Hola a todos, después de un buen tiempo de no escribir mis relatos aquí estoy de nuevo.

El día de la graduación de los chicos de la escuela me quebraron un foco y la mica de mi carro, ya ven q en esos eventos uno quiere encontrar estacionamiento a como de lugar. Bueno pues al salir de la ceremonia de graduación me encontré con la desagradable sorpresa q le habían pegado a mi coche. Un compañero de la escuela me recomendó q buscara la pieza en un yonke porq la podría encontrar un poco más barata.

Ya como eran los últimos días de trabajo pues lo dejé para ir a buscar la pieza en vacaciones. Una tarde cuando iba a dejar a mis hijas a sus actividades, una a natación y la otra a clases de baile, pasé a un yonke a la salida de la ciudad.

Mi hija más grande iba conmigo, mi compañero de la escuela me había recomendado uno q estaba al lado de una agencia cervecera. Me estacioné en la lateral del libramiento, en frente del yonke, le dije a mi hija q me esperara, al parecer ya no había gente. Toque con las llaves de mi carro varias veces y no salía nadie, me dí la vuelta para irme y de pronto q me contestan.
-Buenas tardes señora, q se le ofrece?
Era una voz fuerte y ronca y algo extraña. Al darme la vuelta para regresarme vi q era un chavo de piel morena, alto, q no era d aquí.
-Usted trabaja aquí?
-Sí, dígame q se le ofrece, ya estamos cerrando pero qué anda buscando.
Ya le expliqué la pieza q andaba buscando. Me cayó bien a primera vista y con lo q me encantan los hombres de raza negra pues me puse algo excitada, jamás imaginé encontrarme con un hombre así aquí en la ciudad.
-Déjeme ver si por aquí hay una pieza así, tome asiento, deje voy a buscarla.
Me quedé impactada, sin palabras, nadamás moví la cabeza diciendo q sí. Al observarlo de espaldas me excitaba más y me ponía a imaginar su tranca en mi vagina. Mi hija estaba en el auto esperando, así q mejor le hablé para decirle q pasaba al siguiente día porq la tenía q llevar a su clase y yo tenía q hacer otras cosas.
-Sí, pase mañana al medio día y ya procuro tenerla.
Siempre él con una sonrisa hacia mi, q al parecer nos agradamos los dos.
Al subir al auto me dice mi hija.
-Mamá, es un negrito o es la grasa q traía.
Ella lo dijo irónicamente, sabe q me encantan esos hombres de raza negra, sabe q son mi debilidad. No es tonta, ha de saber perfectamente porq son mi debilidad, sabe q tiene una madre insaciable, q sólo un buen garrote me aplaca por unos momentos mi calentura.
-Sí, es un negrito como sabes q me gustan.
Yo me sentía muy mojada de mi panocha y sentía los pezones durísimos.
-Y cómo se llama?, apoco trabaja aquí?, de dónde es?
-Ya hija, no se tanto, trabaja ahí, más no sé, ya es tarde y te tengo q llevar a tú clase de baile, mañana regreso por la pieza del carro y le pregunto.
-Ok,pero no creo q no lo vayas a conocer mamá, jajaja.
Ella no es nada tonta, sabe muy bien q no se me iba a ir vivo.
Al dejarla a su clase de baile, chequé el reloj y me quedaban como hora y media para regresar por ellas y entonces decidí regresar al yonke, mi calentura era demasiada.
Casi al llegar al yonke vi q estaba recostado en un mueble q tienen ahí.
Yo andaba con una falda blanca casi hasta los tobillos, pero con una abertura detrás q casi me llegaba hasta las nalgas, pegada al cuerpo, una blusa escotada. Tenía q decirle q me había regresado con algún pretexto.
Me reconoció y se puso de pie, me estacioné y se acercó al carro.
-Discúlpe, me regresé para pedirle si me podía conseguir los 2 faros, porq el del otro lado está algo opaco.
-Claro, pero yo lo ví en buen estado, pero como usted quiera.
Ya no aguantaba más y para entrar en confianza y hacer plática.
-Usted no es de aquí, de dónde es?
-Soy de panamá, pero para buscar una mejor vida, según yo, me salí de mi país y estuve un tiempo en estados unidos. Nadamás q se terminó el trabajo y me vine para acá, antes estuve un tiempo en la frontera, pero aquí me voy a quedar un tiempo para de nuevo volver al otro lado como dicen ustedes.
-Oye te invito una bebida, tengo un tiempo antes de ir por mis hijas y podemos platicar un rato.
-Sí, apenas nos caería bien para la calor.
Subió al carro con la camisa en la mano y fuimos a un negocio q estaba cerca de ahí por unas cervezas. No me quitaba la mirada, me recorría toda de arriba a abajo. Yo excitadísima a mas no poder.
-Se ve q eres muy agradable, me caes bien.
-Gracias, tú también me caíste bien desde q te ví, además he conocido algunos hombres de tú raza, son muy atractivos, al menos para mí.
Ésas fueron las palabras q le dije para q de una vez y sin perder más tiempo nos llevaran a algo más. Ya no me aguantaba las ganas de tener en mi boca esa verga q se le notaba q tenía un tiempo sin entrar a alguna panocha y yo estaba ansiosa q me la metiera.
Sin perder más tiempo le toque la pierna y fuí recorriendola hasta tocar su verga q sentí q luego luego se empezó a poner dura. Baje el cierre del pantalón y saltó una tranca negra q se iba hinchando y haciendose más grande.
Acomodó el sillón q tenía, lo puso de espalda a la calle y así no nos podían ver los q pasaban por la calle.
Yo no me kería desprender de aquella tranca negra q cada vez estaba más antojable.
Me quitó la blusa, y se acomodó totalmente el el sillón, guiaba con su mano mi cabeza, cada vez me la agitaba más rápido. Su verga sentía q me destrozaba mi garganta, pero yo no la dejaba de mamar, no iba a despreciar ese sabor y ese palo q estaba saboreando.
Hasta pensé q se iba a dejar venir en mi boca, pero no fué así, se paró del sillón y me acomodé boca arriba para recibirlo, con las piernas abiertas lo recibí desesperadamente. Sentí su vergota caliente, q no batalló en metérmela casi toda, yo ya empapada de mis líquidos y él de los suyos con saliva mía de la súper mamada q le había dado. Yo estaba en el paraíso, sentir de nuevo una verga así de grande y gruesa en mi panocha era el paraíso, mi perdición.
-Métemela toda papito, la kiero toda completa, no dejes nada afuera!!!
No tardó nada en dejármela ir de un empujón, sentí q mis ojos se me salían!!!
-Estás riquísima, tienes una panochita q parece aspiradora. Me vas a hacer acabar rápido.
-No importa, yo ya no se cuántas veces me hiciste venir papi.
Aquella sambutida de verga negra la disfrutaba intensamente, sentía q la verga me iba a salir por la boca. De pronto me levantó sin sacarla de mi, lo abracé con mis piernas y sentí q aún mas se clavaba su verga en mi.
Me puso en el sofá y acomodó un barril de aceite q estaba a un lado, lo tiró al suelo, puso una cobija sobre el.
-Te puedes subir y abrazar al barril.
Yo estaba calientísima y me subí sin preguntar mas.
-Así vas a ver como la vas a gozar mas.
-Sí, métemela por el culo, por donde tú kieras y como kieras.
Ya acomodada boca abajo y con las piernas abiertas nadamás esperando por dónde iba a recibir su verga.
Me empezó a ensalivar el culo, me metía unos dedos, me escupía y yo ya estaba mas k desesperada por recibir verga!!!
Ya métemela papito, ya la kiero toda otravez.
Me agarró de la cadera, levantó un poco mis nalgas y me la empujó de un jalón completa. Grité de placer!!! Me alcanzó a tapar la boca para q no se oyeran mis gritos de dolor pero a la vez de placer.
-Así gozala puta!!!, así, te voy a romper el culo puta!!!, la kerias toda, aki la tienes adentro toda!!!
Ésas palabras me prendían aún mucho más, me gusta q me traten como lo q soy, una puta.
Jamás había gozado una verga así, me imaginaba q yo estaba arriba de un toro y q otro me metía la verga por el culo, pero estaba montaba en un barril gozando verga negra y suculenta.
La verdad sentía q me perforaba las tripas con la verga, pero no me importó, yo gozaba cada milímetro su verga.
Después d unos minutos sacó su verga y me la puso en la boca para q se la mamara. Me la metió de nuevo en el culo pero antes de dijo.
-Te la voy a meter de nuevo por atrás, para llenarte el culo de leche.
-Sí papito, vacíate en mi culo, kiero tú leche dentro de mi.
Yo sentía el aire q se metía por mi culo, mi culo estaba bien abierto de tantas sambutidas.
Me puso un poco de grasa y me la dejó ir de nuevo, eran unas ensartadas de verga riquísimas!!!, me tuve q meter un poco de la cobija para morderla y no gritar, de pronto me abrazó, señal q no tardaba en recibir su semen por mi culo.
Se dejó venir en mi culo, eran las últimas ensartadas, unos empujones riquísimos q me aventaban semen en mis tripas.
Me abrazó fuerte y sentía cómo estaba ardiendo su leche en mis intestinos.
Después de unos minutos nos levantamos como pudimos.
-Tienes mucho aguante nelly, la verdad una mujer de mi raza nos aguanta muy apenas, pero tú eres otra cosa.
-He cogido con 2 negros como tú al mismo tiempo. Me encantan los negros, ya te habrás dado cuenta porq. Soy muy caliente y difícilmente kedo satisfecha.
Miré el reloj y ya era hora d ir por mis hijas.
-Ya me tengo q ir, nos podemos ver mañana?
-Claro mi amor, nadamás q tengo q tomar algo para reponerme, me dejaste sin fuerzas, tú te ves como si nada.
-Sí, porq mañana kiero ke me des toda la noche, me kedo sola los fines de semana regularmente, así q paso mañana por tí.
La verdad q aparte q comerme la leche de ese negro, me recargó d energía.
Mi ropa quedó un poco manchada, sobre todo la falda, pero no me importó. Me escurría del culo semen de samuel, sentía q bajaban por mis piernas aún cuando me había limpiado.
Nos despedimos y kedé de pasar al siguiente día por él.
Cuando me senté en el asiento de mi coche me dolía mi culo, pero ya qué, no me importaba, nomas de acordarme q hacía unos minutos tenía bien apretada entre mis nalgas y dentro de mi culo una verga enorme, me volvía a excitarme de nuevo.
Al llegar a mi casa, mi hija mayor me preguntó q porq traía la falda manchada de grasa. Ella misma se respondió, se me kedó mirando y se sonrió
-Ya sabes como se llama el negrito mamá?
Y yo entre mi le dije, y no nadamás como se llama hija, sino q hasta ya sé a que sabe ese chocolatote.
Todavía cuando me bañaba, mi culo estaba abierto, además salía semen d samuel y eso q ya habian pasado como 2 horas q me había cogido.