tiburonxx
Bovino de la familia
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Milenio Diario
Alberto Berdusco
http://impreso.milenio.com/node/8571895
En abril, el índice de precios al consumidor (IPC) tuvo una variación de 0.35 por ciento, con lo cual la inflación general se situó en 6.17 por ciento, es decir, 0.13 puntos porcentuales mayor al registrado el mes anterior, informó el Banco de México.
El incremento anualizado de la canasta básica subió 7.72 por ciento, su mayor nivel desde 1990.
El incremento del IPC se debió principalmente por la trayectoria del componente no subyacente, donde los precios de los productos agrícolas y en especial los de las frutas y verduras presentaron mayores tasas de crecimiento.
En tanto, la inflación subyacente, considerada el mejor parámetro para medir la variación de precios porque elimina algunos productos de alta volatilidad, se ubicó en5.81 por ciento, lo que significó una reducción de 0.02 puntos porcentuales respecto al dato reportado en marzo pasado.
“La subyacente está cediendo a las presiones por el tipo de cambio, el cual ha registrado niveles más cercanos a su tendencia normal. Esto y la contracción de la economía serán los elementos predominantes en la decisión de política monetaria del Banco de México”, indicó Ixe en un análisis.
“Los precios de mercancías a alimentos procesados con alzas mayores a su tendencia sugiere que aún se efectúan por costos cambiarios mayores; y en servicios distintos a vivienda y educación se registró una inflación mucho menor a lo previsto, lo que apunta a un menor crecimiento económico”, coincidieron analistas de Banamex.
El Banco de México explicó que por componentes, el rubro de alimentos, bebidas y tabaco empujó la inflación, al registrar una variación de 1.47 por ciento; en segundo lugar, el concepto de salud y cuidado personal presionó los precios al ubicarse en 0.78 por ciento.
En el cuarto mes del año, los productos que mayor variación experimentaron respecto al mes anterior fueron jitomate, con una variación de 59.17 por ciento; aguacate 19.14; tortilla de maíz, 1.94; huevo, 1.67; cerveza, 2.24, y el servicio telefónico local, con 2.67 por ciento.
En contraste, los productos que cedieron a las presiones inflacionarias fueron electricidad, limón, servicios turísticos en paquete, calabacita, gasolina de bajo octanaje, relojes, joyería y bisutería, papaya y manzana.
El análisis de Banamex resaltó que los resultados apuntan a una baja, con lo cual se alcanzará una inflación cercana a 5.6 por ciento anual en los próximos tres meses, y para cerrar el año en cerca de 3.8 por ciento.
“No descartamos una menor inflación a la prevista para el fin de año, dada la fuerte disminución en la demanda de servicios que puede causar la emergencia sanitaria y trasladarse a otros precios en la medida en que se haya afectado el crecimiento económico y el empleo”, concluyó.
Claves
En recuperación
• De acuerdo con el Banco de México, se espera que la inflación retome una tendencia a la baja a partir de mayo, que se vería reforzada gradualmente por menores tasas de crecimiento en los precios de los alimentos procesados y de los productos pecuarios.
• Se prevé que los precios de los energéticos continúen sin cambio en lo que resta del año, lo cual además de reflejarse de manera directa en la medición de la inflación, se espera a que coadyuve a atenuar las presiones de costos sobre las empresas.
• El instituto central considera que al cierre de 2009 la inflación se ubicará en un rango entre 4 y 4.50 por ciento; y hacia el próximo año se espera que los precios cedan para que converja hacia su meta de 3 por ciento.
Alberto Berdusco
http://impreso.milenio.com/node/8571895
En abril, el índice de precios al consumidor (IPC) tuvo una variación de 0.35 por ciento, con lo cual la inflación general se situó en 6.17 por ciento, es decir, 0.13 puntos porcentuales mayor al registrado el mes anterior, informó el Banco de México.
El incremento anualizado de la canasta básica subió 7.72 por ciento, su mayor nivel desde 1990.
El incremento del IPC se debió principalmente por la trayectoria del componente no subyacente, donde los precios de los productos agrícolas y en especial los de las frutas y verduras presentaron mayores tasas de crecimiento.
En tanto, la inflación subyacente, considerada el mejor parámetro para medir la variación de precios porque elimina algunos productos de alta volatilidad, se ubicó en5.81 por ciento, lo que significó una reducción de 0.02 puntos porcentuales respecto al dato reportado en marzo pasado.
“La subyacente está cediendo a las presiones por el tipo de cambio, el cual ha registrado niveles más cercanos a su tendencia normal. Esto y la contracción de la economía serán los elementos predominantes en la decisión de política monetaria del Banco de México”, indicó Ixe en un análisis.
“Los precios de mercancías a alimentos procesados con alzas mayores a su tendencia sugiere que aún se efectúan por costos cambiarios mayores; y en servicios distintos a vivienda y educación se registró una inflación mucho menor a lo previsto, lo que apunta a un menor crecimiento económico”, coincidieron analistas de Banamex.
El Banco de México explicó que por componentes, el rubro de alimentos, bebidas y tabaco empujó la inflación, al registrar una variación de 1.47 por ciento; en segundo lugar, el concepto de salud y cuidado personal presionó los precios al ubicarse en 0.78 por ciento.
En el cuarto mes del año, los productos que mayor variación experimentaron respecto al mes anterior fueron jitomate, con una variación de 59.17 por ciento; aguacate 19.14; tortilla de maíz, 1.94; huevo, 1.67; cerveza, 2.24, y el servicio telefónico local, con 2.67 por ciento.
En contraste, los productos que cedieron a las presiones inflacionarias fueron electricidad, limón, servicios turísticos en paquete, calabacita, gasolina de bajo octanaje, relojes, joyería y bisutería, papaya y manzana.
El análisis de Banamex resaltó que los resultados apuntan a una baja, con lo cual se alcanzará una inflación cercana a 5.6 por ciento anual en los próximos tres meses, y para cerrar el año en cerca de 3.8 por ciento.
“No descartamos una menor inflación a la prevista para el fin de año, dada la fuerte disminución en la demanda de servicios que puede causar la emergencia sanitaria y trasladarse a otros precios en la medida en que se haya afectado el crecimiento económico y el empleo”, concluyó.
Claves
En recuperación
• De acuerdo con el Banco de México, se espera que la inflación retome una tendencia a la baja a partir de mayo, que se vería reforzada gradualmente por menores tasas de crecimiento en los precios de los alimentos procesados y de los productos pecuarios.
• Se prevé que los precios de los energéticos continúen sin cambio en lo que resta del año, lo cual además de reflejarse de manera directa en la medición de la inflación, se espera a que coadyuve a atenuar las presiones de costos sobre las empresas.
• El instituto central considera que al cierre de 2009 la inflación se ubicará en un rango entre 4 y 4.50 por ciento; y hacia el próximo año se espera que los precios cedan para que converja hacia su meta de 3 por ciento.
Ya nos cargó el payaso, me caegulp!
