Un cabrón Faraón se estaba cojiendo a una de sus esposas, la vieja estaba de perrito y dice:
-"mi señor no siento nada"
el Faraon piensa, "es por el calor", así que llama a su guardia
-guardia, mandeme un esclavo negro con un abanico de plumas gigante para que me eche aire.
llega el negro y comienza a soplar con el abanico
-"mi señor de verdad no siento nada"
-haber negro cambia de lugar y yo les echo aire
el negro saca una arma de 27 cm y le comienza a dar unos palos a la vieja que la consoloban
- "ahora si siento mi señor"
-Vez pinche negro como no sabes soplar