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Bovino de alcurnia
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El tribunal de Justicia del estado de Río de Janeiro ordenó la detención de un sacerdote polaco acusado de pedofilia y de transformar la casa parroquial en una "mazmorra erótica".
En la decisión judicial, parcialmente publicada en la prensa, el juez Alexandre Abrahao Teixeira afirma que "el inculpado es una persona compulsivamente vinculada al sexo con adolescentes".
El padre "reclutaba ese rebaño de jóvenes inocentes para llevarlos a su casa parroquial, subestimando su alta relevancia espiritual, para transformarla en una especie de "mazmorra erótica" donde sumergía a esos jóvenes a las orgías que luego describía, en medio de risitas, en conversaciones con amigos en Internet", denunció el juez.
En el expediente judicial, un joven cuenta que en el 2007, tras haber ejercido como monaguillo, el cura identificado como M.M.S. de la iglesia Divino Espírito Santo del oeste de Rio, lo llevó a la casa parroquial, que estaba vacía.
El joven detalló intentos del padre de convencerlo y cometer actos homosexuales con él.
El padre es acusado de delitos contra las costumbres y corrupción de menores y, si es condenado por atentado violento al pudor, podrá pagar con hasta 10 años de cárcel.
La Iglesia Católica en Río no comentó la denuncia. La pasada semana los más de 300 obispos de Brasil, reunidos en su 48 asamblea nacional, defendieron la condena en la justicia de los curas pedófilos y una reparación a las víctimas de abusos sexuales.
Desde marzo ha habido al menos seis escándalos implicando a sacerdotes acusados de pedofilia en Brasil, el mayor país católico del mundo, donde 74 por ciento de los 190 millones de habitantes se declaran de esa confesión.
En la decisión judicial, parcialmente publicada en la prensa, el juez Alexandre Abrahao Teixeira afirma que "el inculpado es una persona compulsivamente vinculada al sexo con adolescentes".
El padre "reclutaba ese rebaño de jóvenes inocentes para llevarlos a su casa parroquial, subestimando su alta relevancia espiritual, para transformarla en una especie de "mazmorra erótica" donde sumergía a esos jóvenes a las orgías que luego describía, en medio de risitas, en conversaciones con amigos en Internet", denunció el juez.
En el expediente judicial, un joven cuenta que en el 2007, tras haber ejercido como monaguillo, el cura identificado como M.M.S. de la iglesia Divino Espírito Santo del oeste de Rio, lo llevó a la casa parroquial, que estaba vacía.
El joven detalló intentos del padre de convencerlo y cometer actos homosexuales con él.
El padre es acusado de delitos contra las costumbres y corrupción de menores y, si es condenado por atentado violento al pudor, podrá pagar con hasta 10 años de cárcel.
La Iglesia Católica en Río no comentó la denuncia. La pasada semana los más de 300 obispos de Brasil, reunidos en su 48 asamblea nacional, defendieron la condena en la justicia de los curas pedófilos y una reparación a las víctimas de abusos sexuales.
Desde marzo ha habido al menos seis escándalos implicando a sacerdotes acusados de pedofilia en Brasil, el mayor país católico del mundo, donde 74 por ciento de los 190 millones de habitantes se declaran de esa confesión.