Hace algunos años que vivía junto con mi esposa en un departamento. Siempre fuimos una pareja normal, cada quien con su trabajo. Teníamos una vida sexual activa e intentábamos hacer cosas diferentes en la cama para no caer en la rutina.

En el departamento de junto vivía una milf un poco pasadita de peso,de unos 38 años,pero con unas grandes nalgas y al decir grandes eran realmente grandes. Ella era una vecina muy educada, siempre nos saludaba pero sólo hasta ahí. Salía a dejar y a traer a su hijo de la escuela. Y cuando la veía realmente se me antojaba tocar ese tremendo trasero.

En una ocasión tuvimos una reunión de vecinos y por cuestiones de seguridad se decidió que deberíamos compartir números telefónicos entre los vecinos por si ocurriera alguna emergencia. Pocos días después mi esposa tuvo que salir de viaje por una semana por parte del trabajo. Así es que aquí fue cuando empezó mi aventura.

Resulta que el mismo día que salió mi esposa de viaje recibo un mensaje de mi vecina preguntando si estaría en casa por la noche , a lo cual respondí que sí, y pregunté si necesitaba algo. Me dijo que tenía un problema con su celular y que necesitaba que la ayudara. Le dije a que hr estaría en casa y que cuando llegará le llamaría para ir a su departamento. Al momento de llegar a casa le llame y le dije que en 5 min estaría en su departamento para ayudarla con tu teléfono. A lo cual ella contestó, yo voy para allá.
Tocaron la puerta y la hice pasar. Me saludo como cualquier otro día y me explico que no podía mandar unas fotos por Whatsapp. Así es que le expliqué cómo hacerlo. Me dio las gracias y me pregunto. ¿a donde fue su esposa? Lo cual me sorprendió un poco. Y me dijo, la vi salir en la mañana con una maleta. Así es que le dije que había salido por unos días por cuestiones de trabajo. Entonces fue cuando ella tomó otra actitud un poco atrevida y dijo -¿entonces estamos solos? En ese momento me di cuenta de lo que pasaría, pero obviamente trate de mostrarme sorprendido y un poco confundido como si no supiera lo que me insinuaba.
Estabamos sentados en la sala y le dije. Si estamos solos, ¿por qué? Fue entonces que se acercó a mí y me dijo -quiero hacer esto desde hace mucho- y empezó a besarme. A lo cual yo le correspondía el beso y empezamos a subir poco a poco el tono de la situación, obviamente empecé a tocar ese gran trasero que ella tenía. Lo acariciaba con tantas ganas de quitarle esa falda. Entonces ella se quitó la blusa , digamos que no tenía muchos senos. Eran unos senos pequeños. Así es que desabroche ese sostén y empecé a besar sus senos , eso la calentó muchísimo y empezaba a gemir suavemente. Ella también empezó a desnudarme y al quitarle el boxer dijo. -cuanto se me antojaba esto- y empezó a darme una buena sesión de sexo oral. Yo sentado en la sala y ella incada y comiéndose todo mi miembro. Entonces fue que dijo. Ya no aguanto. Hazme tuya.
Yo aún no le quitaba la falda así es que baje ese cierre y suavemente le quite su gran pantaleta. Ella estaba mojada , así que le empecé a meter 3 dedos para sentir sus fluidos. Me dijo que ya me quería sentir adentro. Así es que nos fuimos a la cama. Entonces busqué un condón, y al ver que me lo iba a poner me pidió que no lo hiciera. Pero obviamente yo no quería hacerlo sin condón. Al final terminé poniendomelo y la empecé a penetrar, lo hicimos en varias posiciones para terminar en mi favorita, de perrito. Debo decir que al principio trate de hacerlo suave pero al ver como gemía y pedía más y más fue que salió mi lado salvaje y empecé a darle como ella lo pedía. Al terminar de hacerlo nos quedamos recostados en la cama por unos 5 min sin decir nada. Yo estaba realmente pensando si había sido real lo que pasó. Y también me sentía mal por haberle fallado a mi esposa en nuestra propia cama.
Entonces ella se vistió y dijo que tenía que irse , me vestí también y la acompañe a la puerta. Al salir ella dijo. Espero que se repita esto. Esa noche hablé con mi esposa, ella me contaba acerca de su viaje y como le fue durante el día. Y entonces me pregunto, -¿y a ti como te fue, me extrañaste? - obviamente no iba a decirle lo que pasó pero no podía sacarme a mi vecina de la cabeza , esa vecina tan sería que teníamos.
Al siguiente día mi vecina me mandó un mensaje diciendo que si podíamos repetir. A lo cual no supe que responder. Una parte de mi si quería y la otra me hacía sentir culpable por mi esposa. Llegue a casa y tocaron a la puerta. Era mi vecina de nuevo. Sin decir nada entró y cerro la puerta y pasó de nuevo. Lo hicimos como unos locos , en esta ocasión fue un sexo más sucio ella me pedia que la penetrara hasta el fondo, que me viniera en sus pechos, y que se lo hiciera como nunca antes se lo habian hecho. Cabe mencionar que ella era divorciada y tenia muchos años sin tener nada de sexo, tal vez fue esa la razon por la cual me pidio que lo hicieramos de esa forma tan exquisita.
Al terminar de hacerlo nos quedamos recostados en la cama hablando sobre el tema y me dijo que queria que repitieramos mas veces, me comento cuantos años que no lo hacia, y ya entrados hablando de sexo le pregunte si alguna vez habia tenido sexo anal, a lo cual contesto que no, y que no le gustaria hacerlo. Mi esposa regresaba al siguiente dia, asi es que le pedi que no me escribiera, que yo lo haria en cuanto tuviera la oportunidad.
Al dia siguiente fui a trabajar como de costumbre y me dijo que queria repetir, y bueno, esa noche llegaria mi esposa, asi es que le dije que no podria, tendria que ser en otra ocasion.

Paso una semana y la verdad yo tambien tenia ganas de verla y hacerlo con mi vecina, pero no encontraba el pretexto perfecto para escapar de mi esposa. Un fin de semana mi esposa y yo nos pusimos a tomar algunas cervezas en casa, la verdad mi esposa si tomo demasiado, y combinando eso con el dia de trabajo que fue pesado se quedo dormida profundamente, y bueno, yo tambien estaba un poco tomado, asi es que llame a mi vecina, le pregunte si podia ir a su casa, que tenia muchas ganas de hacerlo con ella. Me pregunto por mi esposa y le dije que estaba dormida y muy tomada, que no se preocupara, pero me dijo que habia otro problema, su hijo, estaba dormido con ella. Al final la convenci de hacerlo en su sala, sin hacer ruido para no despertar a su hijo, a lo cual accedio y me fui corriendo a su departemento. Al entrar, ella estaba con una bata, cerro la puerta y solo dejo caer la bata para mostrarme su cuerpo totalmente desnudo. Inmediatamente empece a besar sus senos mientras ella me pedia que los mordiera, asi es que empece a morderlos con delicadeza, pero ella pedia que los mordiera mas y mas fuerte. Me sente en la sala y ella me empezo a hacer sexo oral, muy rico. La recoste y la empece a penetrar, esta vez sin condon. Subi sus piernas a mis hombros y ella trataba de gemir, pero no podia hacer ruido por su hijo que dormia en el cuarto. La embestia con tanta fuerza que su cara de placer me exitaba tanto. Despues la puse de perrito y segui dandole lo que tanto queria. Cuando por fin senti que iba a venirme le dije que queria venirme en su boca asi es que se sento, abrio su boca y explote totalmente dentro de ella, fue algo realmente placentero. Terminando nos vestimos y sali rapidamente a mi departamento esperando no encontrar despierta a mi esposa. Pero todo salio perfecto, mi esposa seguia dormida sin saber que yo habia ido a casa de la vecina para tener sexo con ella.

Mi vecina y yo nos mensajeabamos, pero solo lo haciamos mientras yo estaba en el trabajo, antes de llegar a casa borraba todos los mensajes para que mi esposa no encontrara nada. Entre esos mensajes empece a decirle que me quede con ganas de hacerle sexo anal y poco a poco la fui convenciendo. Cuando por fin accedio necesitaba buscar un buen pretexto, asi es que le invente a mi esposa que saldria con unos amigos a tomar unos tragos, no hubo problema, asi es que llame a mi vecina y acordamos vernos afuera de un motel. Antes de esto pase a la farmacia a comprar un lubricante anal y condones. Al llegar al motel, entramos y empezamos a hacerlo, pero yo obviamente queria hacerselo por el ano. Saque el lubricante y se lo puse, ella no estaba muy convencida porque decia que le iba a doler, y yo prometi que lo iba a hacer con delicadeza, la puse en posicion de perrito y empece a untar el lubricante y empece a meter mi dedo en su ano, hacia adentro y afuera, despues meti dos dedos, lubricando perfectamente su ano. Me puse un condon y acerque mi pene a su ano, empece a meterlo, claro, con delicadeza, poco a poco empece a entrar y ella me decia que ya no queria, que le estaba doliendo, pero para ese momento yo estaba tan exitado que no decidi sacarlo y lo empece a meter poco a poco cada vez mas y mas. Ella decia que lo sacara que no aguantaba el dolor pero yo no queria sacarlo, estuvimos asi por un rato, el que dijera que le dolia me excitaba y hacia que no se lo sacara por ningun motivo, asi es que no pare hasta venirme. Al terminar ella estaba adolorida y enojada, porque prometi hacerlo con delicadeza, pero fue tan placentero que no pude contenerme. Tomamos un descanso y tuvimos sexo normal, esta vez fue mas exitante en un motel, con espejos y viendo en la tv peliculas porno. Viniendome en su cara, sus pechos, su enorme trasero.

Esto se repitio muchas veces durante aproximadamente 6 meses, inventaba algun pretexto con mi esposa y me veia con mi vecina en el mismo motel por lo menos dos veces al mes. Despues mi esposa y yo tuvimos que mudarnos al otro extremo de la ciudad pero eso no impidio que yo siguiera viendo a mi vecina, aunque ahora menos frecuentemente.

Hasta la fecha mi esposa no tiene ni idea de lo que hago con nuestra ex-vecina.