Washington. México convertirá su uranio altamente enriquecido de una central nuclear en Veracruz en combustible que no pueda ser empleado en una bomba atómica, en una operación conjunta con Estados Unidos y Canadá, anunciaron los tres países este martes.
El presidente Felipe Calderón anunció la medida durante su intervención en la Cumbre de Seguridad Nuclear en Washington, convocada por el mandatario estadunidense, Barack Obama, para fijar un plan de acción que en cuatro años garantice la localización de todo el material nuclear.
Canadá también había anunciado el lunes que entregaría a Estados Unidos su uranio altamente enriquecido, que puede ser reconvertido para uso militar, en una contribución a la campaña de prevención de un mal uso de ese combustible.
"Agradezco mucho al presidente Obama, y al primer ministro (canadiense, Stephen) Harper (la ayuda) para que el material nuclear de uranio enriquecido, con el que se trabaja en México pueda ser sustituido por uranio de bajo enriquecimiento para efectos de investigación", dijo Calderón en la plenaria de la cumbre.
Ese uranio altamente enriquecido se encuentra en el reactor de la central de Laguna Verde, en Veracruz (este), según fuentes mexicanas.
La conversión del uranio mexicano será supervisada por la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).
El procedimiento "permitirá la eliminación de todo el uranio altamente enriquecido" en México, explicó un comunicado de la Casa Blanca.
"Saludo este paso adelante crítico, que es una señal de nuestra clara alianza trilateral y de nuestro compromiso para la seguridad nuclear en Norteamérica", dijo el presidente Barack Obama, citado en el comunicado.
"Este proyecto (...) demuestra que las acciones colectivas pueden significar resultados concretos", añadió el primer ministro canadiense, Stephen Harper.
La reconversión del uranio altamente enriquecido es una de las medidas que Estados Unidos promueve y apoya para atajar la posibilidad de que ese material pueda ir parar a manos de organizaciones terroristas.
