? Me encanta ver como tomas mis bragas en vuestras manos y las hueles con deseo y un aire de lujuria, me gusta veros cómo os masturbáis viéndome en la ducha, me encanta veros cuando corres a mi habitación a dejar mis bragas cuando habéis acabado… cómo es que lo sé? También os he visto con una webcam que instalé cuando no estabais, y me excita veros a vos desnudo con vuestro pene erecto como la torre de Pisa, proyectando la leche que me encanta saborear cuando salgo de la ducha.. sí, cuando dejáis mis bragas, yo lamo vuestro semen de ellas y me masturbo mientras saboreo vuestro sabor, por eso tapaba vuestra cámara… Disculpadme por no haberos dicho nada en mi estancia en la casa, pero es que no quiero dejar a mi pareja, sin embargo me gustáis mucho, sois un hombre al que voy a recordar con todo mi amor siempre… espero volver a veros algún día… disfrutad de mis fotos, no me olvidéis y pensad siempre en mi cuando deseéis satisfacer vuestros deseos íntimos mas sexuales…
Con amor: ******”