Hola!

Registrándote como bakuno podrás publicar, compartir y comunicarte en privado con otros bakuos :D

Regístrame ya!

¿Por qué el Socialismo? - Albert Einstein

Christian01

Bovino Milenario
Desde
25 Jul 2008
Mensajes
1.008
7927_156232974714_153696014714_3665596_4099197_n.jpg


¿Debe quien no es un experto en cuestiones económicas y sociales opinar sobre el socialismo? Por una serie de razones creo que sí.

Permítasenos primero considerar la cuestión desde el punto de vista del conocimiento científico. Puede parecer que no haya diferencias metodológicas esenciales entre la astronomía y la economía: los científicos en ambos campos procuran descubrir leyes de aceptabilidad general para un grupo circunscrito de fenómenos para hacer la interconexión de estos fenómenos tan claramente comprensible como sea posible. Pero en realidad estas diferencias metodológicas existen. El descubrimiento de leyes generales en el campo de la economía es difícil porque la observación de fenómenos económicos es afectada a menudo por muchos factores que son difícilmente evaluables por separado. Además, la experiencia que se ha acumulado desde el principio del llamado período civilizado de la historia humana —como es bien sabido— ha sido influida y limitada en gran parte por causas que no son de ninguna manera exclusivamente económicas en su origen. Por ejemplo, la mayoría de los grandes estados de la historia debieron su existencia a la conquista. Los pueblos conquistadores se establecieron, legal y económicamente, como la clase privilegiada del país conquistado. Se aseguraron para sí mismos el monopolio de la propiedad de la tierra y designaron un sacerdocio de entre sus propias filas. Los sacerdotes, con el control de la educación, hicieron de la división de la sociedad en clases una institución permanente y crearon un sistema de valores por el cual la gente estaba a partir de entonces, en gran medida de forma inconsciente, dirigida en su comportamiento social.

Pero la tradición histórica es, como se dice, de ayer; en ninguna parte hemos superado realmente lo que Thorstein Veblen llamó «la fase depredadora» del desarrollo humano. Los hechos económicos observables pertenecen a esa fase e incluso las leyes que podemos derivar de ellos no son aplicables a otras fases. Puesto que el verdadero propósito del socialismo es precisamente superar y avanzar más allá de la fase depredadora del desarrollo humano, la ciencia económica en su estado actual puede arrojar poca luz sobre la sociedad socialista del futuro.

En segundo lugar, el socialismo está guiado hacia un fin ético-social. La ciencia, sin embargo, no puede establecer fines e, incluso menos, inculcarlos en los seres humanos; la ciencia puede proveer los medios con los que lograr ciertos fines. Pero los fines por sí mismos son concebidos por personas con altos ideales éticos y —si estos fines no son endebles, sino vitales y vigorosos— son adoptados y llevados adelante por muchos seres humanos quienes, de forma semi-inconsciente, determinan la evolución lenta de la sociedad.

Por estas razones, no debemos sobrestimar la ciencia y los métodos científicos cuando se trata de problemas humanos; y no debemos asumir que los expertos son los únicos que tienen derecho a expresarse en las cuestiones que afectan a la organización de la sociedad. Muchas voces han afirmado desde hace tiempo que la sociedad humana está pasando por una crisis, que su estabilidad ha sido gravemente dañada. Es característico de tal situación que los individuos se sienten indiferentes o incluso hostiles hacia el grupo, pequeño o grande, al que pertenecen. Como ilustración, déjenme recordar aquí una experiencia personal. Discutí recientemente con un hombre inteligente y bien dispuesto la amenaza de otra guerra, que en mi opinión pondría en peligro seriamente la existencia de la humanidad, y subrayé que solamente una organización supranacional ofrecería protección frente a ese peligro. Frente a eso mi visitante, muy calmado y tranquilo, me dijo: «¿Por qué se opone usted tan profundamente a la desaparición de la raza humana?»

einstein.jpg



Estoy seguro de que hace tan solo un siglo nadie habría hecho tan ligeramente una declaración de esta clase. Es la declaración de un hombre que se ha esforzado inútilmente en lograr un equilibrio interior y que tiene más o menos perdida la esperanza de conseguirlo. Es la expresión de la soledad dolorosa y del aislamiento que mucha gente está sufriendo en la actualidad. ¿Cuál es la causa? ¿Hay una salida?

Es fácil plantear estas preguntas, pero difícil contestarlas con seguridad. Debo intentarlo, sin embargo, lo mejor que pueda, aunque soy muy consciente del hecho de que nuestros sentimientos y esfuerzos son a menudo contradictorios y obscuros y que no pueden expresarse en fórmulas fáciles y simples.

El hombre es, a la vez, un ser solitario y un ser social. Como ser solitario, procura proteger su propia existencia y la de los que estén más cercanos a él, para satisfacer sus deseos personales, y para desarrollar sus capacidades naturales. Como ser social, intenta ganar el reconocimiento y el afecto de sus compañeros humanos, para compartir sus placeres, para confortarlos en sus dolores, y para mejorar sus condiciones de vida. Solamente la existencia de estos diferentes y frecuentemente contradictorios objetivos por el carácter especial del hombre, y su combinación específica determina el grado con el cual un individuo puede alcanzar un equilibrio interno y puede contribuir al bienestar de la sociedad. Es muy posible que la fuerza relativa de estas dos pulsiones esté, en lo fundamental, fijada hereditariamente. Pero la personalidad que finalmente emerge está determinada en gran parte por el ambiente en el cual un hombre se encuentra durante su desarrollo, por la estructura de la sociedad en la que crece, por la tradición de esa sociedad, y por su valoración de los tipos particulares de comportamiento. El concepto abstracto «sociedad» significa para el ser humano individual la suma total de sus relaciones directas e indirectas con sus contemporáneos y con todas las personas de generaciones anteriores. El individuo puede pensar, sentirse, esforzarse, y trabajar por sí mismo; pero él depende tanto de la sociedad —en su existencia física, intelectual, y emocional— que es imposible concebirlo, o entenderlo, fuera del marco de la sociedad. Es la «sociedad» la que provee al hombre de alimento, hogar, herramientas de trabajo, lenguaje, formas de pensamiento, y la mayoría del contenido de su pensamiento; su vida es posible por el trabajo y las realizaciones de los muchos millones en el pasado y en el presente que se ocultan detrás de la pequeña palabra «sociedad».


siembra+socialismo.jpg


Es evidente, por lo tanto, que la dependencia del individuo de la sociedad es un hecho que no puede ser suprimido —exactamente como en el caso de las hormigas y de las abejas. Sin embargo, mientras que la vida de las hormigas y de las abejas está fijada con rigidez en el más pequeño detalle, los instintos hereditarios, el patrón social y las correlaciones de los seres humanos son muy susceptibles de cambio. La memoria, la capacidad de hacer combinaciones, el regalo de la comunicación oral han hecho posible progresos entre los seres humanos que son dictados por necesidades biológicas. Tales progresos se manifiestan en tradiciones, instituciones, y organizaciones; en la literatura; en las realizaciones científicas e ingenieriles; en las obras de arte. Esto explica que, en cierto sentido, el hombre puede influir en su vida y que puede jugar un papel en este proceso el pensamiento consciente y los deseos.

El hombre adquiere en el nacimiento, de forma hereditaria, una constitución biológica que debemos considerar fija e inalterable, incluyendo los impulsos naturales que son característicos de la especie humana. Además, durante su vida, adquiere una constitución cultural que adopta de la sociedad con la comunicación y a través de muchas otras clases de influencia. Es esta constitución cultural la que, con el paso del tiempo, puede cambiar y la que determina en un grado muy importante la relación entre el individuo y la sociedad como la antropología moderna nos ha enseñado, con la investigación comparativa de las llamadas culturas primitivas, que el comportamiento social de seres humanos puede diferenciar grandemente, dependiendo de patrones culturales que prevalecen y de los tipos de organización que predominan en la sociedad. Es en esto en lo que los que se están esforzando en mejorar la suerte del hombre pueden basar sus esperanzas: los seres humanos no están condenados, por su constitución biológica, a aniquilarse o a estar a la merced de un destino cruel, infligido por ellos mismos.


albert-einstein0.jpg



Si nos preguntamos cómo la estructura de la sociedad y de la actitud cultural del hombre deben ser cambiadas para hacer la vida humana tan satisfactoria como sea posible, debemos ser constantemente conscientes del hecho de que hay ciertas condiciones que no podemos modificar. Como mencioné antes, la naturaleza biológica del hombre es, para todos los efectos prácticos, inmodificable. Además, los progresos tecnológicos y demográficos de los últimos siglos han creado condiciones que están aquí para quedarse. En poblaciones relativamente densas asentadas con bienes que son imprescindibles para su existencia continuada, una división del trabajo extrema y un aparato altamente productivo son absolutamente necesarios. Los tiempos —que, mirando hacia atrás, parecen tan idílicos— en los que individuos o grupos relativamente pequeños podían ser totalmente autosuficientes se han ido para siempre. Es solo una leve exageración decir que la humanidad ahora constituye incluso una comunidad planetaria de producción y consumo.

Ahora he alcanzado el punto donde puedo indicar brevemente lo que para mí constituye la esencia de la crisis de nuestro tiempo. Se refiere a la relación del individuo con la sociedad. El individuo es más consciente que nunca de su dependencia de sociedad. Pero él no ve la dependencia como un hecho positivo, como un lazo orgánico, como una fuerza protectora, sino como algo que amenaza sus derechos naturales, o incluso su existencia económica. Por otra parte, su posición en la sociedad es tal que sus pulsiones egoístas se están acentuando constantemente, mientras que sus pulsiones sociales, que son por naturaleza más débiles, se deterioran progresivamente. Todos los seres humanos, cualquiera que sea su posición en la sociedad, están sufriendo este proceso de deterioro. Los presos a sabiendas de su propio egoísmo, se sienten inseguros, solos, y privados del disfrute ingenuo, simple, y sencillo de la vida. El hombre sólo puede encontrar sentido a su vida, corta y arriesgada como es, dedicándose a la sociedad.

La anarquía económica de la sociedad capitalista tal como existe hoy es, en mi opinión, la verdadera fuente del mal. Vemos ante nosotros a una comunidad enorme de productores que se están esforzando incesantemente privándose de los frutos de su trabajo colectivo —no por la fuerza, sino en general en conformidad fiel con reglas legalmente establecidas. A este respecto, es importante señalar que los medios de producción —es decir, la capacidad productiva entera que es necesaria para producir bienes de consumo tanto como capital adicional— puede legalmente ser, y en su mayor parte es, propiedad privada de particulares.

En aras de la simplicidad, en la discusión que sigue llamaré «trabajadores» a todos los que no compartan la propiedad de los medios de producción — aunque esto no corresponda al uso habitual del término. Los propietarios de los medios de producción están en posición de comprar la fuerza de trabajo del trabajador. Usando los medios de producción, el trabajador produce nuevos bienes que se convierten en propiedad del capitalista. El punto esencial en este proceso es la relación entre lo que produce el trabajador y lo que le es pagado, ambos medidos en valor real. En cuanto que el contrato de trabajo es «libre», lo que el trabajador recibe está determinado no por el valor real de los bienes que produce, sino por sus necesidades mínimas y por la demanda de los capitalistas de fuerza de trabajo en relación con el número de trabajadores compitiendo por trabajar. Es importante entender que incluso en teoría el salario del trabajador no está determinado por el valor de su producto.

20061007182444-18176-estrella-roja.jpg


El capital privado tiende a concentrarse en pocas manos, en parte debido a la competencia entre los capitalistas, y en parte porque el desarrollo tecnológico y el aumento de la división del trabajo animan la formación de unidades de producción más grandes a expensas de las más pequeñas. El resultado de este proceso es una oligarquía del capital privado cuyo enorme poder no se puede controlar con eficacia incluso en una sociedad organizada políticamente de forma democrática. Esto es así porque los miembros de los cuerpos legislativos son seleccionados por los partidos políticos, financiados en gran parte o influidos de otra manera por los capitalistas privados quienes, para todos los propósitos prácticos, separan al electorado de la legislatura. La consecuencia es que los representantes del pueblo de hecho no protegen suficientemente los intereses de los grupos no privilegiados de la población. Por otra parte, bajo las condiciones existentes, los capitalistas privados inevitablemente controlan, directa o indirectamente, las fuentes principales de información (prensa, radio, educación). Es así extremadamente difícil, y de hecho en la mayoría de los casos absolutamente imposible, para el ciudadano individual obtener conclusiones objetivas y hacer un uso inteligente de sus derechos políticos.

La situación que prevalece en una economía basada en la propiedad privada del capital está así caracterizada en lo principal: primero, los medios de la producción (capital) son poseídos de forma privada y los propietarios disponen de ellos como lo consideran oportuno; en segundo lugar, el contrato de trabajo es libre. Por supuesto, no existe una sociedad capitalista pura en este sentido. En particular, debe notarse que los trabajadores, a través de luchas políticas largas y amargas, han tenido éxito en asegurar una forma algo mejorada de «contrato de trabajo libre» para ciertas categorías de trabajadores. Pero tomada en su conjunto, la economía actual no se diferencia mucho de capitalismo «puro». La producción está orientada hacia el beneficio, no hacia el uso. No está garantizado que todos los que tienen capacidad y quieran trabajar puedan encontrar empleo; existe casi siempre un «ejército de parados». El trabajador está constantemente atemorizado con perder su trabajo. Desde que parados y trabajadores mal pagados no proporcionan un mercado rentable, la producción de los bienes de consumo está restringida, y la consecuencia es una gran privación. El progreso tecnológico produce con frecuencia más desempleo en vez de facilitar la carga del trabajo para todos. La motivación del beneficio, conjuntamente con la competencia entre capitalistas, es responsable de una inestabilidad en la acumulación y en la utilización del capital que conduce a depresiones cada vez más severas. La competencia ilimitada conduce a un desperdicio enorme de trabajo, y a esa amputación de la conciencia social de los individuos que mencioné antes.


EstrellaRoja.gif


Considero esta mutilación de los individuos el peor mal del capitalismo. Nuestro sistema educativo entero sufre de este mal. Se inculca una actitud competitiva exagerada al estudiante, que es entrenado para adorar el éxito codicioso como preparación para su carrera futura.

Estoy convencido de que hay solamente un camino para eliminar estos graves males: el establecimiento de una economía socialista, acompañado por un sistema educativo orientado hacia metas sociales. En una economía así, los medios de producción son poseídos por la sociedad y utilizados de una forma planificada. Una economía planificada que ajuste la producción a las necesidades de la comunidad, distribuiría el trabajo a realizar entre todos los capacitados para trabajar y garantizaría un sustento a cada hombre, mujer, y niño. La educación del individuo, además de promover sus propias capacidades naturales, procuraría desarrollar en él un sentido de la responsabilidad para sus compañeros-hombres en lugar de la glorificación del poder y del éxito que se da en nuestra sociedad actual.

Sin embargo, es necesario recordar que una economía planificada no es todavía socialismo. Una economía planificada puede estar acompañada de la completa esclavitud del individuo. La realización del socialismo requiere solucionar algunos problemas sociopolíticos extremadamente difíciles: ¿cómo es posible, con una centralización de gran envergadura del poder político y económico, evitar que la burocracia llegue a ser todopoderosa y arrogante? ¿Cómo pueden estar protegidos los derechos del individuo y cómo asegurar un contrapeso democrático al poder de la burocracia?

t224196-0.jpg


FUENTE
 
¿Bestialismo?...Oh,Disculpa lei mal es Socialismo...
 
Es interesante tu articulo, sin embargo no apoyo el socialismo pues tengo mis propias conclusiones y pensamiento acerca de este tema. No soy muy conocedor de este tema pero me gustaría que me respondieran... ¿si el socialismo es un modelo social tan efectivo.. porque las grandes potencias no lo usan? O países con un modelo parecido (supongo saben cual) han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países.

No me mal interpretes, no es una pregunta retadora mas bien quiero saber cual es tu opinión acerca de esto. Y quiero dejar claro desde este momento que respeto tu punto de vista y espero no tomes este post como ofensa.
 
¿Bestialismo?...Oh,Disculpa lei mal es Socialismo...

Webeo? Oh, Disculpa, escribí mal es Trolleo.

Pero de todas formas esa ultima imagen se me hace pero que si bien trucada.

Con respecto al texto, se me hace atinada la lista de defectos del capitalismo, pero no veo que demuestre porque el socialismo es mejor, a menos claro que se acepte el chiste del "menos malo".

EDITO:
¿si el socialismo es un modelo social tan efectivo.. porque las grandes potencias no lo usan?

Poruqe las grandes potenicas, mi querido amigo, están cimentadas con los cadáveres de miles de esclavos y empobrecidos que perecieron en jornadas inhumanas por un salario irrisorio, bajo la esperanza de que "algún dia llegarán a la cima". Y la vida no les alcanzó para salir de la pobreza.

Por las venas de los grandes países europeos corre sangre de incas y aztecas mezclado con plata de Potosí. Los ladrillos con los que se cimentad USA son de oro, oro nazi, oro suizo y papel haitiano. Japón ha progresado por capricho de USA. Y los chinos aprovecharon muy bien la demografía: Aprendieron que es más productivo un chino trabajando que un chino protestando.
 
Es interesante tu articulo, sin embargo no apoyo el socialismo pues tengo mis propias conclusiones y pensamiento acerca de este tema. No soy muy conocedor de este tema pero me gustaría que me respondieran... ¿si el socialismo es un modelo social tan efectivo.. porque las grandes potencias no lo usan? O países con un modelo parecido (supongo saben cual) han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países.

No me mal interpretes, no es una pregunta retadora mas bien quiero saber cual es tu opinión acerca de esto. Y quiero dejar claro desde este momento que respeto tu punto de vista y espero no tomes este post como ofensa.

muy facil karnal!! por que en eso paises "potencia" los que tienen el poder son unos cuantos, y el pueblo no, cuando existia el CAME ,cuba tuvo mas de 6 veces desarollo economico que gringolandia, pero ya vez no todo lo bueno dura para siempre.
 
Y que me dicen respecto a:
"¿O países con un modelo parecido "comunismo" han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países?"
 
Es interesante tu articulo, sin embargo no apoyo el socialismo pues tengo mis propias conclusiones y pensamiento acerca de este tema. No soy muy conocedor de este tema pero me gustaría que me respondieran... ¿si el socialismo es un modelo social tan efectivo.. porque las grandes potencias no lo usan? O países con un modelo parecido (supongo saben cual) han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países.

No me mal interpretes, no es una pregunta retadora mas bien quiero saber cual es tu opinión acerca de esto. Y quiero dejar claro desde este momento que respeto tu punto de vista y espero no tomes este post como ofensa.

Porque los sistemas imperialistas son más fáciles de manejar, primero porque entonces la política deja de lado cualquier cuestion moral, y segundo porque las personas pasan de ser sujetos a ser individos. Por lo que se pierde la conciencia colectiva, ésto permite el libre desarrollo del imperialismo en todo su explendor, tanto económico como político social. E imposibilita la creación y expansión de grupos interesados en el bien comunal.
Hablando de los países que lo dejaron, la URSS, con la entrada de Stanlin se convirtió en un tipo de absolutismo burocrático, aunque hubiera seguido manteniendo el nombre de "socialismo" no lo fue en ningun momento.
Cuba por otro lado se mantenia de la exportación a los estados unidos, cuando entraron al socialismo EUA lo único que pudo hacer fue bloquear comercialmente a la isla, durante décadas la exportación que ya no se realizaba la absorbió la URSS, pero a su caida el mantenimiento económico cubano se tornó más complicado.
Y la gente se va porque... pues ya dije, ¿no? nos enseñan a ser individuos, no sujetos por lo que la mayoria venderia su alma por tener un refri con coca-colas :)
 
Y que me dicen respecto a:
"¿O países con un modelo parecido "comunismo" han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países?"

facil, date cuenta que cambian de modelo cuando el lider( este si lider comprometido con la causa) cambia o muere como en el caso de lenin,
y la otra por que escapan , facil igual es gente que le gusta ganar sin mover ni un solo dedo, son parasitos, ya que viven acostas de otro sin hacer nada, solo alimentarse

enjoy_capitalism.jpg
 
Y que me dicen respecto a:
"¿O países con un modelo parecido "comunismo" han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países?"

no hay ningun país con modelos parecidos al comunismo, porque su caracteristica más importante es que no existe el Estado :p
 
Y que me dicen respecto a:
"¿O países con un modelo parecido "comunismo" han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países?"

Dishh, hay algo llamado comas.

Me acuerdo de un pais donde se instalo en anticomunismo. No se si te acuerdas de cierto senador.
f_M000315m_965b628.jpg

Y de las campañas que promovió
mccarthyism3.png


Si mal no recuerdo Cuba está como está porque cierto grupo de personas siente incomodidad por los "molestosos" que quieren hacerle la contra. Y a pesar de todas la medidas, todos los bloqueos y toda la campaña publicitaria, siguen ahi, con cero desnutrición infantil, mientras que en Washington DC se murieron cientos de sin-techos por la última helada, mientras en CCN se veia a niños jugando a los muñecos de nieve al frente del Obelisco.
 
Y que me dicen respecto a:
"¿O países con un modelo parecido "comunismo" han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países?"

Porque tienen un mundo en contra =/ aunque a pesar de ello, tengan cero desnutrición infantil -como dice Alihanz- y bajas tasas de analfabetismo y un gobierno que parece devolverle algo de lo perdido a su gente, como en Bolivia.
 
Y que me dicen respecto a:
"¿O países con un modelo parecido "comunismo" han cambiado de modelo o inclusive sus habitantes intentan escapar de aquellos países?"
Bueno tal ves en México no tengan la mejor repuesta, ya que no es de tendencia comunistas.

Bueno en Nicaragua que es mi país nuestro presidente Daniel Ortega, es de tendencia comunista.

Mira el presidente gobierna bien, el apoya a los pequeños productores, da fondos para la vivienda, en mi opinión la actitud de el es buena. Pero siempre hay personas derechistas o capitalistas que traten de hacer la vida imposible o tratan que el hombre no gobierne bien.

Que es lo que hacen los derechistas?
Pues le votan las leyes, no le aprueban los fondos, lo acusan de loco y un sin numero de cosas, que hacen que el país se vuelva inestable.

El pueblo al ver esa inestabilidad decide irse o viajar, ya que le tiene miedo a una guerra. Puesto que en nuestro país ya paso una guerra en donde estaban los de izquierda o socialistas ( esta fue financiada por la amada URSS )
contra los derechista que eran la contra ( que esta fue financiada por el gobierno de los Estados Unidos)

Donde los derechistas querían sacar o derrocar del poder al socialismo.
 
Hay quienes argumentan que el socialismo ha demostrado ser inaplicable o que se ha traducido en un recorte brutal de libertades y en un asfixiante aparato burocrático, y esgrimen estos argumentos basándose en la experiencia China o de la extinta URSS.
El problema de estos argumentos es que pretenden explicar científicamente, mediante un historismo empírico (bastante falso, como después veremos) algo que está en el terreno de la ética. Ya lo señala Einstein:
En segundo lugar, el socialismo está guiado hacia un fin ético-social. La ciencia, sin embargo, no puede establecer fines e, incluso menos, inculcarlos en los seres humanos; la ciencia puede proveer los medios con los que lograr ciertos fines.

Cuando los primeros dirigentes rusos o chinos obtienen el poder tras sus respectivas revoluciones se encuentran un panorama ciertamente difícil de manejar: dos de los territorios más extensos (y en el caso chino, más poblados) del planeta: habitados por miles de etnias diferenciadas y dispersas geográficamente, centenares de idiomas y dialectos ininteligibles entre sí, pueblos con idiosincrasia diferente, constumbres diferentes, religiones diferentes e Historias diferentes.

Y para poder aglutinar, unificar y controlar todo eso, crearon al monstruo: un inmenso aparato burocrático con tentáculos que se extendieran hasta el más remoto rincón del territorio, alimentado por un sentimiento ultranacionalista homogéneo para aglutinar toda la diversidad de los diferentes pueblos del nuevo Estado-Nación.
No hubieran podido hacerlo de otro modo, pero ahí vinieron las dos primeras contradicciones con la filosofía socialista.

El comunismo es, per se, internacionalista. Forma parte de su misma esencia, de su razón de ser. Contempla al ser humano, al género humano, como un todo, sea un pigmeo o un esquimal. Igual que la Declaración Universal de los Derechos Humanos, todo hay que decirlo.
Los nacionalismos están bien como motor de la emancipación de los pueblos, pero sólo hasta ahí; una vez emancipados no sirven los telones de acero ni de bambú, sino la solidaridad entre los pueblos, la internacional solidaria.
En vez de eso, y ante la amenaza alemana y japonesa, la URSS y China respectivamente se encerraron en sí mismas. Y de ahí no salieron.
La ofensiva alemana y la ocupación japonesa, seguidos de la guerra fría, vendrían a sellar esa dinámica autófaga.

El caso de Cuba es diferente; en la isla para mi opinión sí se están alcanzando unos parámetros auténticamente socialistas en cuanto a lo que desarrollo humano básico y solidaridad internacional se refiere. Los recortes de libertades públicas hay que entenderlos tomando en cuenta en todo momento el brutal cerco económico que lleva padeciendo durante décadas el pueblo cubano.

No es fácil, pero pensemos en el Teorema de Pitágoras; si nosotros intentamos resolver un problema matemático que precisa la aplicación de ese Teorema y el resultado final es incorrecto.. ¿debemos concluir que el Teorema de Pitágoras no sirve? ¿o quizás no será mucho más probable que no hemos sabido o podido aplicarlo?
Quizás debamos concluir, como aquel escritor rumano que si el comunismo nació como una bella aspiración que terminó degenerando, el capitalismo ya nació degenerado.
 
Volver
Arriba