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- #1
Antes de iniciar con el relato, daré una breve descripción de la casa que tenemos mi esposa y yo, ya que ahí se llevaron a cabo los hechos. Es una casa de dos pisos, un patio delantero con garage abiertos, tenemos en todas las ventanas cortinas blackout porque no nos gusta que nos moleste el sol cuando estamos de descanso, si están cerradas la casa es muy oscura. El patio trasero es muy privado, una barda alta (unos 4 metros de alto), y mandamos a colocar unos paneles reflectantes de techo (solo se puede ver hacia fuera, los vecinos no pueden ver hacia el patio trasero).
Bueno, el relato
Después de tanto tiempo de no coincidir con los amigos, al fin se nos dio tener unos días libres para un fin de semana y ponernos al tanto de como iban nuestras vidas, así que los invitamos el viernes a comer a la casa y beber un rato, todos accedieron, fueron 6 amigos de la universidad incluido el sujeto de mi primer y segundo relatos. La fiesta transcurrió normalmente, ya para terminar, mi esposa estaba un poco bebida así que decidió retirarse a dormir, dejándome con la atención de los tres amigos que quedaban, uno de ellos el sujeto, quien estaba bastante borracho. Pasó una hora y dos de los tres decidieron retirarse, yo les pedí que se llevarán al sujeto, que lo pasarán a dejar a su casa, pero ellos dijeron que no podían que ya era tarde, que mejor se quedara en la casa, ni modo, se quedó, ya lo colocamos en el sofá y le baje unas sábanas para que durmiera tranquilo.
Durante la noche me surgió la idea que podría hacer que sucediera otra acción como el permiso que le di a mi esposa, pero está vez no le diría a mi esposa, debería salir de ella.
Así que a la mañana siguiente (que era día de lavado) mi esposa despertó usando sólo una playera mía, que llevaba apenas al inicio de sus nalgas tan ricas, blanquitas, firmes y paraditas, me preguntó cómo estuvo la fiesta, a lo que le dije que solo demoró una hora más después de que subió. Ella me dijo que iba a lavar toda la ropa, pero que primero iba al baño.
Me ofrecí a bajar la ropa y le dije que como era toda la ropa, pues me llevaba mi playera, así que se la quité dejándola desnuda. Bajé la ropa y la puse rápidamente en la lavadora, inmediatamente fui a la sala y le di un golpecillo al sujeto, diciéndole que como seguía, que ya era temprano (eran las 9:00 am), no se notaba por lo oscura de la casa. Después de eso me fui al comedor que quedaba justo frente a la sala, quería observar todo.
Mi esposa bajo diciéndome que no arrancara la lavadora, que se me había olvidado su bata, nuestro amigo ya despierto observo como bajaba completamente desnuda mi esposa, sus ricos pechos se movían en hipnotizan sus pezones rosa. En seguida el le dió los buenos días y le dijo -hola, está bien que ya nos vimos así pero puedes ponerte algo no? Y se rió. Ella peló los ojos y creo que en su mente me maldijo jajajaja.
Le dijo, bueno, no hay nada que no hayas visto o probado, así que pues disfruta de la vista, yo me escondí para que no fuera a golpearme y ver que se le ocurría estando sola. Fue hacia el cuarto de lavado e inmediatamente yo fui a decirle al sujeto que aprovechara, que buscara una segunda oportunidad de poseer a mi esposa y me fui a esconder a mi lugar nuevamente. Ella regresó, seguía desnuda, y le preguntó que donde estaba yo y el dijo que había ido a comprar el desayuno, el enseguida se desnudó y le dijo a mi esposa si podía lavar también su ropa.
Ella lo vio y le dijo - es lo único que quieres que lave?- y acarició su pene que ya estaba morcillon, enseguida se puso en cuclillas para meter ese miembro en su boca y hacerle un oral como ella sabe, al abrir sus piernas pude ver lo empapada que estaba ya, le brillaban los labios que se notaban hinchados y esperando su dosis de reata. El enseguida la levantó y la coloco de frente a la lavadora, levantando su pompa mientras le daba una sonora nalgada sacando un gemido de mi esposa, coloco su miembro en la entrada de su vagina y arremetió con fuerza metiendo todo de un solo golpe, ella disfrutaba mientras el bombeaba a mi esposa, yo me saqué el pene y empecé a pararme, ella empezó a moverse pidiendo más fuerza en las embestidas a lo que es correspondió, no tardó mucho en correrse dejando a mi esposa todavía con ganas. En eso ella dice- amor, sal de ahí y ven a terminar lo que esté no pudo, ya se que estás en la sala- yo salí y coloqué a mi esposa en 4 puntos para embestirla como le gusta mientras ella le hacía oral al otro, buscando revivir su pene. Saqué mi miembro de su vagina y lo dirigí a su orificio trasero, embesti con fuerza y ella soltó el pene del sujeto para soltar un gemido que creo oyeron los vecinos, continúe bombeando hasta que me vine dentro de su trasero, después ella acostó al sujeto y lo montó a sus anchas mientras el sujetaba y magreaba sus pechos, así estuvieron hasta que se corrieron los dos al mismo tiempo. Una vez terminado, mi esposa me dijo que solo lo había hecho por mi, pero que ya no esperara más.
Bueno, el relato
Después de tanto tiempo de no coincidir con los amigos, al fin se nos dio tener unos días libres para un fin de semana y ponernos al tanto de como iban nuestras vidas, así que los invitamos el viernes a comer a la casa y beber un rato, todos accedieron, fueron 6 amigos de la universidad incluido el sujeto de mi primer y segundo relatos. La fiesta transcurrió normalmente, ya para terminar, mi esposa estaba un poco bebida así que decidió retirarse a dormir, dejándome con la atención de los tres amigos que quedaban, uno de ellos el sujeto, quien estaba bastante borracho. Pasó una hora y dos de los tres decidieron retirarse, yo les pedí que se llevarán al sujeto, que lo pasarán a dejar a su casa, pero ellos dijeron que no podían que ya era tarde, que mejor se quedara en la casa, ni modo, se quedó, ya lo colocamos en el sofá y le baje unas sábanas para que durmiera tranquilo.
Durante la noche me surgió la idea que podría hacer que sucediera otra acción como el permiso que le di a mi esposa, pero está vez no le diría a mi esposa, debería salir de ella.
Así que a la mañana siguiente (que era día de lavado) mi esposa despertó usando sólo una playera mía, que llevaba apenas al inicio de sus nalgas tan ricas, blanquitas, firmes y paraditas, me preguntó cómo estuvo la fiesta, a lo que le dije que solo demoró una hora más después de que subió. Ella me dijo que iba a lavar toda la ropa, pero que primero iba al baño.
Me ofrecí a bajar la ropa y le dije que como era toda la ropa, pues me llevaba mi playera, así que se la quité dejándola desnuda. Bajé la ropa y la puse rápidamente en la lavadora, inmediatamente fui a la sala y le di un golpecillo al sujeto, diciéndole que como seguía, que ya era temprano (eran las 9:00 am), no se notaba por lo oscura de la casa. Después de eso me fui al comedor que quedaba justo frente a la sala, quería observar todo.
Mi esposa bajo diciéndome que no arrancara la lavadora, que se me había olvidado su bata, nuestro amigo ya despierto observo como bajaba completamente desnuda mi esposa, sus ricos pechos se movían en hipnotizan sus pezones rosa. En seguida el le dió los buenos días y le dijo -hola, está bien que ya nos vimos así pero puedes ponerte algo no? Y se rió. Ella peló los ojos y creo que en su mente me maldijo jajajaja.
Le dijo, bueno, no hay nada que no hayas visto o probado, así que pues disfruta de la vista, yo me escondí para que no fuera a golpearme y ver que se le ocurría estando sola. Fue hacia el cuarto de lavado e inmediatamente yo fui a decirle al sujeto que aprovechara, que buscara una segunda oportunidad de poseer a mi esposa y me fui a esconder a mi lugar nuevamente. Ella regresó, seguía desnuda, y le preguntó que donde estaba yo y el dijo que había ido a comprar el desayuno, el enseguida se desnudó y le dijo a mi esposa si podía lavar también su ropa.
Ella lo vio y le dijo - es lo único que quieres que lave?- y acarició su pene que ya estaba morcillon, enseguida se puso en cuclillas para meter ese miembro en su boca y hacerle un oral como ella sabe, al abrir sus piernas pude ver lo empapada que estaba ya, le brillaban los labios que se notaban hinchados y esperando su dosis de reata. El enseguida la levantó y la coloco de frente a la lavadora, levantando su pompa mientras le daba una sonora nalgada sacando un gemido de mi esposa, coloco su miembro en la entrada de su vagina y arremetió con fuerza metiendo todo de un solo golpe, ella disfrutaba mientras el bombeaba a mi esposa, yo me saqué el pene y empecé a pararme, ella empezó a moverse pidiendo más fuerza en las embestidas a lo que es correspondió, no tardó mucho en correrse dejando a mi esposa todavía con ganas. En eso ella dice- amor, sal de ahí y ven a terminar lo que esté no pudo, ya se que estás en la sala- yo salí y coloqué a mi esposa en 4 puntos para embestirla como le gusta mientras ella le hacía oral al otro, buscando revivir su pene. Saqué mi miembro de su vagina y lo dirigí a su orificio trasero, embesti con fuerza y ella soltó el pene del sujeto para soltar un gemido que creo oyeron los vecinos, continúe bombeando hasta que me vine dentro de su trasero, después ella acostó al sujeto y lo montó a sus anchas mientras el sujetaba y magreaba sus pechos, así estuvieron hasta que se corrieron los dos al mismo tiempo. Una vez terminado, mi esposa me dijo que solo lo había hecho por mi, pero que ya no esperara más.