unEscritor
Becerro
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- 15 May 2010
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Íbamos en el carro vanessa, ricardo,miguel, larisa y yo. Veníamos de una fiesta, y como siempre, miguel estaba de incoherente con sus copas de más. Vane y Ricardo venían de tortolos bien melosos como la pareja modelo de todos nosotros. Larisa era de esas mujeres que llaman la atención en cuanto entra en cualquier habitación: rubia, alta, tetona, nalgona, y una carita de lolita que simplemente dan ganas de coger con verla.
Miguel y Larisa eran novios, se llevaban bien aunque Larisa y yo nos conocimos primero y había un poco de química. Esa noche, habíamos estado un poco más que amigables el uno con el otro, pero sin pasar nada...hasta que llegó la hora de repartición en el coche.
Larisa venía sentada a mi lado mientras Miguel se le acercaba medio borracho a quererla besar y ella lo besaba y yo venía algo más que caliente y pues mi novia no había podido venir debido a que se había ido con sus amigas a una fiesta, aunque luego me enteré que andaba de perra con José Carlos, pero esa es otra historia. La idea es que veníamos todos riendo y platicando de lo chistoso que había pasado en la fiesta. Vanessa acariciaba la oreja de Ricardo, mientras Larisa se hacía un poco a lado de su novio que ya la empezaba a fastidiar debido a su estado.
Unos momentos después, Larisa pudo tranquilizar a Miguel acariciándole el cabello. Yo seguía excitado con ganas de sexo pero creo que me iba a quedar con las ganas, pero no fue así. Larisa con una mano de lo más tranquila comenzó a sobarme el pene por encima del pantalón. Me encantaba la manera en que la cabrona me sobaba la verga con una mano mientras con la otra acariciaba a su novio que se estaba quedando dormido a su lado. Ella no paraba, me tomaba y rodeaba mi pene con sus dedos y apretaba y soltaba; de repente sólo acariciaba el largo de mi verga que quería estar dentro de su vagina en ese momento hasta terminarle dentro. Ella sólo paraba cuando su novio hacia algún movimiento brusco o decía algo. Estuvo sobándome 20 minutos hasta que tomó con sus yemas de los dedos pulgar e índice mi pene y subía la velocidad. La situación me tenía muy caliente, tenía ganas de echar a miguel por la puerta y cogerme a su novia en el asiento trasero del carro. Larisa seguía con sus movimientos sobre mi verga y cuando sintió que me iba a venir, se detuvo y yo quedé con un dolor de huevos impresionante. La maldita sólo quería calentarme y no podía reclamarle ni nada, y me iba a sentir pendejo al seguir masturbándome con todos ahí. Ella me miró y sonrió burlonamente. Pasaron 10 minutos cuando ya se me había bajado y Lari empezó sobarme el pene, me lo movía a los lados por encima de la tela del pantalón, sus movimientos eran deliciosos y hacían que mi verga comenzara a tomar forma de nuevo, y aunque lo más probable era que me dejara de masturbar cuando sintiera que me iba a venir pues valía la pena el morbo.
El carro iba en silencio hasta que de repente Ricardo nos preguntó si queríamos algo de la tienda de la gasolinera en la que nos detuvimos. El dar el portazo vanessa, que acompañó a su novio, Lari me dice al oído:"sácalo…". Yo inmediatamente me saqué el pene ya con líquido pre seminal en la punta, ella acomodó a su novio contra la puerta del carro y enseguida se metió mi verga en la boca: lo metía y sacaba rápido de sus labios como si quisiera que me viniera ya, no le importó que se escuchará el sonido característico cuando nos chupan el pene con rapidez. Era delicioso ver a esta perra chupándome todo, y rápido antes de que vinieran ricardo y vanessa o se despertara su novio. Me hizo venir en 2 minutos, se trago mi esperma caliente, me miró a los ojos desafiante y se recargó en su novio mientras yo me acomodaba todo y en mi mente repasaba la imagen de Larisa chupándome como toda una profesional. Un minuto después, llegan Ricardo y Vane y al dar el portazo característico de vanessa nuestro miguel se despertó y la puta de larisa lo primero que hizo fue darle un beso en los labios mientras le decía que era una "borrachito" y que ya casi llegaban a casa...
Miguel y Larisa eran novios, se llevaban bien aunque Larisa y yo nos conocimos primero y había un poco de química. Esa noche, habíamos estado un poco más que amigables el uno con el otro, pero sin pasar nada...hasta que llegó la hora de repartición en el coche.
Larisa venía sentada a mi lado mientras Miguel se le acercaba medio borracho a quererla besar y ella lo besaba y yo venía algo más que caliente y pues mi novia no había podido venir debido a que se había ido con sus amigas a una fiesta, aunque luego me enteré que andaba de perra con José Carlos, pero esa es otra historia. La idea es que veníamos todos riendo y platicando de lo chistoso que había pasado en la fiesta. Vanessa acariciaba la oreja de Ricardo, mientras Larisa se hacía un poco a lado de su novio que ya la empezaba a fastidiar debido a su estado.
Unos momentos después, Larisa pudo tranquilizar a Miguel acariciándole el cabello. Yo seguía excitado con ganas de sexo pero creo que me iba a quedar con las ganas, pero no fue así. Larisa con una mano de lo más tranquila comenzó a sobarme el pene por encima del pantalón. Me encantaba la manera en que la cabrona me sobaba la verga con una mano mientras con la otra acariciaba a su novio que se estaba quedando dormido a su lado. Ella no paraba, me tomaba y rodeaba mi pene con sus dedos y apretaba y soltaba; de repente sólo acariciaba el largo de mi verga que quería estar dentro de su vagina en ese momento hasta terminarle dentro. Ella sólo paraba cuando su novio hacia algún movimiento brusco o decía algo. Estuvo sobándome 20 minutos hasta que tomó con sus yemas de los dedos pulgar e índice mi pene y subía la velocidad. La situación me tenía muy caliente, tenía ganas de echar a miguel por la puerta y cogerme a su novia en el asiento trasero del carro. Larisa seguía con sus movimientos sobre mi verga y cuando sintió que me iba a venir, se detuvo y yo quedé con un dolor de huevos impresionante. La maldita sólo quería calentarme y no podía reclamarle ni nada, y me iba a sentir pendejo al seguir masturbándome con todos ahí. Ella me miró y sonrió burlonamente. Pasaron 10 minutos cuando ya se me había bajado y Lari empezó sobarme el pene, me lo movía a los lados por encima de la tela del pantalón, sus movimientos eran deliciosos y hacían que mi verga comenzara a tomar forma de nuevo, y aunque lo más probable era que me dejara de masturbar cuando sintiera que me iba a venir pues valía la pena el morbo.
El carro iba en silencio hasta que de repente Ricardo nos preguntó si queríamos algo de la tienda de la gasolinera en la que nos detuvimos. El dar el portazo vanessa, que acompañó a su novio, Lari me dice al oído:"sácalo…". Yo inmediatamente me saqué el pene ya con líquido pre seminal en la punta, ella acomodó a su novio contra la puerta del carro y enseguida se metió mi verga en la boca: lo metía y sacaba rápido de sus labios como si quisiera que me viniera ya, no le importó que se escuchará el sonido característico cuando nos chupan el pene con rapidez. Era delicioso ver a esta perra chupándome todo, y rápido antes de que vinieran ricardo y vanessa o se despertara su novio. Me hizo venir en 2 minutos, se trago mi esperma caliente, me miró a los ojos desafiante y se recargó en su novio mientras yo me acomodaba todo y en mi mente repasaba la imagen de Larisa chupándome como toda una profesional. Un minuto después, llegan Ricardo y Vane y al dar el portazo característico de vanessa nuestro miguel se despertó y la puta de larisa lo primero que hizo fue darle un beso en los labios mientras le decía que era una "borrachito" y que ya casi llegaban a casa...