Estamos tu y yo en un parque sentados en una banca, platicamos de una y mil cosas, tu llevas un hermoso vestido blanco, de tela fresca y suave, muy suave al tacto, un blanco brillante, es de tirantes que se amarran en tu cuello, pues la espalda queda libre, tienes un gran escote que llega casi hasta tu cintura. Tu pelo està suelto, cae por tus hombros y de cuando en cuando tu lo quitas de tu cara, pues cuando la mueves o te ries algunos mechones caen por tu frente. llevas unas sandalias ligeras, delgadas, que te ayudan a protegerte de las piedrecillas del suelo, pero que son muy comodas. Tus senos se sientes libres, se miran moverse con tu risa, con tus cambios de postura, lo que me hace pensar que no llevas sostèn.
Yo estoy vestido de manera casual, un pantalon azul marino con pinzas al frente, una camisa ligera de algodon desfajada, y unas sandalias de piel, tambièn estoy comodo, pues es un dia caluroso, no hace frio. Sentados en la banca, platicamos y nos tomamos de la mano, estamos extasiados contemplandonos, en algunos momentos me inclino hacia ti y te beso, te beso con suavidad, como se besa a una persona que se quiere mucho, te beso y luego te digo al odio que me deleita tu presencia en ese dia de descanso, te agradezco que estes sentada conmigo en el parque; nuestra banca esta bajo la sombra protectora de un árbol, por lo que el lugar es fresco, agradable.
El tiempo va pasando y poco a poco la gente que paseaba en bicicleta se va marchando, los niños que jugaban van desapareciendo y en el ocaso el sol se oculta. Nos ponemos de pie para marcharnos, vamos caminando hacia nuestras casas; para acortar distancias cruzamos entre las amplieas zonas empastadas, un pasto verde y que huele fresco. En eso, comienza un leve goteo, por lo que deteniendo nuestra marcha, giramos nuestras caras y nos dirigimos hacia un árbol. La lluvia comienza a caer mas fuerte, es una llovizana mas intensa y tu te acercas a mi para que ocupemos menos espacio y protegernos mas de las gotas de agu; asi estando frente uno al otro, nos besamos , te tomo de tu cintura y tu colocas tus manos en mis hombros; nos besamos y acariciamos; poco a poco comenzamos a mojarnos de neustras ropas, por lo que en poco tiempo estamos empapados; por ello, miro como en tu vestido se traslucen tus lindos senos, tus pezones con el agua se han levantado y se muestran firmes, redondos, agradables. LLevo una mano a ellos y los toco, luego, dejo de besarte tus labios para decirte al odio que eres una mujer maravillosa, que eres una mujer hermosa y que me siento afortunado de contar contigo. Beso tu oido y regreso a tu boca, te sonrio y mirando te a los ojos continuo besandote.
Tu juntas tu cuerpo mas hacia el mio, y sientes mi ereccion, entre cruzas tus dedos atràs de mi cuello y te pegas con fuerza hacia mi. Bajo mis manos y poniendolas en tu espalda una y otra en tu lindo trasero, comienzo a acariciarte ahi; tu los disfrutas y lenamente nos vamos dejando caer en el pasto, al lado del árbol.
Una vez acostados, tu estàs con el rostro hacia arriba, mi mano està abajo de tu cuello y con la otra acaricio tus senos, y no dejo de besarte. Voy bajando mi mano y llego a tus piernas, aprovechando que tu vestido es corto, meto mi mano y acaricio tus piernas; las acaricio y llego hasta tu cintura, donde me doy cuenta que traes una linda tanga de hiloblanca, toda humedecida por la lluvia y por la excitacion del momento. Toco tu linda conchita y la siento calientita, tu oprimes mi mano con tus piernas para que me quede ahí. Con mi otra mano, desamarro tu vestido acordonado en tu cuello, bajo la tela y dejo al descubierto tus lindos pechos. Acerco mi boca y los beso, como estan mojados quito las gotas de agua con mi boca y lamo tu pezon, cada uno de tus pezones. Luego tu me empujas, quedando mi espalda unida al pasto; te subes en mi, tu pelo mojado nos cae a ambos en la cara, pero solo nos miramos y sonreimos; luego tu bajas levemente y abriendo mi cremallera, moviendo mi boxer, sacas mi miembro que para entonces està erecto, firme, y pasas una pierna sobre mi cintura para dejar mis piernas enmedio de las tuyas, luego, te sientas en mi pene y comenzamos a hacer el amor, lo hacemos lentamente, sin prisas, aún sabiendo que podrian mirarnos. La lluvia sigue cayendo y forma un manto protector pluvial, lo que nos ayuda a dar rienda suelta a nuestro amor.
Tu sigues bajando y subiendo en mi ereccion, yo acaricio igualmente tus lindos senos disfrutandolos, tu apoyas tus manos en mi pecho y sigues en tus movimientos circulares bajando y subiendo. Despuès de un rato asì, nos damos la vuelta y quedas abajo mio, por lo que ahora comienzo a moverme con mas rapidez, tu tienes tu vestido totamente subido, y por un lado de tu tanga estoy introduciendo mi masculinidad para poseerte. Te digo al oido que te quiero, que te adoro, que me encantas, que eres una mujer hermosa y deseable, luego, te beso y siento tu sabor amoroso en mi boca. Poco a poco nos acercamos al clìmax, nos movemos con mas rapidez y finalmente terminamos. Quedamos uno encima del otro, te doy besos en le mejilla, en tu oido, te beso y te digo que me encanta ser un hombre afortundo por tenerte a mi lado. Tu me respondes con un beso y dejamos que la lluvia siga mojandonos. Luego nos levantamos y tomados de la mano, empapados, nos vamos abrazados apoyando tu cabeza en mi hombro.