Alfredito Ortega Pañiagua
Bovino maduro
- Desde
- 20 Ago 2008
- Mensajes
- 176
- Tema Autor
- #1
Una de mis buenas facultades es: escuchar, invierto mucho tiempo escuchando lo que me cuentan, no solo lo oigo, en realidad pongo mucha atención, afino los detalles cuando lo considero necesario y así es como logro recopilar mucha mas información.
No es lo que están pensando, no lo hago a propósito, es natural en mi, hasta que le empece a poner atención no había reparado en esta "variación", ya que según mis amigas me cuentan, los hombres jamas escuchan.
Y es verdad, andan por ahí varios que se creen un regalo de Dios para las mujeres, con una idea fija en la mente: SEXO, (caballero si uds es uno de esos créame que no tengo nada en su contra, solo estoy describiendo al individuo).
Muchos hablan de la gran verga que tienen, que son capases de tener 3 o 4 encuentros en una jornada, y BIEN POR ELLOS, yo pienso diferente, no soy mucho de una cogedera de una sola noche (bueno, si sale pues no me opongo pero no es lo que busco).
Verán, el sexo de una noche es algo normalmente por atracción, generalmente lleno de desconfianza y se van realizando ajustes para que el acto termine, normalmente (aunque en estos tiempos ya no es generalmente) la mujer deja que el hombre lleve la batuta del evento, tiene que escoger el lugar, las posiciones y pues, dirigir esa orquesta, cruzando los dedos de poder tener satisfacción.
Hoy por hoy a los hombres les sigue gustando saber que son los que conquistan, entran al bar o salón buscando que "cazar", con el ego mas grande que su billetera se vanaglorian por el éxito conseguido cuando logran ligar a alguna mujer con la posibilidad de disfrutar de sus encantos.
Yo, soy de otra escuela, quizá una muy reducida, empezando porque no frecuento discotecas ni soy fanático del alcohol, no ando en plan de "cacería" constante aunque si admiro a una bella mujer cuando se lo merece.
Dedico mi tiempo a escuchar, veo en el super, en el banco, cuando me estoy tomando un café a una mujer que se vea sola, o que este sola, la saludo amablemente; le pregunto si desea compañía, si acepta empezamos a charlar.
Ella pondrá el tema, no pregunto su nombre porque le ofrecí compañía momentánea si al paso del tiempo ella pregunta el mio, yo preguntare el suyo, mantengo mi distancia, la escucho, veo como habla, sus gestos, su ropa, busco sentir su aroma sin invadir su espacio personal, en realidad aprecio lo que ella preparo para ser observado por la gente.
Podemos hablar de cualquier cosa que quiera, desde música, teatro, cine, opera, personajes de la historia, actualidad, moda, vehículos, revistas, chismes de los famosos, tipos de comida, HOMBRES si quieren, el trafico, el clima, libros, noticias, problemas, consejos prácticos, mascotas, jardinería, carpintería, ciencia, religión... en fin, el tema que ella guste, o bien esperar que le proponga yo un tema y si se siente cómoda partir de ahí.
En ese tiempo veré donde coloca sus manos, de que forma toma su bebida o si voltea a ver lo que estaba haciendo, si esta atenta a su celular o a alguien a quien esperaba, si noto que capte su interesa sigo adelante sobre el tema que abordamos, si me interesa conocerla ahondare mas y mas, si no dejare pasar el momento (vamos acéptenlo hombres no podrán pasar hablando mucho tiempo con una mujer que no tiene nada interesante que decir y menos si no se ve como quieren), no le he preguntado hasta acá en donde trabaja, ni donde vive y menos si me da su numero de teléfono, facebook, o cuenta en twitter, no quiero que se sienta amenazada, eso se lo preguntare después, si es que noto que me ha tomado confianza.
Soy capaz de reírme de mi mismo también soy un duro critico del machismo y de los hombres promedio (ya les hable antes, de los que se creen un regalo de Dios para las mujeres), la tratare de hacer sentir cómoda y si en algún momento ella me indica que estamos hablando mucho de ella, solo le preguntare que es lo que le gusta hacer, luego le contare que es lo que a mi me gusta hacer, probablemente no me lo crea, nos reiremos un rato y divagaremos sobre otro tema.
No le preguntare si tiene pareja o no, en este momento no es importante, nos estamos conociendo, como me ha parecido interesante mencionare algo sobre lo que esta bebiendo, y le contare una historia asociada al tema, para este momento ella quizá ya busco en mi mano alguna argolla, o anillo que le indique si estoy casado o no, y me preguntara por mi pareja, "no tengo, soy demasiado aburrido", le contestare y esperare su reacción.
Ella reirá llevándose su mano a la boca, acá veré mi celular y dependiendo si me siento a gusto le diré que lo pondré en mudo para que no nos interrumpan, que me siento muy a gusto hablando con ella, si ella me sigue la corriente o ya sea que me diga que por su trabajo no puede poner en mudo su celular, iré por buen camino.
Quizá tomemos algo mas ahí, le haré saber que me ha hecho sentir que el tiempo no importa, agradezco su tiempo y que espero que yo la haya entretenido de una forma productiva ha sido un placer conocerla y me gustaría mucho volver a platicar con ella, seguirla conociendo si ella esta de acuerdo.
Ella accede intercambiamos datos y quedamos de vernos en otra ocasión, pero acuerdo una cita cuando estamos por despedirnos la invito el fin de semana a un lugar publico para comer, ella accede.
La llamo dos días antes para saludarla y darle a entender que la cita del sábado marcha correctamente, procure llamarla a la hora de almuerzo para no interrumpir sus actividades y ahí aprovecho para enterarme en que trabaja y tener un tema el sábado para iniciar conversación, procuro hacer la cita y apartar lugar ese mismo día para no tener tropiezos, no le pregunte si pasaba por ella para que no piense que trato de saber donde vive.
El día del almuerzo llego temprano, pido un vaso de agua para empezar, recorro el menú antes que llegue, le indico que si me deja pagare la cuenta pero que no es presión, que podemos dividirla si eso la hace sentir mejor, al terminar la cena insisto en pagar el almuerzo, que ella me puede invitar a una cena si con eso quiere contribuir. Así arreglo la siguiente cita.
Me sigue interesando, como aborda los temas y me gusta que poco a poco se va sintiendo mas y mas confiada, luego de varias citas se abre, me cuenta su vida sentimental, me habla de sus novios, citas, trabajo y familia, su mejor amiga, y las presiones que ha y que vive a diario.
La escucho, ahora ya se cual es su color favorito, su vino favorito, su artista, comida, la hora que va al gimnasio, donde estudio que le apasiona y que le incomoda.
A estas alturas ya conozco su casa y la paso a recoger para nuestra cita, ella sabe de mi cuanto gusta en saber, solo tiene que preguntar, al regresar la acompaño a su puerta como es costumbre, lleva un vestido encantador color azul, su espalda descubierta con una chalina sobre sus hombros, una pequeña bolsa que hace juego, el color de labios que lleva me invitan a morderlos y ese delineador hace maravillas resaltando sus ya negros ojos. Me encanta lo que se hizo en el cabello y se lo hice saber, esa noche su aroma es diferente, sus manos han estado rosan dome sin parar. Noto sus zapatos y la perfecta manicura que tiene en sus pies y manos, es un trabajo especial el de esa noche, este cuidado ha venido mejorando conforme hemos estado saliendo.
Aun es temprano, casi las 10, coloco mi mano en su espalda baja y le doy un beso tierno en la mejía, siento como me rodea con sus manos, sus ojos brillan, su boca esta entreabierta, "me encantas" le digo y le doy un beso, un beso suave que acaricia sus labios, sin lengua, sin ser invasivo, como pidiendo permiso.
Termino el beso, la veo, y le doy otro, abro mi boca para ver si su lengua entra en la mia, eso hace, recorro con mis manos su espalda, cuido que su chalina no caiga al suelo pero estoy perdiendo el control, sentir su piel suave dispara en mi a un salvaje que lo único que quiere es verla sin ese majestuoso vestido... los besos se hacen mas apasionados, no logramos abrir la puerta, a ella no le tiemblan las manos pero como las tiene ocupadas no encuentra la manecilla.
Se lo que le gusta, nos tumbamos en su sofá, mi saco, camisa y playera vuelan por los aires, también su vestido y zapatos no me dice nada, sus ojos están gritando y su cuerpo los siguen, veo su respiracion, siento su aliento, la veo en su lenceria, me encanta lo que veo y se lo digo.
Le muestro el preservativo, ella entrecierra los ojos como diciéndome "picaron", entre besos y quitadas de ropa llegamos a su cama, se lo que le gusta, ya me lo había hecho saber, se que lleva tiempo sin un orgasmo y planeo darle dos me llevara toda la noche pero que importa, ella me gusta quiero hacerla sentir especial.
Me dedico a recorrerla con mis dedos, lentamente... muy lentamente, me coloco entre sus piernas y lamo su clítoris, primero de arriba a abajo, luego la penetro con mi lengua, muerdo sus labios suavemente, lamo su clítoris de lado a lado, con diferentes fuerzas, la vuelvo a penetrar, coloco mis manos en sus pechos también por momentos aprieto bien sus nalgas, expongo su clítoris y lo veo y casi puedo asegurar que esta palpitando, continuo mordiéndolo, lamiéndolo fuerte, suave, fuerte, suave, fuerte, suave... sabe Dios por cuanto tiempo, intercambiando mis manos de sus nalgas a sus pechos, a su cara, piernas, trato de tocarla toda, sin dejar de mas ajear su clítoris.
Veo como pierde el control, se arquea hasta parece que no sabe lo que es, tiene sus manos en su cara, esta riendo, acaba de tener un orgasmo, fuerte y claro;
incontenible
esperado
ella cree que esta satisfecha...
Pero continuo, no toco ya su clítoris porque se que esta sensible, recorro su abdomen con mi boca con pequeños mordiscos veo que no puede abrir los ojos, podrá estar pensando en lo que paso, en cuanto tiempo hace que lo sintió... suavemente muerdo sus pezones, están duros, su cuello me abraza y me rodea con sus piernas y es ahí cuando la penetro, procure que mi cabeza tocara su clítoris que lo sintiera antes de penetrarla, lentamente me coloco dentro de ella, ella abrió los ojos llenos de sorpresa, detecto que se le había olvidado que aun no la había penetrado, se arquea de placer, la sorpresa ya paso y ahora disfrutara esto, coloco mis manos detrás del arco que ha formado su espalda y la cargo sobre mi, la he sentado sobre mis piernas y sus pechos quedan a la altura para ser mordidos, la abrazo y en cada levante es una penetrada la hago descender lentamente para recorrer sus paredes vaginales, cuando la frecuencia se hace mas corta la tumbo contra la cama y la embisto primero lento, luego fuerte y rápido luego otra vez lento, me tiene excitado completamente la forma en como veo que lo disfruta, ella esta a punto de perder el control nuevamente pero en una forma distinta, es un orgasmo intenso el que esta apunto de sufrir, similar al anterior pero con su variación, ahora estoy dentro de ella,
me toma por mi espalda y me pega a ella, estoy sudando, ella también, me abraza fuertemente, yo enrollo mis piernas con la de ella y la estiro ella lucha contra el estirón trata de comprimirse, gime, trata de ser discreta, la primera vez con una persona nueva es así, aprecio como ese orgasmo nace llega a su punto mas alto y vuelve a recuperar la cordura, pero yo la embisto de nuevo, ahora ella recuerda que yo no he eyaculado, me deja embestirla otras veces mas y cuando ve que mi reacción esta por llegar, se mete debajo de mis piernas hasta que quedo casi sentado en su pecho, y me empieza a chupar, masturbar fuertemente, sabe que me gusta, lo hemos hablado
deja que eyacule sobre su rostro, la veo feliz, satisfecha y yo lo estoy también, vi como nacieron sus dos orgasmos y la forma en como los disfruto, bromeamos sobre la cama, hacemos los ajustes de almohadas, nos acariciamos frotando nuestros cuerpos, pese a que estamos cansados nos sentimos bien, ella se siente confiada conmigo y yo con ella noto que esta amaneciendo, son casi las 4:30 am, doy gracias porque es domingo.
Quizá no es el sexo mas sucio que he tenido, ni el mas rudo pero seguro seguro habrá mas de una vez, y muy probablemente la próxima sea en algún elevador, o en un parqueo, o sobre la mesa de su oficina y esto haya salido de su mente ya que aun no estoy seguro si pueda tolerar las que salgan de la mia.
No es lo que están pensando, no lo hago a propósito, es natural en mi, hasta que le empece a poner atención no había reparado en esta "variación", ya que según mis amigas me cuentan, los hombres jamas escuchan.
Y es verdad, andan por ahí varios que se creen un regalo de Dios para las mujeres, con una idea fija en la mente: SEXO, (caballero si uds es uno de esos créame que no tengo nada en su contra, solo estoy describiendo al individuo).
Muchos hablan de la gran verga que tienen, que son capases de tener 3 o 4 encuentros en una jornada, y BIEN POR ELLOS, yo pienso diferente, no soy mucho de una cogedera de una sola noche (bueno, si sale pues no me opongo pero no es lo que busco).
Verán, el sexo de una noche es algo normalmente por atracción, generalmente lleno de desconfianza y se van realizando ajustes para que el acto termine, normalmente (aunque en estos tiempos ya no es generalmente) la mujer deja que el hombre lleve la batuta del evento, tiene que escoger el lugar, las posiciones y pues, dirigir esa orquesta, cruzando los dedos de poder tener satisfacción.
Hoy por hoy a los hombres les sigue gustando saber que son los que conquistan, entran al bar o salón buscando que "cazar", con el ego mas grande que su billetera se vanaglorian por el éxito conseguido cuando logran ligar a alguna mujer con la posibilidad de disfrutar de sus encantos.
Yo, soy de otra escuela, quizá una muy reducida, empezando porque no frecuento discotecas ni soy fanático del alcohol, no ando en plan de "cacería" constante aunque si admiro a una bella mujer cuando se lo merece.
Dedico mi tiempo a escuchar, veo en el super, en el banco, cuando me estoy tomando un café a una mujer que se vea sola, o que este sola, la saludo amablemente; le pregunto si desea compañía, si acepta empezamos a charlar.
Ella pondrá el tema, no pregunto su nombre porque le ofrecí compañía momentánea si al paso del tiempo ella pregunta el mio, yo preguntare el suyo, mantengo mi distancia, la escucho, veo como habla, sus gestos, su ropa, busco sentir su aroma sin invadir su espacio personal, en realidad aprecio lo que ella preparo para ser observado por la gente.
Podemos hablar de cualquier cosa que quiera, desde música, teatro, cine, opera, personajes de la historia, actualidad, moda, vehículos, revistas, chismes de los famosos, tipos de comida, HOMBRES si quieren, el trafico, el clima, libros, noticias, problemas, consejos prácticos, mascotas, jardinería, carpintería, ciencia, religión... en fin, el tema que ella guste, o bien esperar que le proponga yo un tema y si se siente cómoda partir de ahí.
En ese tiempo veré donde coloca sus manos, de que forma toma su bebida o si voltea a ver lo que estaba haciendo, si esta atenta a su celular o a alguien a quien esperaba, si noto que capte su interesa sigo adelante sobre el tema que abordamos, si me interesa conocerla ahondare mas y mas, si no dejare pasar el momento (vamos acéptenlo hombres no podrán pasar hablando mucho tiempo con una mujer que no tiene nada interesante que decir y menos si no se ve como quieren), no le he preguntado hasta acá en donde trabaja, ni donde vive y menos si me da su numero de teléfono, facebook, o cuenta en twitter, no quiero que se sienta amenazada, eso se lo preguntare después, si es que noto que me ha tomado confianza.
Soy capaz de reírme de mi mismo también soy un duro critico del machismo y de los hombres promedio (ya les hable antes, de los que se creen un regalo de Dios para las mujeres), la tratare de hacer sentir cómoda y si en algún momento ella me indica que estamos hablando mucho de ella, solo le preguntare que es lo que le gusta hacer, luego le contare que es lo que a mi me gusta hacer, probablemente no me lo crea, nos reiremos un rato y divagaremos sobre otro tema.
No le preguntare si tiene pareja o no, en este momento no es importante, nos estamos conociendo, como me ha parecido interesante mencionare algo sobre lo que esta bebiendo, y le contare una historia asociada al tema, para este momento ella quizá ya busco en mi mano alguna argolla, o anillo que le indique si estoy casado o no, y me preguntara por mi pareja, "no tengo, soy demasiado aburrido", le contestare y esperare su reacción.
Ella reirá llevándose su mano a la boca, acá veré mi celular y dependiendo si me siento a gusto le diré que lo pondré en mudo para que no nos interrumpan, que me siento muy a gusto hablando con ella, si ella me sigue la corriente o ya sea que me diga que por su trabajo no puede poner en mudo su celular, iré por buen camino.
Quizá tomemos algo mas ahí, le haré saber que me ha hecho sentir que el tiempo no importa, agradezco su tiempo y que espero que yo la haya entretenido de una forma productiva ha sido un placer conocerla y me gustaría mucho volver a platicar con ella, seguirla conociendo si ella esta de acuerdo.
Ella accede intercambiamos datos y quedamos de vernos en otra ocasión, pero acuerdo una cita cuando estamos por despedirnos la invito el fin de semana a un lugar publico para comer, ella accede.
La llamo dos días antes para saludarla y darle a entender que la cita del sábado marcha correctamente, procure llamarla a la hora de almuerzo para no interrumpir sus actividades y ahí aprovecho para enterarme en que trabaja y tener un tema el sábado para iniciar conversación, procuro hacer la cita y apartar lugar ese mismo día para no tener tropiezos, no le pregunte si pasaba por ella para que no piense que trato de saber donde vive.
El día del almuerzo llego temprano, pido un vaso de agua para empezar, recorro el menú antes que llegue, le indico que si me deja pagare la cuenta pero que no es presión, que podemos dividirla si eso la hace sentir mejor, al terminar la cena insisto en pagar el almuerzo, que ella me puede invitar a una cena si con eso quiere contribuir. Así arreglo la siguiente cita.
Me sigue interesando, como aborda los temas y me gusta que poco a poco se va sintiendo mas y mas confiada, luego de varias citas se abre, me cuenta su vida sentimental, me habla de sus novios, citas, trabajo y familia, su mejor amiga, y las presiones que ha y que vive a diario.
La escucho, ahora ya se cual es su color favorito, su vino favorito, su artista, comida, la hora que va al gimnasio, donde estudio que le apasiona y que le incomoda.
A estas alturas ya conozco su casa y la paso a recoger para nuestra cita, ella sabe de mi cuanto gusta en saber, solo tiene que preguntar, al regresar la acompaño a su puerta como es costumbre, lleva un vestido encantador color azul, su espalda descubierta con una chalina sobre sus hombros, una pequeña bolsa que hace juego, el color de labios que lleva me invitan a morderlos y ese delineador hace maravillas resaltando sus ya negros ojos. Me encanta lo que se hizo en el cabello y se lo hice saber, esa noche su aroma es diferente, sus manos han estado rosan dome sin parar. Noto sus zapatos y la perfecta manicura que tiene en sus pies y manos, es un trabajo especial el de esa noche, este cuidado ha venido mejorando conforme hemos estado saliendo.
Aun es temprano, casi las 10, coloco mi mano en su espalda baja y le doy un beso tierno en la mejía, siento como me rodea con sus manos, sus ojos brillan, su boca esta entreabierta, "me encantas" le digo y le doy un beso, un beso suave que acaricia sus labios, sin lengua, sin ser invasivo, como pidiendo permiso.
Termino el beso, la veo, y le doy otro, abro mi boca para ver si su lengua entra en la mia, eso hace, recorro con mis manos su espalda, cuido que su chalina no caiga al suelo pero estoy perdiendo el control, sentir su piel suave dispara en mi a un salvaje que lo único que quiere es verla sin ese majestuoso vestido... los besos se hacen mas apasionados, no logramos abrir la puerta, a ella no le tiemblan las manos pero como las tiene ocupadas no encuentra la manecilla.
Se lo que le gusta, nos tumbamos en su sofá, mi saco, camisa y playera vuelan por los aires, también su vestido y zapatos no me dice nada, sus ojos están gritando y su cuerpo los siguen, veo su respiracion, siento su aliento, la veo en su lenceria, me encanta lo que veo y se lo digo.
Le muestro el preservativo, ella entrecierra los ojos como diciéndome "picaron", entre besos y quitadas de ropa llegamos a su cama, se lo que le gusta, ya me lo había hecho saber, se que lleva tiempo sin un orgasmo y planeo darle dos me llevara toda la noche pero que importa, ella me gusta quiero hacerla sentir especial.
Me dedico a recorrerla con mis dedos, lentamente... muy lentamente, me coloco entre sus piernas y lamo su clítoris, primero de arriba a abajo, luego la penetro con mi lengua, muerdo sus labios suavemente, lamo su clítoris de lado a lado, con diferentes fuerzas, la vuelvo a penetrar, coloco mis manos en sus pechos también por momentos aprieto bien sus nalgas, expongo su clítoris y lo veo y casi puedo asegurar que esta palpitando, continuo mordiéndolo, lamiéndolo fuerte, suave, fuerte, suave, fuerte, suave... sabe Dios por cuanto tiempo, intercambiando mis manos de sus nalgas a sus pechos, a su cara, piernas, trato de tocarla toda, sin dejar de mas ajear su clítoris.
Veo como pierde el control, se arquea hasta parece que no sabe lo que es, tiene sus manos en su cara, esta riendo, acaba de tener un orgasmo, fuerte y claro;
incontenible
esperado
ella cree que esta satisfecha...
Pero continuo, no toco ya su clítoris porque se que esta sensible, recorro su abdomen con mi boca con pequeños mordiscos veo que no puede abrir los ojos, podrá estar pensando en lo que paso, en cuanto tiempo hace que lo sintió... suavemente muerdo sus pezones, están duros, su cuello me abraza y me rodea con sus piernas y es ahí cuando la penetro, procure que mi cabeza tocara su clítoris que lo sintiera antes de penetrarla, lentamente me coloco dentro de ella, ella abrió los ojos llenos de sorpresa, detecto que se le había olvidado que aun no la había penetrado, se arquea de placer, la sorpresa ya paso y ahora disfrutara esto, coloco mis manos detrás del arco que ha formado su espalda y la cargo sobre mi, la he sentado sobre mis piernas y sus pechos quedan a la altura para ser mordidos, la abrazo y en cada levante es una penetrada la hago descender lentamente para recorrer sus paredes vaginales, cuando la frecuencia se hace mas corta la tumbo contra la cama y la embisto primero lento, luego fuerte y rápido luego otra vez lento, me tiene excitado completamente la forma en como veo que lo disfruta, ella esta a punto de perder el control nuevamente pero en una forma distinta, es un orgasmo intenso el que esta apunto de sufrir, similar al anterior pero con su variación, ahora estoy dentro de ella,
me toma por mi espalda y me pega a ella, estoy sudando, ella también, me abraza fuertemente, yo enrollo mis piernas con la de ella y la estiro ella lucha contra el estirón trata de comprimirse, gime, trata de ser discreta, la primera vez con una persona nueva es así, aprecio como ese orgasmo nace llega a su punto mas alto y vuelve a recuperar la cordura, pero yo la embisto de nuevo, ahora ella recuerda que yo no he eyaculado, me deja embestirla otras veces mas y cuando ve que mi reacción esta por llegar, se mete debajo de mis piernas hasta que quedo casi sentado en su pecho, y me empieza a chupar, masturbar fuertemente, sabe que me gusta, lo hemos hablado
deja que eyacule sobre su rostro, la veo feliz, satisfecha y yo lo estoy también, vi como nacieron sus dos orgasmos y la forma en como los disfruto, bromeamos sobre la cama, hacemos los ajustes de almohadas, nos acariciamos frotando nuestros cuerpos, pese a que estamos cansados nos sentimos bien, ella se siente confiada conmigo y yo con ella noto que esta amaneciendo, son casi las 4:30 am, doy gracias porque es domingo.
Quizá no es el sexo mas sucio que he tenido, ni el mas rudo pero seguro seguro habrá mas de una vez, y muy probablemente la próxima sea en algún elevador, o en un parqueo, o sobre la mesa de su oficina y esto haya salido de su mente ya que aun no estoy seguro si pueda tolerar las que salgan de la mia.